Cambio radical del tiempo: desplome de temperaturas, lluvia y nieve tras los primeros 30 grados del año
La tarde del martes 10 de marzo la mitad occidental andaluza se vistió de mayo. El Granado, al norte de la provincia de Huelva, registraba los primeros 30 grados de 2020 en toda la Península Ibérica. 24 horas más tarde, localidades como Sevilla, Morón de la Frontera o Baeza, se sumaban a la fiesta con temperaturas en el entorno de los 31 grados, dibujando la jornada más calurosa que hemos vivido en todo lo que llevamos de año. Aún no hemos abandonado el invierno astronómico y las temperaturas ya han superado la barrera de los 30 grados. De nuevo, como en febrero, Andalucía se asoma al precipicio de las temperaturas excepcionales.
No es nuevo que marzo deje estos registros. Aún quedan relativamente lejos de los récords absolutos en las estaciones meteorológicas de referencia, pero las anomalías sí que han vuelto a dispararse. En altura, la temperatura de la masa de aire que nos afecta se encuentra unos 8 grados por encima de lo que debería ser normal para la época. Un dibujo que se reproduce en la práctica totalidad de la mitad meridional europea, y que en menor medida se extiende también a la septentrional.
Brusca bajada de 10 grados
La situación no obstante va a experimentar un cambio radical en los próximos días. El descuelgue hasta la Península Ibérica de una baja fría, y el aislamiento posterior que va a experimentar en nuestro entorno, va a condicionar la meteorología peninsular de cara a la próxima semana. La consecuencia más notoria pasará por un brusco descenso de las temperaturas, de más 10 grados respecto a las máximas que hemos registrado estos días.
En altura, vamos a pasar de una anomalía de 8 grados por encima de lo normal a otra de entre 4 y 6 grados por debajo. Un salto de catorce grados en un margen de apenas cuatro días. El descenso será especialmente abrupto durante la jornada del lunes con la entrada de aire frío, cuando las máximas podrán caer hasta el entorno de los 15 a 18 grados en puntos del valle del Guadalquivir, y que será aún más notable en cotas medias y altas del resto del interior andaluz.
Hasta entonces el descenso será suave y progresivo gracias al desplazamiento del anticiclón al Mediterráneo y la entrada de viento de componente oeste, de influencia oceánica, en la Península Ibérica. Esto refrescará el ambiente gracias a la sustitución de la masa de aire cálido por otra más fresca, e incluso vendrá a introducir humedad en las capas medias de la atmósfera que podrían dejar algún chubasco en los sistemas montañosos de la región durante el fin de semana.
Fin de semana de transición
Las temperaturas experimentarán un leve descenso durante la tarde del viernes, quedándose en el entorno de los 25°C en el valle del Guadalquivir, y de unos 20 a 22°C en el resto de la región. Las mínimas al inicio del fin de semana aún se mantendrán muy elevadas en toda Andalucía, de unos 10 grados en áreas bajas del interior y de 14 a 15 grados en el litoral atlántico y mediterráneo. El incremento de la humedad derivará en un aumento de la nubosidad de evolución en áreas montañosas, especialmente en el extremo oriental de la Comunidad, donde podrían dejar chubascos de diversa consideración.
Este ambiente será un calco del que se viva durante la jornada del sábado, donde los chubascos podrían extenderse al extremo norte de Sierra Morena en las provincias de Huelva, Sevilla y Córdoba.
Cambio radical desde el lunes sine die
sine dieSerá durante las últimas horas del domingo cuando experimentemos el gran cambio atmosférico. La aproximación hasta la costa cantábrica de una vaguada va a derivar en un aislamiento sobre le vertical peninsular de una masa de aire frío, que durante casi toda la próxima semana condicionará la atmósfera en nuestro territorio, especialmente en el cuadrante suroccidental. Un descuelgue frío que acabará por convertirse en una nueva DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) con tendencia a aislarse y mantenerse relativamente estacionaria en el entorno del Cabo de San Vicente.
La consecuencia inmediata del descuelgue será un descenso brusco de las temperaturas durante la jornada del lunes gracias al intenso aire frío en altura. Una bajada de unos 10 grados respecto a las máximas que se registren la tarde del domingo. Brusco descenso que se notará especialmente en cotas medias y altas de la región, en las que la cota de nieve se desplomará para traer de nuevo la nieve a la región.
La DANA va a traer tiempo inestable, con lluvia que podrá ser localmente muy intensa, descenso muy brusco de las temperaturas en toda la Comunidad, y nevadas en cotas medias y altas de la mitad oriental andaluza. Un combinado invernal ya en plena primavera climática cuyos efectos dependerán de la posición final que tome la DANA, y que podría acabar derivando en lluvias de carácter torrencial en áreas litorales bien expuestas, como el caso de la costa malagueña.
Un cambio radical en el tiempo que podría prolongarse hasta finales de la próxima semana y que podría acabar derivando en la entrada nuevas borrascas desde el Atlántico. La tendencia atmosférica para los próximos días dibuja altas presiones sobre la vertical de las Islas Británicas, lo que podría empujar el paso de las bajas atlánticas hasta la Península Ibérica en la segunda mitad de marzo.
0