LEER ESTE TEXTO EN CATALÁN
La consellera de Presidencia, Coordinación de la Acción de Gobierno y Cooperación Local, Antònia Estarellas, ha expresado este jueves su confianza en que antes de Navidad los afectados por las fuertes lluvias que azotaron Eivissa entre finales de septiembre y principios de octubre, puedan empezar a cobrar las ayuda inmediatas de alivio que impulsa el Ejecutivo autonómico con una dotación de cinco millones de euros.
Tras una reunión con otras instituciones y expertos para la preparación de un plan para el eclipse total solar de 2026, Estarellas ha explicado que Govern y Consell Insular están ultimando la redacción de los convenios que permitan el lanzamiento de las aportaciones y en cómo se van a distribuir estos cinco millones de euros.
El Govern, según ha explicado, se reunió la semana pasada con diferentes patronales y se encuentra ahora a la espera de las valoraciones de los daños. Cuando estas evaluaciones iniciales estén disponibles, podrán ponerse a disposición las líneas de ayudas a fondo perdido, que prevén servir de alivio mientras llegan otras aportaciones.
Estarellas ha señalado que el Gobierno central aún no ha aprobado la declaración de zona gravemente afectada, lo que impulsaría la canalización de ayudas extraordinarias y acelerar los procesos de reparación de infraestructuras y viviendas.
Tras los embates de la borrasca 'Gabrielle', que provocó inundaciones y derrumbes, el Ayuntamiento de Eivissa solicitó al Estado la declaración de zona catastrófica como consecuencia de los daños materiales ocasionados. La principal estación de la capital ibicenca registró 254 litros por metro cuadrado (l/m2), más de la mitad de lo que suele llover en un año. Las lluvias torrenciales llevaron a activar la alerta por riesgo extremo así como a la suspensión de las clases y de los desplazamientos por mar y aire, además de obligar a la Unidad Militar de Emergencias (UME) a reforzar con 152 efectivos su despliegue en la mayor de las Pitiüses.
Además de las cifras registradas por la estación de Eivissa, la del aeropuerto contabilizó 174 l/m2, el dato más elevado desde 1952, y la de Formentera, 109 l/m2, la mayor cantidad desde que en 2015 se comenzaron los registros. Se trata, en palabras del portavoz de la Aemet Miquel Gili, de “cantidades extraordinarias” que suponen “récords absolutos” en estas estaciones.