En el PSOE respiran aliviados: la decisión del juez del Supremo de mantener en libertad a José Luis Ábalos evita por ahora a los socialistas el desgaste de ver entrar en prisión a un segundo ex secretario de Organización y, de paso, le ahorra un enredo más en la conformación de su escuálida mayoría parlamentaria. Lo mismo ha pasado este jueves con Koldo García, el que fuera asesor del exministro: tras acogerse a su derecho a no declarar, sigue en libertad después de que la Fiscalía no pida su ingreso en prisión.
Lo que sigue levantando polémica fue la sugerencia del juez en la que plantea una reforma que impida a Ábalos ser diputado. La presidencia del Congreso ya le ha recordado que su papel “no es opinar sobre las leyes”, mientras que Feijóo sostiene que la “mayoría” comparte su “estupor” aunque no apoya esta reforma.
Isabel Díaz Ayuso prometió en la Asamblea de Madrid “proteger la libertad de conciencia” y que su Gobierno “cumplirá la ley” con el registro de objetores pero no dijo cómo, aunque adelantó que lo hará “sin listas negras” utilizando “los mismos mecanismos para proteger su libertad, su anonimato y su libertad de conciencia”.
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