Cómo hacer la maleta a lo Marie Kondo y ser feliz con tu equipaje

Todo está en separar por categorías y doblar como es debido.

Roberto Ruiz

Vamos a intentar acabar con uno de los principales dramas de los viajes: enfrentarse a la maleta. Y para hacerlo nos vamos a ayudar de los sabios consejos de Marie Kondo, la experta del orden japonesa que hace ya tiempo convirtió su libro “La Magia del Orden” en todo un best seller y que ahora vuelve a estar en boca de todos gracias a su reality en Netflix “¡A ordenar con Marie Kondo!”.

Independientemente de que quieras aprovechar para ordenar tu casa o no (hagamos todos un acto de humildad al pensarlo unos segundos…), su método KonMari te puede venir bien a la hora de hacer la maleta de tu próximo viaje, solo tienes que tomar buena nota, seguir unas cuantas pautas de selección, mantener un orden, doblar como es debido y, con suerte, esta vez no tendrás que sentarte sobre la maleta para volver a cerrarla.

La clave: separar por categorías

Aún no sabes lo que te vas a llevar pero sí puedes empezar por distinguir diferentes categorías. El método KonMari se basa en eso, en la división por categorías, y ella en la casa divide por ropa, libros, papeles, komono (donde entra cocina, baño y miscelánea de todo tipo) y cosas sentimentales. Así que al hacer la maleta te puede ser muy útil hacerlo de un modo similar adaptado a la maleta.

Haz una primera selección de todo lo que crees que te va a hacer falta en tu viaje, absolutamente todo (ropa, calzado, accesorios, libros, cámaras, cargadores, productos de higiene, guías, etc) y haz como Marie Kondo: ponlo todo sobre la cama. Así tendrás una buena imagen del volumen que alcanza tu equipaje. ¿Se te ha ido de las manos? Tranquilidad, en el siguiente paso conseguirás hacer la selección de lo realmente necesario.

La selección: lo que te vas a llevar y lo que no

Lo primero es saber si vas a facturar equipaje, para llevar más cosas, o si prefieres viajar con equipaje de mano, con todo lo que conlleva. El destino, la duración de tu viaje, la tarifa del billete y tu capacidad de minimizar lo que te quieras llevar tendrán la respuesta. Una vez que sepas el tamaño del envase es momento de ponerse con el contenido.

Ahora, siendo consciente del tamaño de tu maleta, empieza por la ropa. Marie Kondo recomienda coger prenda por prenda y según su ときめく (“tokimeku”, literalmente que te dé pálpito, que te haga latir el corazón o, en definitiva, que te haga feliz) pasará la fase de selección o no. ¿Realmente lo vas a utilizar en tu viaje? ¿Lo echarías de menos si lo dejas atrás? Si es así adelante, si no déjalo a un lado y continúa con la siguiente prenda. Podrás volver a esas cosas si cuando termines ves que te ha sobrado espacio, pero recuerda que los “por si acaso” siempre terminan pasando factura.

Así categoría por categoría. Ten en cuenta que en komono entran también los cargadores, los candados, los adaptadores de enchufes, el botiquín de viaje, las guías… y todo tipo de accesorio de viaje que te pueda venir bien.

El espacio: doblar las prendas correctamente

Como en una maleta el espacio es limitado más nos vale optimizar al máximo la manera de guardar las cosas. Hay muchas técnicas y aquí cada maestrillo tiene su librillo, unos colocan las prendas unas sobre otras y otros prefieren enrollarlas, pero la gurú del orden nos aconseja hacerlo en vertical. Para ello has de empezar doblando la ropa correctamente. Primero, para una camiseta, empieza por marcar un eje vertical en el centro y sobre él doblar ambos lados, habiendo dividido así la prenda en tres tercios. Seguidamente marca un eje horizontal y dobla en dos, creando un rectángulo. Ese rectángulo dóblalo en tres partes iguales y ya lo tendrás. Con el resto de prendas has de seguir la misma técnica.

El objetivo del método KonMari es que cada prenda doblada se sostenga de pie, verticalmente, para guardarlas una junta a otra y poder verlas todas de un solo vistazo. Te será muy útil organizar así tu maleta para no tener que meter y sacar todo su contenido en cada parada de tu viaje. Y por cierto, no olvides que la ropa sucia ocupa muchísimo menos si también la guardas doblada.

Dentro de la maleta: mantén las categorías

Cuando guardes las cosas dentro de la maleta continúa como empezaste, es decir, separando por categorías. Puedes empezar por colocar la ropa tal y como acabamos de ver, para el calzado es recomendable separar cada par dentro de una bolsa, un zapato enfrentado con otro para que ocupen menos, y también es interesante guardar la ropa interior en un estuche o bolsa, toda junta, para mantener esa categoría separada de las demás.

Haz lo mismo con el neceser y no lleves botes grandes, rellena botes pequeños para ahorrar espacio, recordando siempre que si no vas a facturar todos los líquidos deben ir en una bolsa transparente en recipientes de como máximo 100 ml. Con los cargadores, cables y demás componentes electrónicos haz lo mismo, guárdalos todos en una misma bolsa y si es transparente incluso mejor, si te revisan el equipaje en un control de seguridad siempre serán más fáciles de identificar.

Por supuesto, libre eres de perfeccionar el método KonMari a tu manera, Marie Kondo se llevaría las manos a la cabeza si te ve meter los calcetines dentro de los zapatos pero si ves que así ganas espacio ¿por qué no?

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