Nadie se cree la promesa del tren rápido a Madrid para dentro de un año
El crédito de la ministra de Fomento Ana Pastor ya se agotó en Extremadura. Nadie se cree la promesa que hizo anteayer al presidente Fernández Vara de terminar en doce meses el nuevo tendido ferroviario que el Gobierno de Rajoy no ha sido capaz de llevar a cabo en cuatro años, ni da valor a las palabras de una representante política en funciones y dependiente de lo que pase en las elecciones dentro de mes y medio.
Incluso el presidente autonómico Vara ha sido criticado abiertamente por entidades como CCOO Extremadura, que le exige más dureza y una postura más reivindicativa sin dejarse “embaucar” por los cantos de sirena de la ministra.
Según la promesa de Ana Pastor de aquí a un año podría verse a un tren de calidad Alvia, algo desconocido completamente por estas tierras, alcanzando en algunos tramos velocidades de hasta 200 km/h sobre la nueva plataforma AVE equipada de una vía de ancho ibérico, y enlazando en tres horas y media Badajoz con Madrid.
Eso “no es creíble en absoluto”, ha repudiado en un comunicado este miércoles CCOO Extremadura, que reclama al presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, una mayor defensa de los intereses de la región “que la que mostró en la reunión que ayer mantuvo con la ministra”, ante anuncios que a estas alturas de legislatura, cuando faltan 45 días para las elecciones son “cuentos de la lechera”.
El sindicato que lidera Julián Carretero dice no entender la posición “conformista” de Vara, al que insta a no dejarse a “embaucar” y a liderar un frente común contra el aislamiento y la falta de inversiones en Extremadura.
Desde ese mismo sindicato su secretario nacional del sector ferroviario, el extremeño Manuel Taguas, abunda en que es poco creíble que esté funcionando el tren rápido en un año, debido a la “cantidad de promesas anteriores incumplidas que ha habido”, y a que doce meses son pocos para tanto como queda por hacer.
“Cuando se presupueste, se licite, se adjudique, y se ejecute, que a veces no se ejecuta, nos lo creeremos”.
“Ni el año que viene, ni el siguiente”
Con tantos “engaños anteriores” el secretario regional de UGT Francisco Capilla tampoco confía en las palabras de la ministra Pastor. El tren rápido “no estará el año que viene, ni al siguiente”, sentencia cansado de escuchar unas promesas que “los extremeños en general, cuando le hablan del AVE, ya se ponen a reír”.
Hay que dejarse ya de reuniones “donde nos intentan engañar”, añade, y poner en marcha un frente social y político por el ferrocarril para que en el horizonte de dos años pueda ser realidad ese tren rápido y sin renunciar a la alta velocidad porque “no somos más que nadie, pero tampoco menos”.
Desde Podemos su diputada autonómica Jara Romero explica que es complicado creer a la ministra de un Gobierno saliente. “Estamos en precampaña electoral y llegan las rebajas y cualquier cosa que se pueda prometer, como es gratis, pues la anuncian”, y ningún Gobierno en funciones, como el actual, puede comprometerse a nada.
Podemos está por un pacto integral por el ferrocarril, que incluya las mercancías, con participación ciuadana y luz pública ya que Fernández Vara ha ido a Madrid a hablar con la ministra “y aún estamos esperando que presente el proyecto del ferrocarril completo, que nos consta que está realizado, pero que aún no lo ha hecho público”.
El Alvia a 200 a final de 2016 es “un engaño más de una ministra en fuga y en funciones”, acusa Victoria Domínguez, diputada autonómica de Ciudadanos. “El PP lleva cuatro años gobernando en Madrid ¿y ahora se dan cuenta y reconocen que tenemos un ferrocarril deficiente? Espero que los extremeños tomen nota para el 20-D de quién les engaña”.
Monago
El presidente regional del PP, José Antonio Monago, ha criticado a su parte a Vara, por estar ahora de acuerdo con un tren “que antes criticaba”, y por volver de Madrid con las mismas noticias que ya había. Monago prometió ese tren rápido para finales de este 2015, algo que según él no ha sido posible por “problemas de ejecución” pero no por falta de presupuesto “ni de voluntad”.