Aragón continúa siendo destino del tráfico de residuos

Las recientes operaciones de la Guardia Civil han puesto en evidencia el tráfico ilegal de residuos desde distintos puntos de la geografía española y europea con destino a Aragón, específicamente a vertederos privados como el de CHAZAR, actualmente en manos del grupo catalán Griñó, o a las empresas instaladas en el polígono Parque Tecnológico de Reciclaje (PTR), pero también, hacia vertederos públicos, de gestión privada, como el de Residuos Industriales de Zaragoza S.A. (RINZA) gestionado por Sertego, o el de Ecoactiva, gestionado por Urbaser. 

Aunque parezcan empresas distintas, Sertego es parte del conglomerado Urbaser, antigua filial de la constructora ACS, conocidas ambas hace unos años como “el cártel de la basura”, de la constructora de Flotentino Pérez pasaron a manos del grupo chino Tianying, quien finalmente las vendió al fondo de inversión americano Platinum.  

En 2015 la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) impuso 98,2 millones en sanciones a 42 empresas y asociaciones dedicadas a la limpieza urbana y el tratamiento de residuos. Urbaser y Sertego, entonces filiales de ACS, recibieron la mayor multa, más de 23 millones de euros, pero la Audiencia Nacional se encargó de anular la sanción con sendas sentencias dictadas en 2017 y 2018. Meses más tarde La CNMC volvió a abrir expediente sancionador a las infractoras.

Ambas empresas operan en el que es denominado triángulo de la basura, muy cerca de la ciudad de Zaragoza. Jesús Maestro, de Ecologistas en Acción Aragón, nos cuenta que tras varias movilizaciones vecinales y ecologistas se consiguió que estos vertederos fueran de titularidad pública. “Nosotros defendíamos que los vertederos no podían ser un negocio, porque claro, una empresa cuanto más residuo gestione más negocio hace, por eso, desde lo público, lo que buscábamos era lo contrario, que los residuos se reutilicen, se reciclen y cada vez haya menos residuos, pero claro, eso no es negocio”, apunta Maestro.

Jesús nos recuerda que es en aquella época cuando desde el gobierno de Aragón se impulsa el Plan de Gestión Integral de Residuos de Aragón (GIRA), que ha ido siendo prorrogado hasta 2022. En la actualidad, existe un borrador de Nuevo Plan GIRA, Prevención y Economía Circular 2022-2030, pero continúa sin estar operativo. 

Lo cierto es que la complejidad y el solape de las normativas europea, estatal y autonómica relacionada con la gestión de residuos ha generado un escenario propicio para prácticas fraudulentas. Grandes mafias han sido identificadas trasladando toneladas de residuos desde otros puntos de Europa hacia España, aprovechando las deficiencias en los controles y la falta de conocimiento por parte de los responsables.

Una situación insostenible

El documental “Insostenible, el rastro de la basura”, que esta semana será proyectado en el marco del festival Ecozine, revela el crecimiento exponencial de las importaciones de residuos hacia Cataluña, con destino final en Aragón, con un aumento significativo en los envíos desde Italia. Las investigaciones desarrolladas en el documental mostraron sin ningún tipo de dudas como desde Nápoles viajaban camiones llenos de residuos vía ferry hasta el puerto de Tarragona, desde donde eran llevados a una planta de triaje del grupo Griñó. 

Así nos lo cuenta Christophe Sion, director del documental: “Nosotros no sabíamos nada. Empezamos a seguir a los camiones que salían de Griñó Ecologic y llegamos a una empresa que se llama CHAZAR, cerca de Zaragoza. Desde esta empresa pudimos ver camiones que salían hacia RINZA. Es un recorrido que hemos hecho varias veces y siempre se reproducía el mismo”.  

Mientras Christophe Sion y Rafa Masarré investigaban para el documental se dieron cuenta que quizá ellos, como periodistas, iban más avanzados que el propio Seprona. De hecho, no es hasta siete meses después que se realizara la Operación Poubelle, en la que se descubrió una trama que transportaba residuos urbanos desde Francia e Italia hasta el vertedero de RINZA, generando beneficios millonarios de manera ilegal. 

En la operación fueron detenidas 22 personas en España acusadas de pertenecer a una organización franco-española que habría obtenido desde 2020 unos beneficios de 16 millones de euros a base de traer residuos de Francia y enterrarlos ilegalmente en Zaragoza. 

La falta de coordinación entre las administraciones autonómicas y locales ha sido señalada como un factor que contribuye al problema. De hecho, desde que se conoció que Zaragoza era el destino final del tráfico ilegal de residuos desde Niza y Nápoles, las autoridades aragonesas no han movido ficha. Izquierda Unida y Zaragoza en Común han expresado su preocupación por la situación, denunciando que Aragón se está convirtiendo en un “paraíso fiscal de la basura”, pero, de momento, todo sigue igual. 

“Si no recuerdo mal, la ley tenía que haber cambiado a primeros de año, para equiparar el canon de residuos en toda España. En Cataluña el canon de gestión de residuos es el doble que, en Aragón, así que sí, es mucho más beneficioso llevar los residuos fuera de Cataluña”, recuerda Christophe Sion. Mientras la ley se adapta para evitar estas diferencias territoriales, la basura seguirá siendo enterrada en la estepa zaragozana. Legal o ilegalmente.