Hacia Belén va una burra

En estas entrañables fechas, y como viene siendo obligatorio, me encuentro imbuido de amor y paz, o como dijo un antiguo gobernador de Granada, gran intelecto y mejor orador, me siento empacecido, y cito textualmente. Por lo tanto no es día de malmeter con cosas de política, sino de ensalzar el belén y cantar villancicos, como aquel que decía ‘hacia Belén va una burra’, que este año me ha recordado a María de los Dolores de Cospedal, no por lo de burra, sino porque ya ha llegado al Portal. Concretamente al Portal de la Transparencia inaugurado por su partido en el que se viene a decir que si los altos centuriones del Gobierno ganan más denarios que el mismísimo Herodes, lo mejor sería subir la soldada del titular de los laureles y de su sanedrín de fariseos.

En cualquier caso, tras visitar al Portal, la susodicha Cospedal se ha visto iluminada por el candil de sebo del fondo del albañal y ha declarado que lo que pasa en realidad es que “la sociedad es tan corrupta como los partidos, aunque ahora está de moda decir que los políticos son inmundicia humana”. Podríamos estar de acuerdo con ella si no hubiéramos escuchado a continuación a su conmilitón matritense Ignacio González asegurando que cierra los comedores escolares en Navidad porque los niños madrileños están gordos. Parece que en este Nacimiento hay más de un burro. No cabe duda que estos saduceos (ricos aristócratas gobernantes que imponían la voluntad del Imperio) son de una raza especial que nunca permitirán que la razón o la prudencia nublen su juicio.

Beben y vuelven a beber

Y para celebrar la buena marcha de este belén que nos han organizado, tanto Poncio Rajoy como sus sayones se fueron a compartir su última cena para anunciarnos la buena nueva de que en España empieza a amanecer, eso sí, entre brindis y brindis, que mira cómo beben y beben y vuelven a beber, que puede ser la explicación de lo que pasa, que si bebes no gobiernes. A pesar de todo, vi a don Mariano Tancredo muy en su sitio, y deseoso de agradar a todos, incluso a Cataluña. Para completar el acercamiento yo le sugeriría que hiciera de alguna figurita propiamente catalana, como el caganer. Total, ya tiene costumbre.

También se dirigen al Portal los compañeros socialistas, que últimamente tienen asignado un papel crucial, ya que no hay belén que se precie si no tiene gansos armando alboroto y picoteándose unos a otros. No es el caso de los camaradas de IU, que como hacen de patos están esperando que pase el cazador para que los meta en la talega tras desnucarlos. No corre peligro de que lo desnuquen Juan Manuel Moreno, hombre discreto que pinta muy poco en el PP, lo mismo que san José en un belén.

Quienes no se dirigen al Portal son los jovenzuelos de Podemos, aunque han excusado su asistencia, ya que están escribiendo la carta a los Reyes Magos y ya van por la cuarta resma. Por las dos caras. Qué penita el día que se enteren que los Reyes son los padres y que los Borbones habitarán entre nosotros hasta que san Juan baje el dedo o haya un líder competente y honrado en el PP, lo que pase primero.

Y por fin, estamos nosotros, ustedes y yo, que también formamos parte de la función, aunque sólo seamos figuritas de relleno. No en vano somos las ovejas, aunque tampoco descartemos que haya más de un carnero, que el que no sea carnero que se lo haga mirar, no vaya a ser falta de calcio. Lo malo no es que nos lleven al matadero, sino que el rebaño lo dirigen un caganer y una burra cargada de chocolate, en rama, que a lo mejor va a ser eso.