El juez dice que otro directivo de Acciona tuvo “pleno conocimiento” del acceso a obras por la “influencia” de Santos Cerdán
El juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha acordado la prohibición de salida del territorio nacional, con retirada del pasaporte, para el directivo de Acciona Manuel José García Alconchel, señalado por su presunta vinculación con el caso Koldo. El juez también le obliga a comparecer cada 15 días en los juzgados.
La Fiscalía había solicitado estas medidas tras su declaración. El magistrado le atribuye delitos de cohecho y organización criminal. El alto cargo, suspendido desde hace un mes, ha descartado irregularidades y ha afirmado que, en todo caso, siguió órdenes de su superior, Justo Vicente Pelegrini, también investigado, informan a elDiario.es fuentes jurídicas.
En el auto en el que acuerda dejarle en libertad provisional, el juez afirma que García Alconchel tuvo “pleno conocimiento” del sistema de colaboración urdido entre Acciona y Servinabar, la sociedad considerada el vínculo para cobrar mordidas. Un sistema por el que la gran constructora accedía a adjudicaciones gracias a la “indebida influencia” que el secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán ejercía sobre otros cargos públicos. “A cambio de ello, Servinabar percibiría la correspondiente prestación económica”, escribe el juez.
García Alconchel figura como firmante del memorándum de Entendimiento (MoE) suscrito entre Acciona y Servinabar para la reforma del Puente del Centenario en Sevilla y por el que la primera abonaría a la segunda un 2% del importe total de la adjudicación. Para ese trabajo, el directivo facilitó la contratación de Antonio Muñoz, el cuñado de Santos Cerdán. “Gracias Manuel, no lo olvido!!”, le escribió el dueño de Servinabar, Antxon Alonso, sobre esta contratación. Según el auto, García Alconchel tuvo que disponer “lo necesario para su traslado” al lugar de la obra, dado que el cuñado de Cerdán no tenía medios para hacerlo.
Durante el interrogatorio, García Alconchel ha afirmado que Servinabar había pasado “todos los filtros” de Acciona cuando él firmó el memorándum y que él no tenía competencias para averiguar si esa empresa contaba con los medios necesarios para hacer el trabajo. Ha afirmado, además, que Servinabar realizó los trabajos para los que fue contratada. Y ha negado que alguien de Acciona le hubiera dicho que Santos Cerdán —al que ha dicho que no conocía— pudiera ejercer algún tipo de influencia para acceder a contratos. Ha afirmado, asimismo, que tampoco conoce ni al exministro José Luis Ábalos ni a su exasesor Koldo García.
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