La Asamblea General de la ONU se celebra en un instituto de Malasaña

Raúl es un alumno más del instituto Lope de Vega, pero el próximo fin de semana será nombrado secretario general de las Naciones Unidas. Tendrá que moderar y dirigir a decenas de embajadores y delegaciones de hasta 29 países que debatirán el futuro de la humanidad en el interior de este histórico centro de enseñanza de Malasaña. Una enorme responsabilidad que arrancará este viernes nada menos que en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Madrid.

De lo que hablamos es de Unesmun, el que es posiblemente el mayor juego de rol que celebran los institutos en España. Una recreación minuciosa de la ONU en la que participan 29 centros de enseñanza de todo el país, con cerca de 300 personas que se trasladarán al centro de Madrid hasta el domingo, transformados en delegaciones de países, para debatir y aprobar conclusiones en la Asamblea General y en otros cuatro organismos de las Naciones Unidas.

“Llevamos casi un año preparando el evento para que no falle nada”, cuenta a Somos Malasaña la directora de este instituto de educación secundaria, Esmeralda García. Ella es una de las impulsoras del evento, que coorganiza junto a la Fundación Virgen de Europa, en el que se han implicado medio centenar de alumnos y profesores del Lope de Vega en labores de coordinación. “Es un proyecto que enseña valores a los estudiantes, que aprenden a aplicar los conocimientos de una forma poco habitual”, explica.

El juego arranca este viernes en el Ayuntamiento de Madrid con una recepción de la alcaldesa Manuela Carmena a todos los participantes. Allí empezarán a transformarse en las delegaciones (imaginarias) de cada país y ocuparán los asientos de los concejales. Después se trasladarán al Lope de Vega, donde comenzarán a preparar debates de altura mientras el instituto se convierte en centro de operaciones.

Cada uno de los 29 centros escolares participantes -públicos, privados y concertados- representa a un país por medio de un embajador y una delegación de cuatro miembros, después de unas semanas de intensa documentación previa. Estarán Francia, Alemania, Reino Unido, Brasil o China. Al Lope de Vega le ha tocado Ghana, para lo que sus alumnos hicieron una importante “inmersión” en la cultura y costumbres del país, con visitas a la embajada y estudio de cuál debería ser su postura ante determinados aspectos internacionales. Aunque uno de los países sobre el que estará el foco será el EE. UU. de Trump, que estará representado por la Escola Virolai de Barcelona. Enfrente en los debates tendrá muy posiblemente al Pérez Galdós de Madrid, que hará el papel de México.

Cada delegación debatirá animadamente en la recreación de cinco organismos de la ONU, la Asamblea General será el foro principal, pero también trabajarán en el Consejo de Seguridad, en el Económico y Social, en el Ejecutivo de la Unesco y en la Junta Ejecutiva de ONU Mujeres. Cinco foros para debatir cinco documentos que girarán en torno a los estados fallidos, la protección de minorías, el acceso a las energías renovables, los refugiados y la educación para un mundo más justo.

Los debates tendrán lugar en los diferentes espacios del Lope de Vega, pero también en el Centro Cultural Conde Duque, gracias al patrocinio de Madrid Destino, en un evento en el que también ayuda a sufragar la Fundación Santillana, además de varias entidades privadas y asociaciones.

77 años educando a estudiantes

77 años educando a estudiantes

Unesmun se celebra por segunda vez en España, pero cuenta con una larga historia internacional. El primero tuvo lugar en los años 40 en la Universidad de Harvard. Desde entonces lleva enseñando a los estudiantes de todos los continentes la importancia de las relaciones internacionales. La primera edición nacional tuvo lugar en Boadilla del Monte en 2016, en la que participó el Lope de Vega como uno de los 10.000 institutos asociados a la Unesco que existen en el mundo.

Su directora, Esmeralda, vio en ese momento que el evento encajaba perfectamente en el sistema de estudios del Lope, que desde hace dos años monta todo su plan educativo en base a proyectos y a educar por competencias. “Pensamos que era una buena forma también de dar visibilidad al barrio en el que estamos”, apunta mientras visualiza el aluvión de trabajo que se le viene encima. “Es un esfuerzo grande, pero sirve para que los estudiantes sepan aplicar en la práctica lo que están aprendiendo de Kant o Locke” -explica- “que entiendan que no sirve solo para aprobar y pasar al curso siguiente”. El objetivo es que les enseñe a “promover valores como la cooperación, el diálogo, llegar a acuerdos... para que adquieran competencias ”para construir un mundo más justo, igualitario y sostenible“.

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