Teresa Romero dice que se siente “atropellada”

La auxiliar de enfermería Teresa Romero, que ya está curada de la infección del virus del ébola, ha pedido justicia por todo lo ocurrido a raíz de su contagio, incluido el sacrificio de su perro Excálibur, y ha afirmado: “Me siento atropellada”. Así lo ha expresado su amiga y portavoz familiar Teresa Mesa que ha podido hablar por teléfono con ella.

La portavoz ha charlado con Romero y su marido Javier Limón, aún ingresados en el hospital Carlos III, justo en el día en el que cinco de las personas que habían contactado con la auxiliar eran dadas de alta tras pasar los 21 días de cuarentena preventiva sin presentar síntomas. Se trata de una médica del centro de salud al que acudió Romero ya enferma, una limpiadora del mismo, dos empleadas de una peluquería a la que fue la enferma y la amiga que la acompañó. Restan 11 contactos que siguen en observación. La última fecha para descartar contagios, actualmente, es el 27 de octubre.

También este jueves se ha conocido que la Asociación contra el Maltrato Animal ha presentado una denuncia contra el consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, y el director general de Ordenación e Inspección, Manuel Molina, por la gestión del sacrificio del perro de la contagiada, Excalibur. El animal fue sacrificiado en virtud de una resolución de 7 de octubre que se basaba en una orden judicial. La asociación entiende que ha habido prevaricación en esas acciones ya que la autorización judicial, dicen, se limitaba a la entrada en el domicilio del matrimonio y no se extendía a la eutanasia del animal, según Europa Press.