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“La burbuja del voto útil al PSOE se va a desinflar en estas elecciones y eso va a beneficiar a Unidas Podemos”

Luis del Piñal, candidato de Unidas Podemos en Cantabria el 10N.

Rubén Alonso

Luis del Piñal repite como candidato de Unidas Podemos al Congreso por Cantabria después de no haber conseguido acta en abril. Este joven político, pero con una legislatura a sus espaldas como edil de Obras en Bezana, donde vuelve a ostentar ese cargo, confía en obtener, esta vez sí, representación el 10N. Y es que, según señala, “el escenario ha cambiado mucho” porque el 28A, “el mal llamado voto útil por el miedo a la extrema derecha hizo que muchas personas que tenían simpatías por Unidas Podemos se decantaran por el PSOE”. “La burbuja del voto útil se va a desinflar”, recalca, asegurando que los conflictos internos que ha sufrido Podemos en la comunidad “son el pasado y no están afectando ahora a la credibilidad de Unidas Podemos en Cantabria”.

¿Qué propuestas tiene Unidas Podemos para Cantabria de cara al 10N?

Creo que lo más importante de esta precampaña es que se hable de la política que importa a la gente, de todas las propuestas que verdaderamente preocupan más allá de cuestiones del campo histórico o del territorial. Que se hable del problema de la burbuja del alquiler y de la precariedad en el trabajo, donde creo que tenemos propuestas con las que podríamos convencer a un montón de gente. Por ejemplo, en el campo de la precariedad, una de nuestras propuestas estrella es una ley que luche contra ella. Si nos estamos presentando a órganos legislativos es precisamente para legislar, porque acabar con la precariedad laboral se puede hacer legislando. Lo que pretendemos es prohibir, por ejemplo, los contratos temporales de menos de un mes si no hay una justificación clara de ello, porque es una vergüenza que estos contratos se estén utilizando, no ya por las empresas privadas, sino por las públicas. Por poner un ejemplo, el ICASS este verano ha estado haciendo contratos de menos de ocho días. Es ridículo y creo que tendríamos que hablar de ello.

Además, la burbuja del alquiler afecta a un montón de cántabros y de cántabras. Tenemos que tener en cuenta que los precios han llegado a subir un 18% en 12 meses y que somos la cuarta provincia de España que más porcentaje de sueldo dedica al alquiler. La única propuesta que se hizo por parte del Gobierno de Cantabria para intentar paliar esto se desmontó porque funcionaba demasiado bien y no se quería dotar de más medios económicos. Es una auténtica vergüenza que esto esté pasando en una comunidad autónoma como Cantabria, que tiene unas capacidades enormes que no se están aprovechando.

¿Cómo afronta la coalición esta repetición electoral después de la debacle en las celebradas en abril?

Creo que ahora el escenario ha cambiado mucho. En aquellas elecciones, sin lugar a dudas, el mal llamado voto útil por el miedo a la extrema derecha hizo que muchas personas que tenían simpatías por Unidas Podemos se decantaran por el PSOE. Ahora han visto que el PSOE ha traicionado a esos votantes que tenía prestados y que ha podido formar un gobierno de progreso y que, en lugar de ello, ha preferido esta repetición electoral por una estrategia electoralista en la cual esperan que van a mejorar sus resultados. La realidad es que pueden empeorar e incluso hacer que el próximo presidente del Gobierno sea Pablo Casado. Puede reducir las posibilidades de pacto del Partido Socialista haciendo que la opción que se está empezando a ver como más probable sea un pacto entre PP y PSOE.

Sinceramente, creo que en estas negociaciones Podemos ha hecho todo lo que estaba en sus manos para que salieran adelante. No debemos olvidar que la proporción de voto a nivel nacional era más o menos la misma que la proporción de voto que tenían entre el PRC y el PSOE a nivel autonómico en Cantabria. Aquí hay coalición, un gobierno bipartito en el que la fuerza más votada ocupa la Presidencia, la segunda, la Vicepresidencia, y las consejerías están repartidas cinco a cuatro. En la propuesta de gobierno, UP ni siquiera pedía eso, sino una proporción menor respecto a los votos que tenía. Me parecen injustificables todas las excusas que pusieron para no formar ese gobierno, que se apartara al líder o que no pudiera gestionar UP ningún ministerio de los considerados de Estado. En definitiva, creo que Podemos hizo todo lo que estaba en sus manos y un poco más para formar gobierno y que al PSOE desde un principio no le interesaba una coalición. Tal vez es que tienen bastantes cosas que ocultar.

