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El PP cede terreno en favor de Vox en el ecuador de la campaña andaluza

promedio encuestas 9 jun

Marcos Pinheiro / Raúl Sánchez

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El PP va a ganar las elecciones andaluzas. Hay consenso en las principales encuestas en que Juan Manuel Moreno Bonilla será el gran triunfador la noche del 19J, pero lo importante tras ese primer titular será el equilibrio de fuerzas en la derecha. El actual presidente de la Junta, que ha puesto fin a su Gobierno con Ciudadanos con el adelanto electoral, se juega el domingo las condiciones para gobernar la próxima legislatura: en solitario con apoyos puntuales o con Vox dentro de su Ejecutivo.

El desenlace dependerá de la capacidad negociadora que cada uno tenga a partir de domingo. En Madrid, Isabel Díaz Ayuso arrasó el 4M, eliminó a Ciudadanos y frenó a Vox. Gobierna en solitario. En Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco perdió 100.000 votos y Vox subió 12 escaños. El Gobierno resultante es una coalición que tiene como vicepresidente al líder de la extrema derecha en la región.

Moreno Bonilla tiene asegurado mejorar sus resultados, pero sus perspectivas han fluctuado durante las últimas semanas. Así lo muestra el promedio de las encuestas elaborado por elDiario.es a partir de los datos de los sondeos publicados desde el mes de abril.

Ese promedio de encuestas le sitúa muy por encima de sus resultados de 2018. Si entonces se hizo con el 20,8% de los votos, ahora ese porcentaje se dispararía hasta el 35,3%, una subida de casi 15 puntos. Moreno Bonilla, que en 2018 no logró ganar a Susana Díaz, se haría ahora con la victoria electoral con un amplio margen sobre el PSOE.

Eso sí, la media de los sondeos señala que en las últimas semanas el PP ha perdido algo de fuelle. El partido estaba a mediados de abril por debajo del 35%, pero se disparó hasta el 37,2% en las dos primeras semanas de mayo, tras el relevo de Casado y la ascensión a la presidencia de Alberto Núñez Feijóo. Ese fue su techo. Desde entonces ha experimentado un ligero pero paulatino descenso, en el que coinciden todos los sondeos.



El promedio le sitúa ahora mismo justo por encima de la barrera del 35%, aunque con ese descenso que se constata en las últimas semanas el PP podría perder ese porcentaje. Las encuestas más pesimistas les sitúan en el 33%, como la de Centra publicada por Okdiario.

Ese descenso ha ido acompañado de una subida paulatina de Vox. La candidatura que lidera Macarena Olona se sitúo en una expectativa electoral del 18% el 20 de mayo, y aunque tuvo un bache a finales de ese mes, ha logrado recuperarse.

El partido de extrema derecha irrumpió en las elecciones andaluzas de 2018 e inició entonces una serie de éxitos electorales. En aquellos comicios obtuvo el 11% de los votos. Ahora, Olona podría superar el 18%. De hecho, las encuestas más optimistas sitúan a Vox por encima del 20%; la más pesimista –NC Report para La Razón– le coloca en el 15,5%.

De cómo se resuelva la noche del 19J dependerá en buena medida el desarrollo de las negociaciones posteriores entre Moreno Bonilla y Olona. El primero aspira a gobernar en solitario, un objetivo que comparte con Alberto Núñez Feijóo, que intenta iniciar su ciclo electoral sin pactar con la extrema derecha; Olona aspira a entrar en el Gobierno andaluz, o al menos a tener la fuerza suficiente como para condicionar sus medidas.

El PSOE y la batalla por la izquierda

Por debajo de esa batalla por el equilibrio de fuerzas está el PSOE, que estrena candidato con Juan Espadas y que aspira a mantener los resultados de 2018, asumida ya la victoria del PP. Lo que muestra el promedio de las encuestas es que los socialistas aún no han alcanzado esos números

Hace mes y medio, los socialistas estaban por debajo del 25% y lograron remontar hasta casi el 27%. Pero en las últimas semanas sus pronósticos electorales han atravesado algunos vaivenes, que le dejan ahora mismo en un 26%. Es decir, dos puntos por debajo del resultado de 2019, cuando ganaron las elecciones pero no pudieron gobernar por el pacto de las derechas. De las más recientes, la de Ágora Integral para Canarias Ahora es la única que le sitúa por debajo del 25%.

A la izquierda del PSOE se produce otra batalla que será determinante el próximo 19J para los movimientos internos de varios partidos de cara a las generales. El cuarto puesto en las elecciones sería para Por Andalucía, la coalición que agrupa a IU, Podemos, Más País, Equo, Iniciativa del Pueblo Andaluz y Alianza Verde. Pero el promedio de encuestas arroja malas noticias. A la espera de los resultados del 19J, se habrían desinflado desde casi el 12% de abril al 8,9% de ahora.

La candidatura que lidera Inma Nieto se cerró con polémica entre los partidos y a última hora, y su gráfica refleja que desde aquello no ha conseguido remontar y se ha alejado la posibilidad de alcanzar el 10% de los votos el próximo domingo. Solo una encuesta les sitúa en esa posibilidad.

La otra coalición de izquierdas, Adelante Andalucía, atraviesa una situación parecida aunque con una expectativa de voto menor. La candidatura de Teresa Rodríguez –que hereda el nombre y la candidata de la coalición integrada por Podemos e IU en las elecciones de 2018– obtendría ahora mismo el 4,4% de los votos, después de haberse situado en el 5,8% en abril. El promedio de las encuestas recoge que atravesó un bajón que le llevó al 3,7% a mediados de mayo, pero que desde entonces ha remontado ligeramente.

Por último, el partido con peores expectativas es Ciudadanos, cuya candidatura encabeza el hasta ahora vicepresidente de la Junta, Juan Marín. Los que fueran socios de Gobierno del PP llegan a estas elecciones tras una sucesión de fracasos electorales, y el promedio de encuestas vaticina que este será uno más.

Según esa estimación, Ciudadanos pasará del 18,3% que obtuvo en 2018, y que le convirtió en tercera fuerza política, al 3,6%. Ese resultado no solo le coloca como último partido en voto, sino que le deja solo unas décimas por encima de la barrera del 3% necesaria para obtener representación en el parlamento. Su consuelo es que todas las encuestas le sitúan por encima de ese límite, y le garantizan, al menos por ahora, esquivar la desaparición en Andalucía.

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