Las claves para un verano responsable: estos son los mejores consejos dentro y fuera de casa
Cada riojano consume al día 119 litros de agua, una cifra altísima que, sin embargo, está muy por debajo de la media nacional que se sitúa en 128 litros por persona y día. Además, en España se desperdician alrededor de 650.000 millones de litros cada día, es decir, cada persona desperdicia 38 litros diarios. La situación empeora en verano. Además, el uso global del aire acondicionado consume aproximadamente 7 % de la electricidad mundial, generando alrededor del 3 % de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Ante esta realidad objetiva, es inevitable preguntarse qué se puede hacer para cuidar de nuestro entorno en un momento del año en el que se incrementa el ocio, aumentan las actividades al aire libre y el turismo y tratamos de paliar los efectos del calor con más agua y sistemas de refrigeración.
María Dolores Cima, directora del Máster en Gestión Ambiental y Energética en las Organizaciones de UNIR, tiene claro que la clave está en la puesta en marcha de políticas públicas y en poner facilidades a la ciudadanía. Aun así, cree que es muy conveniente tener siempre presentes unas pautas básicas para actuar de la manera más responsable, también en estos meses en los que tendemos a una mayor relajación en todos los aspectos.
El agua, necesaria pero no infinita
Si hay un consumo que aumenta especialmente durante el verano es el de agua. Cima recuerda que es un recurso “necesario, pero no infinito”, por lo que conviene tener siempre presentes los hábitos de consumo responsable. “Es evidente que, si nos vamos a duchar varias veces al día por el calor, las duchas deberían ser rápidas y cerrar el grifo mientras nos enjabonemos”, explica, “también es importante comprobar bien los grifos porque a veces, por goteo, se pierde muchísima agua”. Recomienda además tener equipos eficientes. “No vamos a cambiar de repente nuestros electrodomésticos, pero si por alguna circunstancia toca cambiar de lavadora, es mejor comprar un quipo moderno porque costará un poco más, pero con los años el ahorro de luz y agua será considerable”.
Las piscinas son otra de las fuentes de gasto de agua en estos meses estivales. “No vamos a pedir que no llenen las piscinas, pero sí debemos demandar que se haga un buen mantenimiento y se sigan siempre las recomendaciones del fabricante”, señala la experta en gestión ambiental, “porque así mantendremos el agua limpia y evitaremos tener que cambiarla”. Para eso, se recomienda medir a menudo el PH o cubrir la piscina para evitar que se evapore y requiera rellenados.
En cuanto al riego, conviene hacerlo por la noche para evitar una menor evaporación y fomentar la retención de agua. “Es también muy interesante, cuando se puede, recoger el agua de lluvia y usarla para regar como se ha hecho siempre en las zonas rurales”, recomienda Cima.
Aire acondicionado y basura
En estos meses de intenso calor, conviene también no perder la cabeza con las temperaturas. “Un mal uso del aire acondicionado no solo hace que aumentemos el consumo sino también que reduzcamos su eficacia”, señala. Por eso recomienda mantener una temperatura constante entre los 24 y los 26 grados. “Cada grado que bajamos, se nota mucho más en el consumo que en el confort”, añade.
Insiste además en que lo importante es que la temperatura que tengamos en casa no tenga una gran diferencia con la temperatura exterior por lo que conviene evitar bajar más la temperatura cuanto más calor hace fuera. Además, recomienda combinar la climatización con otras técnicas naturales como la ventilación o mantener las persianas bajadas en los momentos de más calor o de radiación directa.
También dentro de casa conviene no relajar las costumbres de reciclaje y, sobre todo, en una época de muchas celebraciones, intentar evitar al máximo los plásticos de un solo uso.
La naturaleza sufre en verano
También fuera de casa hay una serie de recomendaciones que deben tenerse en cuenta. Son meses de disfrutar mucho más al aire libre y eso tiene siempre consecuencias para el medio ambiente. Los expertos recomiendan actuar igual que lo haríamos dentro de nuestro propio hogar:
- Si hay un camino marcado, un sendero, una marca de paso, debemos seguirlo y no salirnos de él.
- Si pensamos hacer comida o comer en el cambio, llevar siempre una bolsa para recoger todos nuestros residuos.
- No debemos alterar a los animales ni darles comida, por muy divertido y amable que nos resulte.
- Debemos informarnos siempre sobre el lugar al que vamos y cuáles son las recomendaciones específicas.
- Retirar cualquier resto humano, aunque no sea nuestro, porque la propia basura puede llegar a inflamarse con el calor y generar un incendio.
- Comprobar con toda seguridad que las brasas están apagadas. También las colillas de los cigarrillos.
- Tener especial cuidado con los trabajos del campo porque simplemente desbrozando podemos provocar un incendio con una chispa.
- Intentar reducir al máximo la iluminación artificial: utilizar luces led que calientan menos y son menos intrusivas con los animales.
- Evitar todos los ruidos que se pueda, también los que provocan los vehículos.
La educación siempre es la clave
María Dolores Cima cree que la clave para un buen cuidado del medio ambiente es la educación. “Hay que incidir en ello también durante el verano y por eso son buenos los campamentos, porque hay mucha conciencia sobre el cuidado de la naturaleza”, explica, “también el voluntariado ambiental entre las personas jóvenes, vemos como eso cala y cómo se movilizan cuando hay un vertido o cualquier desastre natural”.
Cree también que las redes sociales son un buen medio para difundir este tipo de mensajes y para predicar con los buenos ejemplos dándoles la máxima difusión. “La clave final ya la tienen las administraciones que son quienes deben poner en marcha políticas específicas y también recursos públicos como papeleras, buenas indicaciones y educación en las escuelas”, añade. Cree también que las redes sociales “son un buen medio para difundir este tipo de mensajes y para predicar con los buenos ejemplos dándoles la máxima difusión”.
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