Pedro Sánchez cierra la posibilidad de que Bankia se convierta en banca pública

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este miércoles durante la sesión de control en el Congreso que su Ejecutivo “no esta cerrado a una banca publica”, pero “tiene que ser una banca de inversiones, no tiene sentido es que el Estado tenga depósitos de los ciudadanos” por lo que la estrategia de su Gobierno pasa por “potenciar el Instituto de Crédito Oficial (ICO). De esta manera ha respondido a una pregunta del líder de Unidos Podemos para saber ”¿cuáles son los planes del Gobierno para Bankia?“.

La pregunta del parlamentario de Unidos Podemos llega cuando en menos de una semana comenzará el juicio contra la cúpula de Bankia por la salida a Bolsa en 2011. Entre los acusados están el expresidente de la entidad Rodrigo Rato, el exvicepresidente José Luis Olivas, un grupo de directivos y la auditora Deloitte. Rato y sus exdirectivos se enfrentan a acusaciones como estafa a los inversores y falsedad en las cuentas.

Iglesias le ha recordado que en el congreso del PSOE que elevó a Sánchez como líder de los socialistas, su secretario de Economía Manuel Escudero abogó frente a la fuerte concentración bancaria por desarrollar una banca pública. “En un gobierno progresista lo coherente es tener una banca publica. Alemania, Italia, Suiza o los Países Bajos la tienen. Esta banca pública permite que los ciudadanos más débiles que puedan conseguir líneas de crédito garantizadas y competir con la banca privada. La banca pública es más solvente que la privada, no lo digo yo, lo dice la autoridad bancaria europea tras las últimas pruebas de estrés: las dos mejores entidades son publica, una alemana y otra holandesa”.

El presidente del Gobierno ha señalado que el objetivo es “recuperar los 22.000 millones de euros que se utilizaron para rescatar la entidad” pero ha admitido que “la cotización no permite este objetivo, por lo que no se plantea vender la participación de Bankia”.

“La presencia de lo público en el sistema del sector financiero siempre ha sido un debate de la izquierda”, ha admitido Pedro Sánchez, pero ha concentrado las líneas en las que trabajo su Ejecutivo en el ICO, en “potenciar la regulación”, en la trasposición de directivas europeas y en la creación de la autoridad macroprudencial y la autoridad para defensa del cliente financiero.