Nuevos ayuntamientos reaccionan a la urgencia de los comedores escolares
Fue una de las mayores incertidumbres generadas por la convocatoria de las elecciones autonómicas y municipales de mayo, y por los posteriores cambios de Gobierno en la Junta y en los ayuntamientos. La apertura de comedores escolares en verano o la aprobación de ayudas para acceder a los mismos constituyen una urgencia social que no puede demorarse en el tiempo y a la que han urgido numerosas asociaciones y partidos tras constituirse los Consistorios municipales. Hasta ahora, son varias las ciudades de Castilla-La Mancha que ya han reaccionado, como Toledo, Ciudad Real, Albacete, Alcázar de San Juan o Azuqueca de Henares, a través de la adopción de medidas inmediatas.
La nueva alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, ha sido de las primeras regidoras municipales en adoptar esta medida, tras reunirse con los ediles de Ganemos que apoyaron su investidura. El servicio de ‘comedor de vacaciones’ está en marcha desde el 1 de julio y hasta el 31 de agosto. Se ha ofrecido a unos 360 escolares que hayan mantenido la beca durante todo el curso. “Garantizar esa alimentación adecuada durante el periodo vacacional” es el objetivo que ha afirmado tener el Consistorio ciudadrealeño, que ofrecerá la comida en un total de cinco colegios de la ciudad.
Similar es el número de plazas ofertadas en Albacete. En esta ciudad finalmente serán 300 las que ha puesto en marcha el Ayuntamiento para los comedores escolares durante los mismos dos meses de verano, justo el doble de las que se ofertaron el verano del 2014. Aseguran desde este Consistorio que han sido los propios servicios sociales los que han detectado un mayor número de niños que están en situación o riesgo de exclusión social y por lo tanto se amplía el número de plazas. Este servicio de comedor de verano se llevará a cabo en cuatro centros en los que se desarrollan las actividades de verano, que permanecerán abiertos entre las 7.30 y las 15.30 horas.
En Toledo, el Gobierno local ha presentado un programa de ayudas sociales dirigido a escolares de familias que se encuentran en dificultades económicas, con una partida global de 100.000 euros hasta final de año. De esa cifra, 48.000 euros corresponden a ayudas directas para este verano y afectarán de manera directa a un total de 250 escolares. La alcaldesa, Milagros Tolón, y el responsable de servicios sociales, Javier Mateo, han detallado que esta línea de ayudas tiene como objetivo atender las necesidades de los niños de las familias que peor lo están pasando y que están sufriendo las consecuencias de los recortes sociales y del cierre de los comedores escolares establecido por la Administración regional.
Las becas de comedor han sido también de las primeras medidas adoptadas por el Gobierno municipal de Alcázar de San Juan (Ciudad Real) formado por PSOE y Ganemos-IU. Se trata de un gasto que el Ayuntamiento sufragará gracias a la reducción del 10% de las asignaciones a concejales. El pasado 22 de junio, coincidiendo con el inicio de las vacaciones escolares, entraron también en funcionamiento dos de los campamentos urbanos que el Ayuntamiento de Azuqueca de Henares (Guadalajara) organiza durante el período estival y que dan continuidad al programa nutricional de menores, dando comidas a aquellos que presentan carencias alimentarias debido a la delicada situación de sus familias.
Comedores escolares entre el Gobierno saliente y el Gobierno entrante
En cuanto a las plazas de comedores que son competencia del Gobierno regional, la última mención realizada sobre esta cuestión por el Gobierno saliente de María Dolores de Cospedal fue el pasado 16 de junio. Su portavoz, Leandro Esteban, no concretó entonces la apertura de plazas y se limitó a afirmar que existen ya ayudas “para que los ciudadanos tengan todo lo necesario”, sin afirmar definitivamente si el servicio se instaurará en los próximos meses.
Aunque el nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha se constituirá la semana que viene con el periodo estival ya iniciado, su presidente, Emiliano García-Page, ha anunciado en su discurso de investidura que la primera tarea que encomendará al nuevo consejero de Educación será la aprobación de medidas urgentes para luchar con la malnutrición infantil. De este anuncio se deduce que la apertura de comedores sea uno de los primeros servicios que active la Junta nada más comenzar sus tareas ejecutivas.