Más de un centenar de tractores piden apoyo al campo por las calles de Salamanca

Más de un centenar de tractores han recorrido las calles de Salamanca para pedir “más respeto” a las actividades de los agricultores y ganaderos y “apoyo” para la rentabilidad de las explotaciones que mantiene abiertas el sector.

Pasadas las 11.20 horas, ha partido del aparcamiento Madres Bernardas de Salamanca la manifestación, encabezada por dos tractores y cientos de personas a pie, entre ellas representantes políticos de PP, Ciudadanos y Vox.

Entre los presentes han estado el presidente del PP de Salamanca y de la Diputación Provincial, Javier Iglesias, la primer teniente de alcalde de Salamanca y representante de del Grupo Municipal de Ciudadanos, Ana Suárez, el exportavoz del Grupo Ciudadanos en las Cortes, David Castaño, y la secretaria general del Grupo Parlamentario de Vox, Macarena Olona.

A continuación, han secundado la marcha cientos de tractores procedentes de distintos puntos de la provincia, quienes, además de mostrar banderas de las distintas organizaciones profesionales agrarias convocantes -Asaja, Coag y Upa-, también han sumado carteles con alusiones directas a miembros del Gobierno como el ministro de Consumo, Alberto Garzón.

Los asistentes, tras arrancar la marcha por la Avenida de la Aldehuela, han continuado el recorrido por distintas calles de la ciudad para terminar en Gran Vía, a la altura de la sede de la Subdelegación del Gobierno, para leer un manifiesto con sus reivindicaciones.

Antes de la 'tractorada', las tres organizaciones profesionales agrarias ya han reiterado, en un comunicado conjunto, “el profundo malestar que están causando determinadas políticas, tanto privadas como gubernamentales, entre los profesionales del campo”.

“Los problemas que se venían arrastrando desde hace años, no han hecho más que aumentar a pesar, incluso, de que el sector haya demostrado ser esencial, vital y solidario durante la pandemia”, han apuntado las opas en un texto en el que han criticado también “los ataques continuos al sector agrario” y “los incrementos en los costes de producción sin que suba el valor de sus productos o una fauna salvaje que ”mata el ganado y nadie se hace cargo de ello“.