“La pulsión de fin de ciclo en la Región de Murcia es una evidencia”

En una cita como la que ha celebrado el PSOE en Valencia, con su Convención Autonómica, se demuestra el aparataje de los grandes partidos en grandes escenarios, y su capacidad para movilizar a mucha gente y organizar actos masivos. Y también se pone a prueba la resistencia física y mental de los participantes que van de un lugar a otro, de reunión en reunión, cumpliendo con su programa de trabajo.

Algunos dirigentes socialistas lo llevarán mejor, otros lo llevarán peor, pero Rafael González Tovar (Murcia, 1953), médico de profesión y candidato a la presidencia de la comunidad, parece resistir la jornada con bastante entereza. Al final del día, dedica una hora a hablar con eldiario.es Región de Murcia sobre la propia conferencia socialista y sobre la actualidad murciana.

¿Cuáles son sus impresiones de esta Convención Autonómica?

Es una conferencia que esperábamos todos los candidatos porque marca directrices comunes para todos los territorios, lo que ratifica algo que siempre ha defendido el PSOE: que en el centro de todo están las personas con independencia de dónde vivan. Con las peculiaridades que pueda tener cada territorio, hay una serie de ejes comunes que defendemos todos. Esto es un embrión de lo que desarrollaremos y uniremos al programa que ya llevamos tiempo trabajando, pero no se trata de un programa electoral sino de un programa de gobierno. Nuestra obsesión es hacer la mejor oferta posible a los ciudadanos. No prometemos nada que no podamos cumplir, y cuantificamos todo cuanto podemos hacer.

En esta Convención ha flotado la ausencia de Susana Díaz, y ha habido muchas preguntas sobre la presidenta de la Junta de Andalucía y el secretario general. Y sin embargo, durante la mesa redonda en la que usted ha participado, junto a las candidatas de Canarias y Baleares y el candidato de Aragón, ha habido un par de llamadas a la unidad por parte de algunos militantes.

Nunca falta un toque de atención... La ausencia de Susana está más que justificada. Nos hemos estado enviando mensajes, y yo, como médico, le he dicho que no hiciera la tontería de forzar la máquina. La hemos echado de menos, pero nada más. El llamamiento a la unidad está basado en la necesidad de presentarnos muy unidos a un proceso electoral tan vital como el que vamos a tener en unos meses. La división estaría fuera de lugar en estos momentos.

Hablando sobre política regional, ¿qué le parecieron las palabras del juez Pérez Templado a este medio, al respecto del caso que está instruyendo y que afecta al consejero de Educación Pedro Antonio Sánchez?

Tengo que reconocer que no entendí nada de las declaraciones del juez Pérez Templado relativas al proceso de Pedro Antonio Sánchez, puesto que tiene una investigación en marcha que los ciudadanos exigen que sea exhaustiva y que se clarifique de verdad. Pérez Templado no puede decir que está harto de ese caso. Él tiene que investigar, que fue lo que el TSJ le sugirió y a lo que le obligó, y yo espero que no haya intereses políticos en ninguna situación de este tipo. Tenemos que proteger la independencia judicial, porque acompasar la justicia con el calendario electoral estaría fuera de todo lugar. Incluso puede que hayamos interpretado mal lo que quiso decir.

Pero si se le desimputara ahora, después de que el presidente del PP murciano, Ramón Luis Valcárcel, dijera que su candidato favorito a encabezar la lista de su partido es Sánchez, “si se resuelve” su situación judicial...

Tanto esas declaraciones como las de Pérez Templado han generado inquietud. Eso no es bueno para nadie, y menos para la justicia. Todos tenemos la obligación de despejar las dudas que le puede haber surgido a la población.

Desde el PP se les ha acusado de 'judicializar' la política murciana.

Cuando hemos llevado un caso a la justicia, es porque la vía política está agotada. Así pasó con la Renta Básica de Inserción, que después de siete años de aprobar la ley, sigue sin ver el decreto que la ponga en práctica. Es una vergüenza y un disparate, porque está perjudicando a los murcianos. Y por otro lado, en el caso de los delitos, cualquier ciudadano honrado y demócrata no tiene otro camino que no sea la denuncia ante un juez, que es lo que hemos hecho nosotros. El PP quiere hacer creer a la gente que sus casos de corrupción son rifirrafes políticos, y eso es una trampa. No lo son, porque si hay una denuncia, es el juez el que la valora y dictamina si hay indicios de delito.

En su intervención en la Convención Autonómica de su partido, ha sacado usted pecho de la labor del PSRM-PSOE en su denuncia contra la corrupción.

Es que cuando nosotros hacíamos una denuncia hace seis o siete años, la fiesta estaba en todo su apogeo y los ciudadanos no nos entendían. Nos llamaban 'antimurcianos' por no querer el bienestar. Hoy, que ha pasado ya un tiempo, los ciudadanos están muy concienciados y no toleran determinadas cosas. Zerrichera, Totem, El Roblecillo... Todo eso ha costado a los socialistas mucha incomprensión de sus vecinos e incluso la persecución. A veces hemos tenido que poner protección a nuestros cargos. La corrupción es incompatible con una democracia sana y además es un lastre para la Región, las instituciones y también para la economía. El Gobierno regional ahora está paralizado, porque esta situación que se está dando le dificulta ser reivindicativo. No hay fuerza moral para reivindicar en Madrid cuando vas con problemas del calado de los que tiene el PP. Un delegado del Gobierno imputado, el alcalde de la capital imputado, la alcaldesa de la segunda ciudad de la Región investigada... Eso quita fuerza moral, aunque me gustaría saber cuándo perdieron la fuerza moral Valcárcel o Garre para pedir dimisiones.

