Confederación investigará “hasta el final” el origen de las espumas en el Tajo en Toledo
La Confederación Hidrográfica del Tajo ha explicado que “todo apunta” a que la suciedad que lleva el río Tajo desde este sábado se ha originado en Toledo y que la suciedad que todavía se puede ver en el río no guarda relación con el caudal, que llegaba a los 30 metros cúbicos por segundo este sábado. Este valor, afirmaron ante los medios de comunicación, está por encima de la legislación.
El presidente de la Confederación, Miguel Antolín, visitó el río Tajo por Toledo junto al delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio. Antolín aseguró que el episodio no tiene “nada que ver” con el caudal del río y que la suciedad “se hubiera presentado sea cual sea el caudal circulante por el río, es una cuestión de otro tipo”, afirmó. El presidente de la Confederación ha señalado que “quien relacione este episodio con el caudal del río es que está intentando desviar la atención de 'los verdaderos culpables'”.
Análisis de las aguas
Andolín también ha asegurado que se empezaron a tomar muestras del agua desde este mismo sábado para esclarecer que “es lo que está ocurriendo” y quienes son los culpables, un proceso que “llevará tiempo”, ya que algún análisis “requiere un proceso de laboratorio de varios días de duración”. La CHT no ha podido confirmar si las espumas provienen de un vertido, pero que sí existen “indicios” aunque se debe esperar a que el expediente “se arme suficientemente”.
“Si pecamos de imprudentes podemos perjudicar la validez de todo el expediente”, ha expresado. Antolín ha pedido también que la normativa en materia de agua y vertidos se endurezca “algo más”, pues, a su entender, “no puede salir a cuenta pagar una multa y seguir vertiendo sin depurar”. Así, ha calificado el hecho como un “acto de piratería” y ha asegurado que la institución es la “primera damnificada y perjudicada” sobre el asunto.
Sobre las diferentes versiones acerca de los niveles de caudal del río, Miguel Antolín ha argumentando que los datos, que son públicos y “no mienten”, salen del organismo que preside y que lo demás es como “decir que es de noche” cuando es de día o como si a alguien le “pilla” la Guardia Civil conduciendo a gran velocidad y dice “que es mentira”. Por su parte, el delegado de Gobierno, José Julián Gregorio, ha calificado de “intolerable” los hechos.