El ‘robotaxi’ de Hyundai cumple un año con más de dos millones de kilómetros recorridos
El taxi autónomo, o robotaxi, puesto en funcionamiento por Hyundai y la firma Motional acaba de cumplir un año de servicio en la ciudad estadounidense de Las Vegas. En este tiempo, ha recorrido más de dos millones de kilómetros y realizado más de 125.000 trayectos en los que no ha sido responsable de ningún accidente, aunque eso no le ha impedido verse envuelto en algún incidente de tráfico.
Los pasajeros de este servicio, que pueden solicitar a través de diferentes plataformas de taxi y de Uber, parecen estar disfrutando de la experiencia, puesto que más del 90% ha puntuado su viaje con cinco estrellas. A través de una app, los clientes pueden ajustar algunos parámetros del coche, como ajustar el sistema de climatización a la temperatura que deseen antes de que los recoja.
Además, el robotaxi reparte comida a domicilio en Santa Mónica, California, a través de Uber Eats. La ciudad de Los Ángeles será el siguiente escenario en el que opere el servicio creado por Hyundai y Motional, que es realidad una empresa conjunta del fabricante coreano y el proveedor de automóviles Aptiv.
Estos vehículos circulan en modo autónomo en determinadas rutas a lo largo del famoso Strip de Las Vegas. Durante el primer año lo están haciendo con operadores en los asientos delanteros, pero a finales de 2023 comenzarán a funcionar sin una persona en el asiento del conductor. Para ello se está ultimando el desarrollo de un sistema de ayuda remoto, de modo que un empleado pueda tomar el control del coche, a distancia, cuando este se detenga por enfrentarse a una situación que no sabe manejar.
Está previsto que estas incidencias se presenten cada vez con menos frecuencia, en la medida en que, al acumular trayectos, el sistema de aprendizaje automático debería mejorar su funcionamiento y aprender de las situaciones en las que necesitó ayuda externa.
Eso sí, en palabras de Greg Butron, ingeniero principal de Motional, “de momento, por muy avanzados que sean estos vehículos y por muchos escenarios que puedan manejar, siempre cabe la posibilidad de que se enfrenten a alguna situación de conducción que nunca antes habían experimentado, por lo que el proceso de ayuda remota permanecerá activo”.
En cualquier caso, los artífices del proyecto están trabajando para ofrecer carreras cada vez más eficientes, seguras y adaptadas a todas las condiciones, tanto de tráfico como meteorológicas. Por ejemplo, el servicio de taxi autónomo ha comenzado a prestarse también por la noche. Los vehículos emplean para desplazarse un sofisticado conjunto de sensores que incluye más de 30 cámaras, radares y lidars provistos de múltiples modalidades de detección.
Así, las cámaras de alta resolución tienen la capacidad de diferenciar los objetos en el camino del vehículo y las estructuras del fondo. Otros sensores funcionan correctamente en condiciones de iluminación baja o variable, y los radares utilizan ondas de radio para ver objetos a través de la niebla, el humo y el polvo. A diferencia de los conductores humanos, los vehículos autónomos tienen una visión completa de 360 grados y pueden detectar lo que sucede a su alrededor hasta a 300 metros de distancia, incluso en la oscuridad.
Sin percances nocturnos
Estos coches no tripulados usan algoritmos y modelos avanzados de inteligencia artificial para fusionar todos los datos de sus sensores en una imagen virtual del entorno. Esa imagen se utiliza luego para trazar un rumbo seguro a seguir. Tras realizar muchas pruebas nocturnas, la tecnología autónoma del robotaxi ha demostrado que funciona igual de bien de noche que durante el día. La compañía que lo gestiona no ha observado un aumento de correcciones, desvíos o frenazos bruscos que disminuyan la seguridad o el confort de los recorridos.
El vehículo que presta servicio en Las Vegas está basado en el Ioniq 5, uno de los modelos 100% eléctricos de Hyundai, e incorpora tecnología de conducción autónoma SAE de nivel 4, que lo habilita para funcionar sin conductor. La firma coreana apuesta por ella en primer lugar por una cuestión de seguridad, dado que mejorará notablemente la seguridad de nuestras carreteras al eliminar los accidentes causados por errores humanos y, en consecuencia, salvará millones de vidas.
El siguiente beneficio de los vehículos autónomos, siempre según Hyundai, es que proporcionarán una forma de transporte más accesible, asequible y fiable para todos los ciudadanos.