Madrid compensará la bajada del IBI gravando a los grandes generadores de residuos y la actividad económica
El ayuntamiento de Madrid pretende dar la vuelta al esquema tributario municipal con una redistribución de la actual carga de impuestos de los madrileños. El responsable del área, Carlos Sánchez Mato, ha anunciado en rueda de prensa que la bajada del IBI afectará a todos los inmuebles residenciales de la ciudad y entrará ya en vigor en los presupuestos de 2016. Para compensar la pérdida de ingresos se tocarán las actuales exenciones, que afectan sobre todo a los inmuebles considerados patrimonio y a los que tengan otros usos como instalaciones deportivas, locales comerciales y hostelería. Además, se subirá el impuesto para actividades económicas y se pondrán en marcha otras medidas tributarias que compensarán la merma de recaudación.
Al calor de la recuperación económica, el municipio subirá el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y se creará una nueva tasa que afectará solo a los “grandes generadores de residuos”. Sánchez Mato ha defendido que las subidas de impuestos solo harán mella en los negocios y no en los ciudadanos. Con todo, ha renocido que la Ley de Haciendas Locales le da poco margen para hacer una bajada del IBI progresiva y que la reducción será lineal (es decir, se reducirá el tipo impositivo para todos que actualmente está en el 0,54%). “La bajada es lineal a mi pesar, será una bajada muy significativa que le puede suponer 15 euros a un piso de Carabanchel y 350 a uno del barrio de Salamanca”, ha ejemplificado. Además, las diferencias entre los inmuebles del IBI de uso residencial y los otros usos tampoco puede ser muy grande. Puede afectar a un 10% del parque de inmuebles con uso no residencial y la diferencia en el gravamen tiene un estrecho margen.
Pese a hacer estos anuncios en rueda de prensa, el concejal apenas ha concretado cifras, y mucho menos de cuánto será la bajada (ha dado una cifra aproximada del 10% pero no ha quedado claro si era sobre el tipo impositivo o sobre la factura fiscal de cada ciudadano), ya que espera a comunicar el plan a los portavoces del resto de formaciones políticas. Este debate tiene singular importancia con el PSOE, que apoyó el nombramiento de Manuela Carmena como alcadesa y que solicitó que se llevara a cabo esta bajada, tal y como llevaba en su programa electoral. Desde la corporación municipal solo se ha adelantado que con la bajada del impuesto a inmuebles residenciales se drenarán 18 millones de recaudación pero que con el resto de cambio se logrará captar 31 millones de euros más.
Sánchez Mato ha dejado para más adelante la decisión de gravar a los cajeros automáticos pero no ha descartado esta posibilidad. El concejal ha asegurado que se estudiará cobrar por cualquier “uso de espacio público” desde estos cajeros a las terrazas o a la colocación de un contenedor para una obra. Sin embargo, ha recordado que necesita informes que respalden estas decisiones así que se adoptarán de forma progresiva.
Según el edil, la mejora en la recaudación tiene como objetivo subir el gasto social en el próximo ejercicio. “Será por encima de dos dígitos”, ha asegurado en rueda de prensa donde solo ha dejado caer que estará cerca del 20% de incremento. El encargado de la Hacienda madrileña ha reconocido que le han dado la vuelta a la perspectiva con la que se estaban haciendo los presupuestos. “Hemos empezado por detectar las necesidades del gasto y luego a dotar de recursos”, ha asegurado. El miembro de Ahora Madrid ha sido muy crítico con las restricciones de la ley estatal que obligan a ayuntamientos con superávit a dedicar el exceso de recursos a pagar deuda futura. “No vamos a adelantar pago de la deuda”, ha anunciado al tiempo que recordaba que Madrid tiene capacidad técnica de sobra para devolver la deuda.
En cuanto a la auditoría de la deuda, el concejal ha reconocido que está en marcha pero que esto no signifique que no se vaya a pagar una parte de la misma, ya que gobiernan en minoría y necesitan de los otros grupos municipales para sacar una propuesta así adelante. Con todo, el edil defiende que los ciudadanos deben conocer si se han hecho cosas mal y qué se ha hecho con sus impuestos.