Lluvia, tormentas, viento y oleaje en Andalucía para los próximos días

Desde que comenzase abril el patrón meteorológico en la Península Ibérica ha seguido un único guión, prácticamente inamovible, protagonizado por la presencia de chubascos y tormentas. Los días se han sucedido bajo el paso de nubosidad de tipo convectivo -de carácter tormentoso- alternando sol y lluvia de manera indiscriminada. Pocos rincones de la geografía andaluza han escapado estos días a la presencia de chaparrones puntuales, que en ocasiones han ocasionado problemas por la fuerte intensidad de las precipitaciones.

El gran potencial convectivo, muy energético, ha facilitado incluso la formación de tubas -nubes con forma de embudo y con rotación que no llegan a tocar tierra- y trombas marinas asociadas a tormentas de cierta severidad. Las provincias de Cádiz, Sevilla o Córdoba han visto estos días este tipo de fenómenos meteorológicos llegando incluso ocasionar daños en superficie.

Las precipitaciones, sin ser especialmente abundantes, se han concentrado fundamentalmente en la mitad occidental de la región y en algunos puntos del litoral mediterráneo gracias a la mayor cercanía del centro de la borrasca. Algo que cambiará en los próximos días en los que la actividad tormentosa se desplazará a la mitad oriental gracias a la formación de una baja secundaria sobre el Mar de Alborán a partir del próximo domingo.

Lluvias de hasta 50 litros por metro cuadrado en 12 horas

El fin de semana comenzará con una estabilización parcial de la atmósfera andaluza. La borrasca que estos días nos ha estado afectando tenderá a desplazarse hacia el norte peninsular perdiendo influencia en nuestra latitud. De este modo las jornadas de viernes y sábado notarán una mejoría relativa, en las que, aunque los chubascos aun podrán registrarse en casi toda región, lo harán con menor probabilidad e intensidad que en días anteriores.

Será ya durante la jornada del domingo 19 de abril cuando se produzca un empeoramiento de la atmósfera, concentrado fundamentalmente en las provincias orientales, en especial en Almería, Granada y Jaén. El desplazamiento de la baja secundaria hasta la vertical de Alborán va a favorecer la entrada de flujo húmedo del mediterráneo en capas medias y bajas. Este hecho podrá provocar precipitaciones que localmente serían muy intensas, especialmente en puntos del litoral almeriense y granadino donde la lluvia podría dejar acumulados de hasta 50 litros por metro cuadrado en menos de 12 horas. La formación de esta baja secundaria traerá además fuerte viento de poniente y oleaje al Mar de Alborán, donde las rachas de viento podrán alcanzar los 90 km/h durante la madrugada y mañana del lunes.

‘Pasillo’ atlántico hasta la Península Ibérica

El comienzo de la nueva semana traerá la llegada de una nueva borrasca atlántica hasta el cuadrante suroccidental de la Península Ibérica. La estabilización de las altas presiones entre las Islas Británicas y la Península Escandinava está sirviendo de bloqueo a las borrascas atlánticas que llegan hasta el continente, que se ven obligadas a desplazar su recorrido por latitudes meridionales. Una suerte de ‘pasillo’ que nos beneficia y que podría quedar abierto hasta finales del mes de abril, propiciando la llegada de nuevas borrascas hasta la Península.

La lluvia volverá así a la mitad occidental andaluza desde la tarde del próximo lunes, tras haberla abandonado pocas horas antes en su mitad oriental. Mientras las precipitaciones que afecten durante el fin de semana tendrán un origen convectivo, en forma de chubascos o tormentas, las que empiecen a registrarse entre las jornadas del lunes y el martes en las provincias occidentales estarán asociadas a un sistema frontal que dejará lluvias abundantes en las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz.

El paso del centro de la borrasca hasta el interior de la región hará que las precipitaciones vuelvan a ser de carácter tormentoso, disparándose de nuevo la convección a partir de mediados de la próxima semana. Volveríamos así de nuevo a jornadas con nubosidad de evolución diurna, con precipitaciones dispersas y de cierta intensidad.

Temperaturas muy estables para los próximos siete días

Esta situación de variabilidad atmosférica, pero sin entradas de masas de aire manifiestamente frías o cálidas, hará que las temperaturas experimenten una gran estabilidad de cara a los próximos días. Buena parte de la región tendrá unas máximas que oscilarán entre los 21 a 24 grados hasta la próxima semana, quedando por debajo de los 20 grados en el extremo nororiental andaluz. Las mínimas seguirán rondando los 10 grados en buena parte del interior andaluz y los 13 a 15 grados los litorales atlántico y mediterráneo.