36 mujeres menos. 36 asesinos más

¿Cuántas personas mueren al día en el mundo? Sabemos que son muchas. Nos lo van contando: ayer salió otro terremoto no sé dónde, luego está lo de las guerras, los terribles atentados en capitales europeas porque “te la debía”, el desastre de las personas refugiadas… ¡Cómo está el mundo! Un desastre, qué pena.

¿Cuántas? Sinceramente, no es una pregunta que cuando te despiertas por la mañana inunde tus pensamientos mientras mojas la madalena en el café con leche. A ver lo que dice el noticiario de turno, seguro que sumando desgracias en los diferentes rincones del mundo han vuelto a morir un buen puñado de personas. Y me jugaría algo a que casi todas de una manera muy violenta y a manos de otras.

Estamos a mitad del quinto mes del año y en España han sido 36 momentos puntuales los que hemos dedicado nuestras legañas de madalenas a escandalizarnos por el asesinato machista a otra mujer. Consternación, cara de pena, lavarnos los dientes y atarnos los cordones que llegamos tarde a trabajar o a fichar al paro.

Ha sido noticia, 36 segundos en la cadena de radio que mejor antena pilla; tres párrafos en el periódico local y una imagen en la televisión autonómica. Total, sólo se trata de 36 asesinos más en este país.

Yo hace tiempo que decidí ignorar lo que dicen y muestran los medios de comunicación de masas adueñados por los lobbies del poder. Te adoctrinan sobre lo que es importante y lo que no, sobre lo que está de actualidad y lo que no, de lo que hay que debatir o escandalizarse y de lo que no; y, por supuesto, es la verdad verdadera y no hay otra. Chim pum.

Esta semana que aún no termina, en España, han sido asesinadas tres mujeres a manos de sus compañeros sentimentales. A dos de ellas les han arrebatado toda una vida en las últimas 24 horas.

Esta mañana, mientras me duchaba, he escuchado la radio, también he echado una ojeada a las portadas de los periódicos de más tirada cuando he entrado a la papelería. Ni una sola portada con la noticia de tres asesinatos a mujeres, por el hecho de ser mujeres, en una semana; ninguna apertura del programa de turno alertando por el terrorismo machista que sufrimos la mitad de la población de este país. No voy a ver ninguno de los telediarios de las diferentes cadenas de televisión, pero me juego las madalenas del café de mañana a que tampoco abrirán el parte cagándose en la calavera de los asesinos.

110 mujeres fueron asesinadas en 2015 víctimas de la violencia machista. Es una pena, sí, pero qué le vamos a hacer. 110 asesinos más que engrosan nuestras estadísticas de la vergüenza.

No me cabe duda que el machismo es una explotación interesada del sistema.

Hay mañanas en los que una se levanta y mientras moja la madalena en el café con leche no escucha en las noticias que hoy haya habido ninguna matanza a destacar. Y ya se sabe que si no hay noticia no existe.

Pero resulta que hoy somos 36 mujeres menos en este país de mierda que silencia 36 asesinatos de 36 machistas y no dejo de recordar la frase del poeta Felipe Alcaraz: a veces los silencios son más peligrosos que las balas de los enemigos.

Comienza una nueva semana, es posible que cuando llegue el domingo el machismo tenga un nuevo asesino en su lista de logros. Con suerte la noticia existirá durante ocho segundos, una imagen y dos párrafos. Será noticia, pero poco.

¡Que aprovechen las madalenas!