Deuda, culpa, perdón

Nuestro objetivo último no es otro que ser ex. Ex trabajadores, ex presidentes, ex ferroviarios, extremistas, excomulgados. Así podremos reunirnos con empresarios, presidentes, presidiarios, gente moderadamente centrada y esdrújulos amantes del síncope.

Expaña sueña con ser historia del pasado, como dijo Mariano una tarde de fuerte viento de Levante las Manos, esto es un atraco. Nuestro objetivo penúltimo sería entonces practicar el arte del birlibirloque, mangar de aquella manera en una conocida firma de luz y energía timovoltaica. Tú sabes.

Menos aplicaciones y más garzones, más camareros, más jueces, menos demagogia y más resignación, Menos rollo, Monago, gracioso, que te vamos a dar un buen viaje, a Canarias o a Buenos Aires, a visitar a tu partenaire.

Ladra Wert para Creer que las cuestiones artísticas distraen al alumnado de la verdadera asignatura, temer a la deuda como a ti mismo en el mecanismo del perdón. Wert es un fenómeno viral, como el Risitas. Sabe que en la mentada Expaña molan más las habilidades, la pretecnología, los trabajos manuales sin factura, ni escrúpulos. Tú sabes.

Le ha quedado a usted magnífico el fantástico ático a nostra costa de la cosa nostra.

Desde que no reparten subvenciones a manojitos, actividad cultural cero, así que no lloren ustedes tanto a los jerifaltes y pónganse.

Buena idea, un ministerio del tiempo, ahora que el viento sobra y faltan incentivos al roquefort.

La anteriormente llamada solidaridad vuelve por sus fueros y responde de nuevo a la voz de Caridad, lo suyo sería nacionalizar las huchas del Domund, el Borussia de Domund, y lanzarnos todos a la dura tarea de normalizar la pobreza y compadecer al rico y seguir a pie juntillas la letra pequeña de la ley mordaza. En Cádiz, días atrás, el Banco de Alimentos planteó un SOS a la población, que respondió con arroz de la misma marca de emergencia urgente y la sensibilidad de la que carecen precisamente los amos del calabozo. Echaremos de menos a los mecenas del hambre e invocaremos las ganas de comer, exigiremos el rescate de los busdenbancos mortales de necesidad, y en un momento dado, romperemos la urna a voto limpio. Tú sabes.

El señor Ánsar, por sus partes, viene a darnos lecciones y comunica a sus fanes que resultan contraproducentes tantas normas contra la corrupción, el chaval se cree que todos son de su condición, el coro entona una plegaria irónica y se escucha un aplauso. ¡Plas!

Ya está aquí la caloret. No falla. Santa Rita se quedó en blanco, en tinto o, según el juez Pluf, en negro. Lo que se da no se quita.

Cada vez que Mariano dice algo, significa Podemos. Grecia es Podemos. Venezuela es Podemos. Por fin, el caos.

El apóstol Pablo se cree el centro del mundo, del mismo modo que Subsana se cree Andalucía y Cristiano cree mucho en sí mismo y después en el dios del penalti dudoso.

Traicionamos subconscientes. Vivimos, o así, en permanente batalla interna de encuestas. Vendemos humo, gastos de envío gratis. Importante empresa quebrada ofrece una amplia gama de obituarios. Es más, se corrigen esquelas elogiosas a la vista de la talla del cadáver con parné moreno en Suiza. Buscamos enemigos. Encontramos problemas. Metemos miedo. Hacemos, a la prisa corriendo, lo que no hicimos antes. Tú sabes.

La culpa de todo la tiene la Untandalucía. Con perdón.