¿Entonces cree que ese conocido como voto útil del PSOE de las pasadas elecciones se va a desvanecer?

Yo haría un llamamiento a que las personas votaran lo que consideran que está más cercano a sus ideas. Esto es algo importantísimo y que, desde que el 15M hizo una brecha en el bipartidismo, en España se está empezando a dar. Hay muchas más opciones de voto.

¿Y piensa que la llamada gran coalición entre PP y PSOE es una posibilidad real después de las elecciones?

Creo que si Unidas Podeomos saca unos buenos resultados en estas elecciones, sin lugar a dudas va a estar en el próximo gobierno, algo que creo que es muy necesario para el país. El problema puede estar en que, en el caso contrario, la aritmética y la comodidad de gobernar en gran coalición la hagan una opción muy probable que esté encima de la mesa. Por eso nos estamos dejando todo para que el próximo gobierno que salga de las urnas gobierne para la gente y no para las élites.

¿Quién es más responsable de los resultados que obtenga UP en Cantabria, el partido a nivel autonómico o el contexto nacional?

Ahora vivimos tiempos en los que la política es muy difícil de analizar. Todo va muy rápido y de una semana para otra puede cambiar completamente el contexto. Entonces, no me atrevería a decir en qué está pensando el votante, si en una clave nacional o si en una más cántabra. Es muy difícil aventurarse sobre todo cuando de aquí al 10 de noviembre puede volver a darse la vuelta a la tortilla.

Podemos ha vivido en Cantabria años complicados con permanentes conflictos internos que han afectado a los últimos resultados electorales. ¿Volverán a pasar factura en estos comicios?

Eso son cosas del pasado y no creo que estén afectando ahora a la credibilidad de Unidas Podemos en nuestra comunidad autónoma. Todos los partidos políticos tienen altibajos y se acaban recuperando de ellos.

En la pasada campaña no vino Pablo Iglesias, ¿se espera que lo haga esta vez?

Si te digo la verdad, no lo sé. Lo que sabemos a día de hoy es que abriremos la campaña en Torrelavega con Juantxo López de Uralde y con Juan Carlos Monedero.

Está extendida la idea de que la abstención va a ser el principal enemigo de la izquierda en estas elecciones. ¿Cómo se combate?

Sin lugar a dudas, yo también lo creo y, además, desde algunos medios se está alentando a ese desanimo que existe entre la gente. Y es un enemigo muy importante. Cuando las urnas se llenan, los gobiernos que suelen salir en este país son progresistas, y cuando la abstención es alta, la derecha, que siempre se mueve en la misma horquilla de votos, es cuando llega al poder. Por eso es tan importante llamar a que la gente vote.

¿Sería un fracaso no obtener representación en Madrid?

Creo que sí. Confío plenamente en que UP va a sacar representación por Cantabria y las encuestas, más o menos, así lo van diciendo.

En abril, el PRC sacó por primera vez un diputado asegurando que, de esa forma, “la voz de Cantabria” llegaba al Congreso. ¿Cómo valora el papel del diputado regionalista José María Mazón estos meses y su postura respecto a la investidura de Pedro Sánchez?

Ese tipo de frases son un insulto a Cantabria. Si yo salgo diputado electo voy a dejarme la piel por representar a cada uno de los cántabros y no por representar a las clases poderosas de Cantabria como puede hacer el PRC, que da la impresión de que su preocupación es mantener contentos a los constructores cántabros en lugar de a los cántabros a secas. Creo que Cantabria ha tenido buenos representantes, aunque no demasiados que trabajaran para su gente en este último periodo democrático, y esta unificación que hace el PRC entre su partido y Cantabria es bastante diabólica.

