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Madrid volverá a la normalidad cuando la subida de las temperaturas y la lluvia derritan el hielo, según Almeida

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en una visita institucional.

Sofía Pérez Mendoza

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La normalidad “absoluta” volverá a Madrid cuando la subida de las temperaturas y las lluvias previstas para esta semana hagan su parte y derritan el hielo y la nieve acumulados todavía en muchas calles de la capital. Es el pronóstico que ha hecho el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, en una entrevista en Telemadrid. “A lo largo de esta semana podríamos alcanzar este objetivo. Por fin cambia el tiempo. El miércoles va a llover y suben temperaturas. Podremos asistir a una recuperación de la ciudad”, ha explicado el regidor, que ha concretado que la excepción a esta previsión serán los parques como El Retiro, con graves daños en el arbolado, cuya reapertura podría retrasarse “como mínimo dos meses” más.

El alcalde ha avisado de que las lluvias no serán fuertes y “ayudarán a derretir el hielo”, pero ha alertado de que el viento previsto a partir del miércoles “puede poner en peligro la integridad física” de los viandantes por el mal estado de muchos árboles de la ciudad, afectados por Filomena, y la acumulación de hielo en los canalones de los edificios. El Consistorio ha preparado una revisión de las principales alcantarillas -unos 440 puntos llamados técnicamente imbornales- para asegurar que el agua de lluvia y la procedente del deshielo se evacúe correctamente sin que se vean taponadas por ramas de árboles u otros obstáculos como bloques de hielo. También ha dado el alcalde un nuevo porcentaje de calles “transitables”, situado en el 92%. El último balance del Ayuntamiento de Madrid informa de que “prácticamente toda la ciudad será accesible” al final de la jornada del lunes “con algunas excepciones de calles aisladas en las que se continuará trabajando”.

Sobre la declaración de zona catastrófica, el alcalde se mostró confiado en que el Gobierno lo aprobara en el Consejo de Ministros de este martes con el argumento de que con la Dana el Ejecutivo tardó “cinco días” y se abre a negociar la cuantía de las compensaciones. “Lo que me importa es que se declare y una vez declarada sentémonos y hablemos. Veamos cuál es la relación de daños. Yo tengo la obligación de incluir todos los daños que creo se han producido y el Gobierno, de decirme cuáles creen que están debidamente incluidos, pero estoy seguro de que llegaremos a un acuerdo”, ha señalado en la televisión pública autonómica.

La aprobación de la declaración de zona gravemente afectada por emergencia de protección civil -que es su denominación legal actual- ha estado en el alero hasta el último momento, pero fuentes de Interior y Moncloa han confirmado a elDiario.es que finalmente se ha llevado a la reunión del gabinete de este martes. La declaración supone el inicio de los trámites para poner en marcha el lote de ayudas para los territorios afectados tras evaluar los daños y las fuentes consultadas se remiten a la posterior rueda de prensa de la portavoz, María Jesús Montero, para los detalles, informa Irene Castro. 

En el inventario de daños, el equipo municipal de PP y Ciudadanos incluyó, demás de los desperfectos materiales de 400 millones, una estimación de pérdidas económicas de otros 1.000 millones de euros por lo que la ciudad dejó de percibir: los bares, los comercios, los hoteles... pero también el aparcamiento regulado (parquímetros) y las pistas de pádel que no se alquilaron en los polideportivos municipales. Martínez-Almeida ha defendido estos dos conceptos porque “dejar de percibir” esos ingresos “afecta al presupuesto” y “supone un daño”.

El alcalde también ha sido preguntado por el aumento importante de la incidencia en Madrid, solapada con el caos que ha generado el temporal. Ha abogado por “minimizar desplazamientos” y transitar “hacia escenarios más restrictivos si suben los contagios”. Martínez-Almeida ha evitado pronunciarse sobre si ampliaría la horquilla del toque de queda para obligar a los ciudadanos a marcharse a casa antes de las 23 horas -como está vigente en toda la región desde este lunes- porque no es “un ciudadanos más” y tiene que “garantizar que se cumpla” pero ha aprovechado para elogiar el hospital de pandemias construido por la Comunidad de Madrid. “Menos mal que tenemos el Isabel Zendal. Está sirviendo que el resto de hospitales no esté en situación complicada desde el punto de vista asistencial”, ha rematado.

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