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El CSIC pide un “adelanto” de dinero al Gobierno para evitar el colapso

Sede central del CSIC, en Madrid / UCM

Materia

Información publicada originalmente en Materia

El mayor organismo público de investigación de España, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), está negociando un “adelanto” de fondos con el Gobierno para poder mantener su viabilidad económica. Así lo ha explicado a Materia el presidente de la institución, Emilio Lora-Tamayo. El CSIC, formado por más de 100 centros científicos repartidos por toda España, atraviesa una situación económica grave ya que “le faltan 100 millones de euros” para este año que aún no ha conseguido obtener, ha detallado Lora-Tamayo, que ha asistido hoy al Senado a la presentación del plan y la estrategia de I+D del Gobierno hasta 2020, que ha presentado Carmen Vela.

Ante la imposibilidad de obtener esos 100 millones de euros de golpe, la institución está negociando con el Gobierno un “adelanto de las mensualidades” que el organismo debe recibir del Estado a lo largo de este año. “Se trataría, por ejemplo, de recibir en mayo las transferencias departamentales correspondientes a dos o tres meses, es decir, junio y julio”, ha explicado Lora Tamayo. Esta operación, que aún no está cerrada con el Gobierno, daría un respiro al CSIC en forma de “cash flow”, es decir, liquidez disponible en sus maltrechas arcas.

Lora-Tamayo no ha concretado qué cantidad concreta adelantaría el Gobierno. El presidente del CSIC sí ha asegurado que el arreglo no cubrirá todo el agujero de 100 millones que necesita el CSIC, pero sí permitiría aliviar la grave situación presupuestaria que atraviesa la entidad mes a mes.

21 contratados este año

Lora-Tamayo ha recordado que ya hay un plan para hacer frente al déficit de 150 millones de euros que tiene el CSIC para este año. Ese plan ya prevé el ahorro de 50 millones de euros, con lo que quedan esos 100 millones de euros para cuadrar las cuentas del organismo.

El CSIC emplea a 15.000 personas, entre ellos 6.000 investigadores. La institución lleva varios años acumulando recortes en sus presupuestos a los que hasta ahora había hecho frente con los remanentes que quedaban en caja y que ahora se han esfumado. El año pasado la institución ya se vio obligada a paralizar pagos temporalmente debido a la falta de presupuesto y la necesidad de asegurar las nóminas de sus empleados. Al problema presupuestario se suma ya otro de personal. Las restricciones impuestas por el Gobierno para reducir el déficit sólo permiten cubrir una de cada diez plazas públicas que quedan libres por jubilaciones y otros motivos, con lo que el CSIC podrá contratar este año a 21 científicos titulares.

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