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“Decepción” ante el cierre de siete zonas jóvenes de Zaragoza: “Ha sido una decisión unilateral y sin diálogo”

Manifestación contra el cierre de zonas jóvenes en Zaragoza

Candela Canales

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Los profesionales y jóvenes que hacen uso de las zonas jóvenes de Zaragoza han expresado su “decepción” ante el cierre definitivo de siete de estos espacios en la ciudad. José Antonio Yagüé, portavoz del colectivo Sos Zonas Jóvenes, ha criticado la actuación “unilateral y sin diálogo” del Ayuntamiento y de la alcaldesa Natalia Chueca, a la que acusa de no haberse reunido con los profesionales: “Ni ha respondido a los jóvenes, no se ha reunido con nadie”. El cierre definitivo se establece en la resolución firmada el 15 de octubre por la concejala delegada de Juventud, Ruth Bravo, y la consejera de Políticas Sociales, Marian Orós, los centros de Arrabal, Parque Goya, La Jota, Santa Isabel, Casablanca y Miralbueno cesarán su actividad a las 00:00 horas del próximo 3 de noviembre. El documento da por válido, además, el cierre ya ejecutado en la de Valdefierro, clausurada el pasado 1 de octubre.

El colectivo Sos Zonas Jóvenes ha anunciado nuevas movilizaciones de cara a los próximos meses, con una “acción masiva en noviembre” y ha criticado el afán “de destruir el tejido social y juvenil. se escudan en datos falseados, tenemos que hacer ver a toda la ciudad el descalabro que supone para tantos jóvenes que se van a quedar sin su recurso de confianza. Ha sido sorpresivo por la traición, la premura y los procesos educativos que se quedan en el aire, sin aviso a trabajadores ni diálogo a los jóvenes”. Zaragoza en Común y el PSOE se han sumado a las críticas por la clausura de estos espacios.

El acuerdo desestima las alegaciones presentadas por las tres entidades gestoras del servicio —PRIDES, Océano Atlántico y Servisar— y avala los informes técnicos y jurídicos que justifican el cese de la actividad “en el marco del nuevo modelo de políticas de juventud” que desarrolla el Ayuntamiento. Dicho modelo, según el expediente, pivota sobre los nuevos equipamientos municipales El Túnel y La Azucarera, cuya puesta en marcha este año “marca el inicio de una nueva etapa” en la forma de entender los servicios destinados a la población joven.

El documento sostiene que mantener abiertas las antiguas casas de juventud —rebautizadas como zonas jóvenes— sería “contrario al interés general” y supondría “una posición de ineficiencia”, al destinar fondos a un modelo “ya superado en sus planteamientos y funciones”. El consistorio argumenta que el cambio responde a criterios de “eficiencia, actualización y mejora continua”, y recuerda que los espacios de nueva generación han recibido ya a miles de jóvenes y concentran “los recursos necesarios para una programación innovadora y ajustada a la realidad actual”.

Las entidades afectadas habían presentado alegaciones alertando del impacto laboral, social y comunitario del cierre, la falta de un periodo transitorio y la inseguridad generada por la ausencia de un nuevo plan detallado. El Ayuntamiento rechaza estos argumentos y niega que exista inseguridad jurídica o indefinición, defendiendo que el nuevo modelo fue diseñado desde 2022 con la participación de jóvenes y técnicos. También insiste en que las zonas jóvenes no constituyen un servicio “esencial ni obligatorio” y que su continuidad tras la extinción de los contratos en 2022 “se ha mantenido únicamente de hecho, por voluntad concurrente de las partes”.

El cierre, que afecta a siete de las 27 zonas jóvenes existentes en la ciudad, ha generado una fuerte contestación social desde que se empezó a intuir y desde que se anunció, el pasado 1 de agosto. La clausura de las zonas jóvenes se ha convertido en una de las medidas más polémicas del Gobierno de Natalia Chueca. El pasado 20 de septiembre, unas 5.000 personas, según los organizadores, marcharon por el centro de Zaragoza bajo el lema 'Ni cierres en las casas ni recortes en los PIEES', exigiendo la paralización de la medida y la apertura de un proceso participativo. La protesta fue convocada por asociaciones vecinales, familias, sindicatos y colectivos socio educativos, con una fuerte presencia de jóvenes que reclamaron “espacios seguros, cercanos y de confianza” en los barrios.

Esa movilización estuvo precedida por un tenso pleno extraordinario celebrado el 11 de septiembre, solicitado por el PSOE, que reunió a decenas de representantes vecinales y juveniles en el salón de plenos y dejó momentos de gran tensión, con gritos de “dimisión” dirigidos a la alcaldesa. Los votos del PP y Vox tumbaron las tres mociones socialistas que pedían paralizar los cierres. Durante la sesión, varios portavoces de asociaciones vecinales y juveniles advirtieron de que la desaparición de las zonas jóvenes supondrá “un retroceso inaceptable” en la política de juventud de la ciudad.

Pese a las reiteradas peticiones de reunión, el Gobierno de Chueca no se ha reunido en ningún momento con el colectivo SOS Zonas Jóvenes, impulsor de las movilizaciones y que agrupa a trabajadores, familias y asociaciones vecinales. El colectivo ha acusado al Ayuntamiento de “falta de transparencia y desprecio a la participación ciudadana”.

Respuesta política

Suso Domínguez, concejal de Zaragoza en Común (ZeC) ha tachado el cierre de “barbaridad”: “La alcaldesa no ha escuchado a los vecinos y vecinas y a los jóvenes y profesionales que durante todo este tiempo han estado diciéndole que esto era un auténtico sinsentido. Estamos renunciando a un modelo de 30 años que se había convertido en una referencia para muchas ciudades de España, incluso del extranjero, y abandonamos un modelo socio educativo con vínculos en los barrios por un modelo basado de macrocentros que lo único que pretenden es el mero consumo de actividades, renunciando a cualquier intervención socio educativa con los y las jóvenes”. Han pedido que se eche marcha atrás con esta decisión.

Desde el PSOE, el concejal socialista Paco Galán también ha lamentado que se haya consumado el cierre de los siete espacios, “dando la espalda a los jóvenes, a los cientos de familias y a los trabajadores que se habían manifestado en contra. Evidencia su falta de rigor y su falta de empatía con los jóvenes. No se pone en su piel ni en sus necesidades”, ha recriminado Galán. que ha recordado que Zaragoza ha sido referente en materia de juventud durante años. “A la señora Chueca solo la sacan en los medios de comunicación por sus sinsentidos, como ya pasó con el Pregón de este año”, ha censurado Galán.

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