Pero lo más importante de todo es que no debemos olvidar de que en esta corta legislatura, el señor Mazón no ha presentado ninguna iniciativa. ¿Cómo pueden tener la vergüenza de decir que son la voz de Cantabria y después no haberla utilizado para absolutamente nada?. De lo único que se ha preocupado es por cerrar una firma que en realidad no llevaba detrás ni siquiera una dotación presupuestaria. Era un compromiso, que a todas luces se iba a quedar en papel mojado, de traer el AVE a Cantabria. Yo creo que Cantabria tiene necesidades mucho más importantes que tratar antes que el AVE. Sin ir más lejos, si vas a invertir en materia ferroviaria, invierte en las Cercanías. El comité de empresa de Renfe y FEVE, en una reunión que he mantenido con ellos, me han trasladado un escenario estremecedor. Me dijeron que si no se hacía ya un plan de choque es probable que para el verano que viene no hubiera trenes en Cantabria. Nuestros trenes tienen 35 años y las cercanías las utilizan el 90% de la población que se mueve por este medio. ¿Por qué esas obras faraónicas entonces? Y es que cuesta diez veces más un kilómetro de AVE que la misma distancia de vía convencional, tanto el mantenimiento como la construcción. Y el billete también es mucho más caro. ¿Realmente lo que quieren los cántabros por encima de todo es que tengamos un AVE? Yo creo que no. Por eso nosotros insistimos en la importancia de que se ejecute un plan de reindustrialización en Campoo y Besaya. El problema que tenemos es de falta de futuro, de empleo, de emigración juvenil… En Cantabria es muy difícil asentarse y formar una familia. Esas son las cuestiones que de verdad importan a los cántabros y por las que nos dejaremos la piel en el Congreso de los Diputados.

Cuando Íñigo Errejón decidió dar el paso y presentarse con Más País, ¿pensaron en la posibilidad de que surgiese en Cantabria una alternativa en el marco de esa plataforma impulsada por quienes salieron de Podemos durante el conflicto interno?

En un país democrático, las condiciones para hacer un partido y presentarte a las elecciones son bien sencillas y, desde luego, no me voy a meter en lo que hagan otros partidos políticos. También es cierto que desde un principio él dijo que solo se iba a presentar en las circunscripciones con más de siete representantes, por lo que Cantabria quedaba descartada. En ningún momento se me pasó por la cabeza que fuera a hacer eso, porque acabaría siendo un suicidio para todas las fuerzas progresistas.

Y a nivel nacional, ¿cómo puede afectar su irrupción?

Lo desconozco. No me aventuro a hacer análisis, pero leyendo los que hacen otras personas da la sensación de que está quitando más votos al PSOE que a Unidas Podemos para sacar una muy escasa representación. Pero ya te digo que estamos en tiempos tan cambiantes que puede que desde que estamos haciendo esta entrevista al 10 de noviembre haya dado un vuelco absoluto a todo.

¿Cuál es el mensaje que lanzaría a las personas progresistas de Cantabria para el 10N?

Estas pueden ser las elecciones más importantes que hayamos tenido en este país. Nos enfrentamos a dos modelos completamente distintos. Al modelo popular y democrático o al de las élites. Y esto no es algo que digamos nosotros, lo decía el propio Pedro Sánchez en la famosa entrevista con Jordi Évole, en la que dijo que quería pactar con Podemos, pero que no le dejaron las élites. Estas elecciones no las queremos nadie, la repetición ha sido un fracaso absoluto al que nos ha llevado Pedro Sánchez, pero no podemos caer en el desánimo y tenemos que demostrar que realmente mandamos las personas de abajo. Por eso, es importante que en el próximo gobierno esté Unidas Podemos, para que ejecute todas esas medidas de defensa de la clase trabajadora.

¿Sigue presente el mismo miedo a la ultraderecha que había en abril o ha desaparecido un poco?

Ese miedo se ha desvanecido. Esa burbuja se hinchó desde el Gobierno porque estaban muy interesados en el voto útil. Fue una irresponsabilidad por su parte. No debemos olvidar que la ultraderecha siempre ha estado ahí, no ha salido de debajo de las piedras. Siempre ha estado representada en el PP, tanto por sus votantes como por los miembros del partido, ya que si nos fijamos en los principales dirigentes de Vox, tanto en Cantabria como en el resto del Estado, la mayoría son personas que han pasado por las filas del PP. Fue una irresponsabilidad que se hizo única y exclusivamente en clave electoral porque interesaba al PSOE. Es duro decirlo porque a veces cuesta pensar que se pueda ser tan retorcido. El hecho de que ahora se haya desvanecido esa burbuja va a desinflar el voto útil al PSOE y esta vez las personas van a votar lo que consideran que está más cercano de sus ideas, por lo que eso va a beneficiar a Unidas Podemos.

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