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El 30% de las aulas públicas en Catalunya incumple la ratio prometida a una semana del inicio de curso

Josep Bargalló, en una visita a un centro educativo de l'Hospitalet

Pau Rodríguez

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La promesa de una importante reducción de ratios en las escuelas de Primaria en Catalunya, para reducir el riesgo de contagio en los centros, está todavía por cumplir. A falta de una semana para el inicio de curso, el conseller de Educación, Josep Bargalló, ha reconocido que el 30% de las aulas del sistema escolar público tienen más de 20 alumnos. Esto son miles de grupos, sin contar con la red de escuelas concertadas, donde las ratios tradicionalmente más elevadas. 

En una entrevista en Rac1, Bargalló ha asegurado que estos datos los ha recabado recientemente la inspección educativa, a partir de los planes de apertura de las escuelas, y que actuarán a principios de la semana que viene para corregirlo. “Habrá que hacer una actuación extra respecto a la organización prevista”, ha expresado el conseller.

La gran incógnita es si se contratará a más docentes para desdoblar aquellas aulas más masificadas. De momento, no se han anunciado más dotaciones de las que ya se conocían: unos 6.600 profesionales de aula –entre docentes y personal de apoyo–, una cifra que se dio a conocer en julio, cuando el plan de la Generalitat era mantener las mismas ratios de siempre (de 25 en Primaria y 30 en Secundaria).

Bargalló no ha despejado las dudas que a día de hoy tienen los centros sobre si podrán disponer de más profesionales. “En el caso de que sea necesario [contratar docentes], hay que hacerlo y se hará. Pero no en todos los casos la solución es la contratación de más profesorado”, ha admitido. A estas alturas, pocas direcciones confían en la posibilidad de recibir más maestros, y muchas de ellas han desdoblado aulas para cumplir con las ratios de 20 lo han hecho utilizando a profesores especialistas (de Educación Física, por ejemplo).

Lo que sí ha quedado claro es que no todos los centros de Primaria cumplirán con la ratio de 20. El conseller ha argumentado este sábado que un aula que supere esta cifra de alumnos puede mantener un riesgo bajo si es grande y está bien aireada. “Es más seguro un grupo de 22 en un aula bien ventilada que uno de 15 en un aula pequeña que no tiene estas medidas”, ha defendido. 

También ha asegurado el conseller que esta semana se acabará de resolver la situación de aquellos centros que han solicitado usar espacios municipales para ampliar espacios y garantizar distancias. En Barcelona, el Ayuntamiento ofreció 74 equipamientos. 

La rebaja de las ratios es una de las medidas que más ha indignado a los equipos directivos de cara a la vuelta al colegio. Cuando ellos entregaron sus planes de apertura a finales de julio, de acuerdo con los protocolos sanitarios del momento, la Generalitat consideraba que el número de alumnos por aula no era lo importante. El 24 de agosto, sin embargo, Quim Torra anunció que todas las escuelas de Primaria bajarían a 20 alumnos por aula. Un día después, el documento de Educación y Salud matizaba que este sería el “marco general”, pero que podía haber excepciones. Y, finalmente, esta semana la inspección comunicó a muchos centros que su plan de julio ya era válido. 

En el caso de la ESO y Bachillerato, Torra pidió también un máximo esfuerzo para reducir ratios, aunque no fijó ningún umbral. Muchos institutos, más masificados que las escuelas, tienen ratios superiores a 30.

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