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Protestas multitudinarias en Barcelona al grito de “votaremos”

Concentració davant la Concelleria d'Economia  Gran Via / Rambla Catalunya

Yeray S. Iborra

Cerca de 40.000 personas se han concentrado en la Gran Vía de Barcelona este miércoles, según la Guardia Urbana, como respuesta a la operación de la Guardia Civil que se ha saldado, por el momento, con 14 detenciones, en su mayoría altos cargos de la Generalitat, y el registro de varios departamentos y organismos del Govern. Las decenas de personas que se han concentrado a primera hora de la mañana en la sede de Economía de la Generalitat, en la esquina con Rambla de Catalunya, se contaban por la tarde por miles, sobre todo después de que Òmnium y la ANC llamaran a concentrar en ese punto las protestas contra las detenciones y los registros contra el referéndum del 1-O.

De forma pacífica –algunos con flores en las manos, otros con carteles en los que se lee “Votarem” o con esteladas– los concentrados cortaron la Gran Vía alrededor de las 10 horas, en una protesta continuó hasta la madrugada. “Votarem” o “independència” son los cánticos recurrentes de los manifestantes, que también dedican consignas contra la Guardia Civil, “fuera las fuerzas de ocupación” y contra los Mossos, “botiflers”.

Políticos como el portavoz adjunto del grupo de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, la ex presidenta de la Generalitat, Núria de Gispert, el ex portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, y la presidenta de la AMI, Neus Lloveras, se acercaron a la congregación y fueron recibidos con cánticos de apoyo: “Estamos con vosotros”.

Como Júlia, de 24 años, jóvenes, familias con niños y personas mayores, se han acercado a lo largo del día a la Rambla Catalunya para reclamar el derecho a voto el próximo 1 de octubre y contra la operación de la Guardia Civil: “Yo nunca he sido independentista, pero creo que, lo mínimo, es permitir una votación”. Al mismo tiempo que ofrece su testimonio, una gran pancarta donde se puede leer “Welcome to catalan Republic” se despliega de la cornisa del último bloque de la Rambla, el que colinda con la Gran Vía.

A partir del mediodía, la afluencia de gente ha crecido hasta colapsar la Rambla de Catalunya y la Gran Vía. Marc ha sido uno de los que, nada más salir del trabajo, se ha acercado a la concentración. “Hay que responder en la calle, y nos haremos oír”.

“Si el Estado interviene la autonomía, venimos a defenderla”, asevera Iñaki, que a sus 68 años llevaba toda la jornada ante la consellería de Economía. Las palabras las pronuncia mientras de fondo la gente corea: “Esto con Franco, sí pasaba”.

Un grupo de personas que se encontraba en el balcón principal de la Conselleria de Economía desplegó una pancarta que pide libertad para los detenidos. El cartel está encabezado por la palabra “libertad” y seguida de los nombres de pila de los detenidos, algunos de los cuales trabajan en Economía, como el secretario general de Vicepresidencia y Economía y Hacienda, Josep Maria Jové; o el secretario de Hacienda, Lluís Salvadó.

El vicepresident y conseller de Economía de la Generalitat, Oriol Junqueras, se desplazó este miércoles pasadas las 16:30 horas de la tarde a la sede de su departament, donde la Guardia Civil ha continuado efectuando registros hasta primera hora de este jueves.

A su llegada a las inmediaciones, las miles de personas concentradas en la calle para dar apoyo a la Generalitat ovacionaron a Junqueras y le abrieron un pasillo hasta las mismas puertas de la sede gubernamental. El vicepresident llegó acompañado de varios de sus asesores y pocas horas después de la reunión mantenida, primero, con los consellers del Govern y, después, de la visita de los responsables de las entidades soberanistas.

De concentración espontánea a convocatoria organizada

Con el paso de las horas lo que comenzó como una concentración espontánea se convirtió en una convocatoria organizada. Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium desplegaron un escenario con megafonía sobre el que diversos cargos, entre ellos Jordi Sànchez, president de la ANC, se dirigieron a los manifestantes. Distintas actuaciones musicales acompañaron la concentración que se alargó durante la madrugada, lo que llevó a varios voluntarios a acercarse con agua y comida para los asistentes.

A lo largo de la noche, las protestas se extendieron por la capital catalana. A las 22.00 horas se llevó a cabo una cacerolada en el centro de Barcelona, por el barrio de l'Eixample, con una pitada de coches convocada durante el día.

A las afueras de la Conselleria de Economía, los manifestantes continuaron congregados más allá de las 23.30 horas de la noche, cuando las entidades independentistas dieron por terminada la movilización hasta la convocada para este jueves por la mañana, a las 12 horas, ante el Tribunal Superior de Justicia. “Si hace falta acamparemos”, expresó Jordi Sánchez, presidente de la ANC.

Una hora y media después de que la ANC y Òmnium desconvocaran la protesta, los Mossos d'Esquadra cargaron contra los concentrados que todavía quedaban en la rambla de Catalunya. Tras dos avisos por megafonía, la policía arremetió contra los congregados, con cargas y empujones en la zona alta de Rambla de Catalunya contra las personas que todavía secundaban la protesta, la mayoría de ellas con las manos alzadas.

Un grupo reducido de dichas personas respondió a la policía arrojando agua y botellas. Se produjeron diversas corredizas que fueron despejando la zona poco a poco. “La señera que lleváis no la merecéis”, gritaron los manifestantes, que siguieron la protesta con cánticos de independencia.

Poco antes de las 2 de la madrugada, una ambulancia se llevó a una persona resultó herida durante el forcejeo con los antidisturbios, según informa Europa Press. A las 3.20 quedó despejada la acera central de la Rambla de Catalunya frente a la puerta de la Conselleria de Economía, y el centenar de concentrados se fue quedando en unos 20 sobre las 6 de la mañana.

En este punto, los guardias civiles salieron para comprobar el estado de los cuatro vehículos logotipados de Guardia Civil. Al constatar que no podían irse en ellos por tener ruedas pinchadas y los vidrios con pegatinas, han avisado para que se los llevara la grúa, que han retirado tres hasta las 6.40 horas.

Al menos 18 ciudades convocaron sobre la marcha concentraciones para la tarde del miércoles como acto de repulsa por las detenciones de esta mañana en Catalunya y “por el derecho a decidir”. Entre ellas, Madrid, donde se congregaron cientos de personas, muchas representantes políticos a nivel nacional y regional. Barcelona En Comú ha compartido en Twitter una imagen que aúna todas las convocatorias “contra el autoritarismo del PP” en Madrid, Zaragoza, Asturias y varias ciudades de Galicia y Andalucía.

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