 

De momento, en Caravaca de la Cruz el PP ha optado por no poner de cabeza de lista a Domingo Aranda, alcalde imputado en 'El Roblecillo'.

Según mi información, es el propio Domingo Aranda el que ha dicho que no quería continuar. Pero ya no se trata sólo de los segundos escalones, sino también en los primeros escalones. El PP demuestra tener una doble vara de medir y usar la ley del embudo. Se aprovecha de una operación en marcha como la de la 'Púnica' para destituir a tres personajes de relevancia mediana, y sin embargo los grandes cargos siguen ahí. Es sorprendente. Lo que el PP tiene que decir claramente es si va a llevar imputados en sus listas, y no votar una cosa en una ciudad y otra cosa en otra. ¿Qué tiene Cámara que no tenga Castedo?

¿Cree usted que el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, será finalmente el candidato del PP a la reelección estando imputado en el 'caso Umbra'?

No lo sé... Están dándole vueltas pero no se manifiestan. Cámara tiene que aclarar su situación con los tribunales, y si es capaz de explicar por qué estuvo dos años sin sacar dinero del banco, por ejemplo, y se demuestra su inocencia, que vuelva a la política si quiere. Esta situación que está viviendo el ayuntamiento de la principal ciudad de la Región de Murcia y la séptima ciudad de España, hace que dicha institución se resienta. Pero es que en el Gobierno regional, los dos primeros consejeros que nombra Garre estaban imputados. No es de recibo.

Algunos son más pesimistas respecto a las posibilidades de que el panorama político de la Región cambie después de mayo, por lo enraizada que parece esa “red clientelar” que se denuncia, pero otros lo ven más claro. ¿Cómo lo ve usted?

La pulsión de fin de ciclo, y la posibilidad de abrir un nuevo tiempo político en la Región de Murcia, es una evidencia. Ahora la palabra la tienen los ciudadanos y necesitamos que apuesten, junto con nosotros, por cambiar el rumbo, porque lo que hay ahora no nos gusta. Se ha demostrado que tenemos una economía con pies de barro y que tenemos una situación asfixiante desde el punto de vista social, político y económico. Necesitamos una segunda transición. En la Región de Murcia ha habido un único partido que ha impuesto sus reglas de juego y no ha dejado espacios para el diálogo ni la participación. Una región sana que mira al futuro tiene que ser capaz de hacer política y buscar puntos de encuentro con la sociedad. Sería muy positivo que la política volviera a la sociedad murciana.

Usted ha dicho en Valencia que está dispuesto a hablar con otros partidos después de las elecciones para asegurar la gobernabilidad de la Región de Murcia.

En primer lugar tenemos que buscar la posibilidad de gobernar, y no me importará gobernar en minoría siempre y cuando podamos sacar proyectos importantes para la Región con el acuerdo de otros partidos. Queremos ganar e ir a por todas, y nuestro objetivo es ganar y hacerlo con la suficiente fuerza como para tener un gobierno monocolor, pero no descartamos llegar a acuerdos, no a pactos, con otros grupos para garantizar la gobernabilidad.

Posiblemente se encuentren varios partidos con representación: Ganemos, Podemos, UPyD, Ciudadanos...

Ahora queremos hacer un acuerdo con los ciudadanos, que sepan cómo queremos cambiar la Región de Murcia, qué propuestas tenemos. Queremos que sepan que no estamos de acuerdo con los 20 años de Gobierno del PP. Y del resto de partidos, aún no sabemos las propuestas que hacen, pero estamos deseando debatir sobre esas propuestas y acordar con los ciudadanos las respuestas que daremos para mirar al futuro.

¿Qué medidas considera más urgentes si llega a presidir el Gobierno de la Región de Murcia?

Entre nuestros planes de urgencia, además de dar expectativas a los jóvenes, de devolver su protagonismo a la mujer y de atender a los mayores de 45 años, está el plan de lucha contra la pobreza, la exclusión social y la precariedad como elemento central. Y segundo, un plan de empleo público para que en aquellos hogares donde todos sus miembros están en paro, al menos uno pueda llevar a casa un sueldo. Eso, junto a la renta básica de inserción, la aplicación de la Ley de la Dependencia, la recuperación de la sanidad y de la educación, y la reindustrialización, forma parte del proyecto que tenemos para la Región de Murcia.

¿Está dispuesto a comprometerse para cambiar la Ley Electoral murciana, única en España, y que contempla cinco circunscripciones en una comunidad uniprovincial como la nuestra?

Estamos abiertos a cambiar la Ley Electoral. De hecho, la Comisión que se creó en la Asamblea Regional está paralizada por el PP y no se ha querido avanzar. Cuando nosotros propugnamos una reforma de la Constitución, creemos que hay que conseguir un sistema electoral equilibrado que respete la pluralidad. Hay muchos modelos para cambiarlo, cada uno con sus ventajas y sus inconvenientes, y no me atrevería a decir uno porque es algo que tenemos que consensuar, pero me comprometería a hacerlo.

Además de cambiar la ley electoral, o de poner en marcha el portal de transparencia como ha dicho usted aquí, con el fin de “televisar” los contratos públicos desde la elaboración del pliego de condiciones hasta su concesión, la ciudadanía también y sobre todo está pidiendo mayor participación en la toma de decisiones.

Hay que intentar que el ciudadano se implique. Hemos propuesto el 'escaño 46' (la Asamblea Regional de Murcia tiene 45 escaños) para que los ciudadanos se impliquen. Otra cosa que hay que modificar es el reglamento de la Asamblea para que las minorías tengan derecho a ser escuchadas. El 'monopartidismo' tiene que acabar, y hay que revitalizar la democracia y fortalecer el vínculo entre los ciudadanos y las instituciones.