El Mediterráneo sí es el `Mare Nostrum´
Cuando recibo la comunicación de la llegada de dos pateras, con más de veinte personas a bordo, en la Punta de El Pudrimel, en La Manga, estaba con mi compañero, responsable del área de salvamento en playas de la Unidad de Protección Civil de San Javier. Nos desplazamos hasta la zona, para coordinar cualquier actuación sanitaria que precisaran aquellos inmigrantes o cualquier otra ayuda que nos pudiera demandar la Guardia Civil.
Me puse en contacto con la dotación de nuestra embarcación de rescate 'Albufera' y ordené que se desplazara urgentemente a la zona del suceso; igualmente informamos a nuestros coordinadores de playas y a los socorristas de la vertiente mediterránea de La Manga, por si avistaban alguna persona que tratara de llegar a nado.
El lector puede imaginar la situación surealista que se produjo en el lugar, de una parte personas que disfrutaban de un día de estío espectacular, en las playas de La Manga y, de otra parte, decenas de personas que ansiaban llegar a esas mismas playas procedentes del continente africano huyendo de la miseria o de la violencia.
Entre esos seres humanos y la orilla, esta orilla del Mediterráneo, el 'Mare Nostrum', estaba la Guardia Civil y Protección Civil de un bello rincón del sureste de España. Es el mismo mar en el que hemos visto como han perdido la vida miles de personas en los últimos años porque entre una orilla y otra no había nadie que los socorriera, que los acogiera, que los atendiera.
Trabajo en la Administración Pública desde hace más de tres lustros; hoy me encuentro destinado en el Ayuntamiento de San Javier, en una de las mejores unidades de Protección Civil de la Región de Murcia, la que conforman marineros de rescate, socorristas, técnicos en emergencias sanitarias, agentes de emergencias y operadores que cada día, con su buen hacer, garantizan la protección y la seguridad de miles de vecinos y visitantes.
Los que trabajamos en este servicio somos conscientes de que entre todos protegemos la vida, sin distinción de raza, credo, nacionalidad, estatus social. Ayer, junto con un magnífico puñado de hombres y mujeres de la Guardia Civil estábamos en el mar y en la orilla para recibir a veinte personas que no llegaban como turistas, sino como seres humanos sufrientes de un mundo injusto y terrible que obliga a estos inhumanos desplazamientos forzados por el temor o el hambre.
El mar Mediterráneo debiera servir para unir dos continentes, más allá de los intereses geopolíticos y geoestratégicos; este mar debiera servir para que sus gentes se sientan vinculadas a algo común.
Este 'Mare Nostrum' debiera hacernos especialmente sensibles al sufrimiento de nuestros vecinos; este mar debiera poner al descubierto aquello que nos caracteriza como seres humanos decentes y que nos diferencia de los psicópatas y sociópatas, la compasión; es decir la capacidad de apasionarnos con lo del otro.
'Nuestro Mar' nos hace compartir un destino común que será mejor cuanto más justo sea, si no tomamos conciencia de ello estaremos construyendo un mundo más inhumano, más peligroso y menos decente.
Ayer llegaron más de veinte personas a bordo de dos humildes pateras a este rincón de España en el que es fácil sentir el ritmo de la vida, la buena vida de un Occidente desarrollado, de un Norte opulento que mira con desdén e indiferencia al Sur.
Ayer, cuando escuchamos que llegaban dos pateras con veinte personas a bordo, todos los que nos pusimos en marcha -estoy seguro que por parte de la Guardia Civil también fue así- estábamos decididos a hacer un buen trabajo; algunos teníamos en mente las escenas de las costas italianas, libias, griegas o turcas y teníamos la decisión de hacer que esas escenas no se produjeran aquí; porque aquí, esos inmigrantes llegados entre las olas en patéticas embarcaciones sí tienen quien los socorra y yo me siento orgulloso de trabajar en estos servicios públicos, los de todos, para la seguridad y la protección de quienes están en esta orilla y quienes llegan de la otra, para nosotros, los de Protección Civil, el Mediterráneo sí es el 'Mare Nostrum'