Vacaciones en el mar: los cinco mejores destinos para navegar en España
Pocas experiencias se pueden comparar a vivir unas vacaciones en barco, pues es una buena forma de evadirnos y alejarnos de las grandes multitudes para encontrar la absoluta desconexión. Un pequeño barco nos puede llevar a donde muchos no llegan, vivir a nuestro aire y acercarnos a espacios naturales difíciles de apreciar de otro modo. Mecidos por las olas y con vistas a paisajes de auténtica postal. Y aunque España tenga la fortuna de contar con numerosos destinos en los que disfrutar de la navegación, siempre hay algunos que destacan sobre todos los demás.
Navegar en mar abierto reúne todas las características de las principales tendencias de los viajes pospandémicos, aunque ese es solo uno de los motivos que ha hecho incrementar su popularidad entre quienes recurren al alquiler de embarcaciones para gozar de unos días de navegación. Según Click&Boat, la principal empresa de alquiler de embarcaciones de Europa, en los dos últimos años se han creado más de 500.000 cuentas nuevas en su plataforma, ya cuenta con más de 4.600 barcos en España y las reservas en España han aumentado en 2022 un 41% respecto al año anterior.
A la hora de alquilar una embarcación, con o sin patrón, destinos como las Islas Baleares, Denia, Alicante, Sanxenxo o la Costa Brava son algunos de los favoritos para realizar un crucero privado, y es que, como verás, varios de ellos se encuentran entre los cinco mejores destinos para navegar en España.
Las Rías Baixas, en Galicia
Las Rías Baixas es un lugar privilegiado para la navegación. Se extienden por casi toda la costa de la provincia de Pontevedra y parte de la costa oeste de A Coruña, y de las seis rías que hay, quizá las de Arousa, Pontevedra y Vigo sean las que mayor aceptación tienen. Aguas tranquilas, pueblos con encanto que salpican la costa y la singularidad del Parque Nacional Marino de las Islas Cíes. Un lugar único para disfrutar tanto desde tierra como desde el mar, pero donde es importante recordar que se trata de un espacio protegido y que si queremos fondear en alguna de sus tres islas deberemos primero solicitar el permiso pertinente.
La Costa Brava, en Girona
Es difícil quedarse con un único rincón de la Costa Brava, por lo que la mejor opción es aprovechar que nos movemos en barco para ir parando en algunos de sus enclaves más espectaculares. Es un lugar idílico para disfrutar de la calidez del Mediterráneo. A lo largo de 200 kilómetros de costa vamos viendo diferentes calas, incluso algunas con cuevas naturales, así como otras a las que solo se puede llegar desde el mar, como las de Pedrosa, Ferriol y La Foradada, ya en pleno Parque Natural de Massís del Montgrí. No hay que pasar por alto playas populares como las del Castell y de Aro, o la fabulosa Cala Culip, una de los pocas en la zona donde es posible fondear.
Las Islas Pitiusas, en Islas Baleares
Ibiza, Formentera y los islotes adyacentes conforman las conocidas como Islas Pitiusas. Todas las Islas Baleares son un verdadero regalo para los amantes de la navegación, pero aquí podemos disfrutar de auténticos tesoros sin tener que desplazarnos mucho. Alquilar un barco en Ibiza siempre es buena idea, y Cala Salada es una de esas paradas imprescindibles que no puedes pasar por alto, sobre todo si te gustan las playas de arena dorada. Navegando en velero en Menorca encontrarás las aguas más cristalinas que te seguirán allá donde vayas, y no deberías olvidar pasar por la playa de Ses Illetes o Cala Saona, en Formentera, o la espectacular isla de Espalmador. Recuerda, eso sí, que a la hora de fondear es mejor alejarse de las praderas de posidonia.
La Costa Blanca, en Alicante
Todo lo que huela a Mediterráneo es una apuesta segura, pero además es que la costa alicantina suele ofrecer muy buenas condiciones para navegar. Con su clima tranquilo y apacible, su litoral está plagado de playas con bandera azul. Y mientras navegas podrás descubrir numerosas cuevas, así como una gran cantidad de hermosas y llamativas calas. Sin ir más lejos, Sardinera, Ambolo, Granadella, Cala Blanca o Portixol son algunas de las muchas calas en las que se puede fondear. Si buscas rincones naturales de especial belleza no pierdas de vista el Parque Natural de Serra Gelada o la piscina natural de la isla de Portixol.
Las Islas Canarias
En Canarias es muy difícil elegir una sola isla. Cada una tiene un encanto especial y de la más grande a la más pequeña todas son ideales para navegar a su alrededor. Tenerife es la isla de los contrastes, siempre con el Teide como un gigante vigilante. A La Palma no la llaman la ‘isla bonita’ por casualidad, y además es Reserva de la Biosfera según la UNESCO. La Gomera es pequeña e inexplorada, y además del Parque Nacional de La Garajonay ofrece calas de arena negra. El Hierro es también Reserva de la Biosfera y Patrimonio Mundial de la UNESCO y posee fondos marinos de gran valor. Fuerteventura ofrece arena blanca y aguas muy claras, transparentes y cristalinas. Lanzarote es un pedazo de la Luna en la Tierra, con un paisaje extremo, la singularidad del Parque Nacional del Timanfaya y la proximidad de La Graciosa. Mientras que Gran Canaria rompe todos los moldes con las dunas de Maspalomas.
