Andalucía oferta 700 contratos sanitarios sin aclarar qué provocó la crisis de los cribados ni el número total de afectadas

El presidente Juan Manuel Moreno ha colocado este miércoles a su mano derecha, el consejero de Presidencia Antonio Sanz, al frente de la cartera de Salud, para sofocar la crisis sanitaria y política que ha provocado el escándalo de los retrasos en el cribado de cáncer de mama. En su primera comparecencia, tras el Consejo de Gobierno, Sanz ha salido con 100 millones de euros extraordinarios y una oferta de empleo para 705 sanitarios, muchos de ellos especialistas en las áreas donde se concentra la crisis (radiólogos...).

Pero, en hora y media de comparecencia, el Gobierno andaluz ha sido incapaz de aclarar cuál fue el origen de esta falla en el plan de detección precoz del cáncer de mama y, sobre todo, cuál es su alcance. Sanz ha anunciado auditorías internas y “planes de choque” para “mejorar” los cribados de cáncer de mama, de colon y de cérvix, pero la Junta no ha revelado que exista un problema en otros protocolos distinto al que denunció hace dos semanas la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama).

“El perímetro es el perímetro”, ha respondido el nuevo consejero de Salud, cuando le han preguntado si el Servicio Andaluz de Salud (SAS) sigue perimetrando la crisis de los cribados en la cifra que anunciaron hace dos semanas: 2.000 mujeres con un diagnóstico dudoso o “no concluyente” de cáncer de mama a las que se informó con meses y años de retraso de ese primer diagnóstico.

Sanz ha asegurado que han llamado a todas para citarlas a una segunda prueba antes del 30 de noviembre, pero acto seguido también ha anunciado que “seguirán haciendo más y múltiples llamadas”, un “seguimiento completo, integral y global” y un “sistema de control y seguimiento permanente”. ¿A cuántas mujeres más han llamado hasta el momento? ¿Qué criterios se ha seguido para identificar a esas 2.000 mujeres y qué criterios se siguen para llamar a más mujeres? Son preguntas que las afectadas se hacen y que el nuevo consejero de Salud no ha respondido.

El plan de choque anunciado este miércoles también ha dejado grandes lagunas: la solución “integral” que propone la Junta pasa por contratar a más profesionales -705 más- y ofrecer incentivos económicos a los que ya están en el SAS para que alarguen voluntariamente su jornada por las tardes y durante los fines de semana.

La “complejidad de encontrar nuevos sanitarios”, que el consejero de Salud ha admitido, es que para algunas especialidades, como radiólogos, la bolsa de sustitutos está vacía, y que el SAS ya había exprimido al máximo los autoconciertos, esto es, la ampliación de jornada. De las 65 plazas de radiólogos anunciadas por el presidente hace una semana para taponar la crisis de los cribados, sólo han contratado a uno a media jornada en el hospital sevillano Virgen del Rocío, donde la Junta focaliza el 90% de los casos afectados.

“Ojalá pudiéramos cumplir el objetivo de los más de 700 profesionales, estamos dispuestos a asumir todas las culpas, pero hay que destacar el interés por contratarles”, ha subrayado el número dos del Gobierno andaluz. Sanz empieza ahora una andadura difícil por la que han pasado previamente tres consejeros de Salud: Jesús Aguirre, hoy presidente del Parlamento andaluz; Catalina García, hoy consejera de Medio Ambiente; y Rocío Hernández, dimitida la semana pasada.

La Junta dice que no renuncia a ningún profesional que se haya marchado fuera de Andalucía o la privada, que es una de las denuncias que hacen los sindictos médicos y la oposición. Sanz ha insistido mucho en valorar los incentivos económicos para “hacer más atractiva” la contratación, y que “los facultativos que están fuera de Andalucía, vuelva”.

El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento del plan de acción puesto en marcha por la Junta de Andalucía para el impulso de los programas de cribados de cáncer de colon y de cuello de útero dotado con 89 millones de euros y que prevé la contratación de 586 profesionales, desde administrativos e informáticos a facultativos especialistas de áreas como digestivo, anestesia o ginecología.

Este plan de acción, que complementa al plan de choque para la mejora de la atención a las mujeres en las unidades de cáncer de mama presentado la semana pasada con una inversión de 12 millones de euros y la contratación de 119 profesionales, persigue cuatro objetivos principales con la intención de que los programas de detección precoz sean más rápidos, claros y eficaces. En total, se destinan al plan integral de cribados más de 101 millones de euros y se contrata a 705 profesionales.