Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La joven que animó a sus vecinos a limpiar el parque más sucio de Malasaña

Papeleras que colocó Ivia en el parque Conde Duque

Diego Casado

2

Aivi y sus perros son parte de los habituales del parque Conde Duque, la zona verde situada al norte del centro cultural que fue reformada hace bien poco para añadir un campo de fútbol y mejorar sus zonas infantiles y de descanso. Cada jornada, ella veía con desagrado cómo la suciedad y los cristales rotos se iban apropiando de este espacio y, un día, decidió intentar poner remedio.

“Siempre estaba hecho un desastre, con un montón de desperdicios por el suelo y cristales rotos”, explica en conversación con este periódico. El espacio se había ganado la fama de ser el más sucio del barrio de Universidad-Malasaña y pese a sus renovadas instalaciones, pocos niños acudían al parque infantil ante la abundante presencia de basura.

La joven, de 24 años, cogió un par de papeleras compradas en el Ikea, les añadió unas notas graciosas en español y en inglés, para animar a la gente a usarlas, las colocó en el parque y esperó a ver qué pasaba. “Pensé que iban a durar dos días, que se pondrían las papeleras de sombrero, pero resultó que no”, recuerda.

Las personas que usaban el parque empezaron a acumular la basura en las bolsas de las papeleras. Al principio las recogía Aivi, pero luego empezó a ver cómo otros vecinos cambiaban las bolsas y se preocupaban por mantener limpio el entorno. Incluso los barrenderos municipales se lo agradecieron.

Ahora, los jugadores de fútbol que utilizan la cancha son más cuidadosos con sus desperdicios y el Ayuntamiento también ha puesto de su parte retirando los colchones que había acumulados y limpiando los graffitis que habían poblado el espacio. “ Donde se tiraba todo en el suelo, ahora hay un antes y un después”, explica a Somos Malasaña la joven que puso en marcha la idea. 

Ahora, la joven se plantea llevar la experiencia a alguna otra plaza degradada del barrio, cree que el efecto puede ser similar. “Lo de Conde Duque fue un pequeño acto de generosidad que acabó derivando en otros muchos” -dice contenta Aivi- “no tiene gran importancia, pero si hemos podido hacerlo los vecinos a pequeña escala…”

Etiquetas
stats