El menguante mercado laboral gallego en seis cifras
La pasada semana el INE y el IGE desgranaban los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) corresponsal al cuarto trimestre de 2014, un aluvión de datos lo suficientemente amplio como para extraer de él perspectivas positivas y negativas, según la cifra que se priorice. Así, por ejemplo, desde el Gobierno gallego se puso el foco en la bajada interanual del desempleo, con un descenso de unas 17.000 personas, mientras que desde la oposición y las organizaciones sindicales se expresó preocupación por indicadores como el descenso de la población ocupada, la que tiene trabajo. Este es el contexto en el que este lunes llega un análisis más pormenorizado de los grandes números, el que ofrecen los flujos de la población activa, una estadística que deja tras de sí seis preocupantes números para el mercado laboral gallego.
64.800
Son las personas que entraron en la ocupación, esto es, las que pasaron a formar parte de la población que tiene empleo, la cual estaba formada a finales del año que acaba de concluir por un poco más de un millón de hombres y mujeres. Esta cifra implica una variación interanual del 10,2%, la cual podría ser leída como positiva de manera aislada, pero que lo es menos si se tiene en cuenta la cifra inmediatamente siguiente.
78.200
Estas 78.200 personas son las que hacen que las 64.800 anteriores no sean un resultado especialmente positivo. Se trata de los trabajadores y trabajadoras que salieron de la ocupación, es decir, que perdieron su empleo durante el cuarto trimestre de 2014 y no encontraron otro. Son más, en términos absolutos, que las que entraron en la ocupación y, además, su variación interanual es del 15,5%, casi cinco puntos más que la de las personas que entraron a la ocupación, lo que acredita que Galicia, al contrario que la media del Estado, siguió destruyendo empleo en el primer año de la supuesta recuperación económica.
94.200
Es el número de personas que entraron en situación de desempleo durante el período analizado. Como es obvio, a pesar de la bajada total respecto al año anterior, hubo gente que pasó a engrosar el contingente del paro en esos últimos cuatro meses, más aun habida cuenta el incremento gallego de 30.100 personas. Esas 94.200 entradas en el paro suponen un incremento del 7,7% con relación a 2013.
86.000
Es la estimación de mujeres y hombres que salieron del paro. Como en el caso de la ocupación, hace falta leer esta cifra al lado de la anterior para observar su carácter negativo. Salen del paro menos personas de las que entran, y además su incremento interanual, del 2,9%, es sensiblemente inferior al referido 7,7% de las nuevas paradas.
66.300
Son las personas que pasaron a formar parte de la población activa gallega, esto es, de la población que trabaja o está en condiciones de hacerlo y por eso busca un empleo en territorio gallego. Este indicador aumentó un 2,3% con respeto al 2013, en un contexto en el que la merma de la población activa es uno de los síntomas más preocupantes del panorama laboral de Galicia.
71.500
Las mujeres y hombres que salieron de la población activa gallega, que en conjunto cayó en más de 19.000 personas en los últimos doce meses. Son, evidentemente, más personas de las que entraron y, además, su incremento porcentual, del 2,4%, es también ligeramente superior. Según el PP el descenso de la población activa se debe a las jubilaciones y a las personas que ya no “declaran” que están buscando trabajo, si bien los propios datos oficiales refuerzan las tesis que ven en la emigración el principal responsable de estos resultados.