Trump, el último mesías

Siendo el hombre el ser vivo del planeta con mayor inteligencia según su conceptualización, capaz de la destrucción de sí mismo y del planeta , ha desarrollado un sistema político tornado en infame, injusto y esclavista; beneficio de unos pocos oligarcas que controlan la economía, el pensamiento, las conciencias y los juicios a través de la educación y la propaganda de los medios. Estamos en una sociedad infestada. Una Democracia fake.

Hoy el hombre es su propio esclavo ciego, la libertad de expresión se presenta totalizadora, falsa, demente. Sin embargo la libertad de conciencia no existe, su celda madre de juicio oscurece la realidad del fenómeno, el inconsciente esclavo grita desde las tripas y se revela.

Hasta hoy ninguna civilización había soñado con una sociedad parasitaria a nivel planetario, un país integrado únicamente por individuos de clase alta sin esclavos en sus puertas. 

Trump ha puesto la primera piedra en los Estados Unidos ante el desconcierto y la ignorancia del mundo. Los esclavos serán en unos años máquinas, para ello necesita apropiarse de los recursos para desarrollarse y fabricar alta tecnología que el resto del planeta comprará sin opciones alimentando a la bestia.

Deberá transcurrir el tiempo, la fermentación de los años de estupidez. No es predecible.

Al comienzo Groenlandia es clave para las “tierras raras” imprescindibles en la alta tecnología y el retorno de la industria estratégica su combustible, el control total se prepara; el proceso será variable, adaptativo, irracional y deslumbrante, imparable e imposible.

Latinos, negros, asiáticos, musulmanes de clase alta se integran, la discriminación económica ya es “humanitaria”, el resto son criminales, terroristas, parias, innombrables. 

¿Podría comenzar una huida, una emigración de las clases bajas norteamericanas hacia Europa y otros países a cambio de coacciones y tratados con la “Extrema Derecha”?

¿Cómo responderá Europa desde su sueño y apatía, será China ahora Esparta?. 

¿Rusia martilleará dentro de su capullo de seda?. 

Hoy se forja el futuro, este futuro extingue la filosofía política. El Humanismo ya fue despreciado.

Este “sistema político” ya tiene nombre.

Idiocracia.