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Julio mantiene la tregua veraniega en Andalucía gracias al poniente

Playa de El Cañuelo, en la costa de Cádiz.

Carlos Puentes Luque

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El comienzo del verano astronómico en Andalucía ha venido acompañado de un marcado descenso en las temperaturas. El calor ha dado una tregua en la particular batalla que cada verano mantiene en la región, donde numerosas zonas del interior acostumbran a sobrepasar los 40 grados con cada vez más frecuencia a partir de mediados de junio. El viento de poniente, asociado al paso de vaguadas o borrascas por el noroeste peninsular, se convierte en el mejor aliado de los andaluces en los tres meses de travesía por el desierto estival. Con altibajos, dicho flujo se mantendrá sobre nuestro territorio durante los próximos días.

El paso de una extensa vaguada por el norte de la Península primero, y el descuelgue de una pequeña perturbación hasta el entorno del Cabo de San Vicente después, mantendrán el viento de componente oeste o suroeste sobre Andalucía. Así, la masa de aire cálido asociada a la dorsal sahariana quedará centrada sobre el Mediterráneo, lo que permitirá que las temperaturas se mantengan durante los próximos días en rangos relativamente normales para la época del año.

Vaivén en las temperaturas durante el fin de semana

La tregua en el termómetro se mantiene, aunque no será continua. Entre el paso de la vaguada y el descuelgue de la depresión la dorsal encontrará a comienzos del fin de semana un hueco por el que reconquistar temporalmente el sur peninsular. Así, durante las tardes del viernes 1 y el sábado 2 de julio las temperaturas volverán a experimentar un ascenso generalizado, que se suma al que ya viviesen a comienzos de semana. Las máximas volverán a rozar los 38 grados en algunos puntos centrales del valle del Guadalquivir, mientras que en el resto del interior se normalizarán los 35 grados en las horas centrales del día.

Solo la costa quedará al margen de dicho aumento durante la primera mitad del fin de semana, con temperaturas que seguirán oscilando en buena parte del litoral mediterráneo entre los 17 a 19 grados de mínima y los 26 a 28 de máxima. Con la dorsal desplazada hacia el levante peninsular, será el litoral almeriense el que alcance las temperaturas más elevadas en la costa andaluza con máximas de hasta 30 grados.

Las temperaturas volverán a bajar a partir de la jornada del domingo. Para entonces, el descuelgue hasta el suroeste de la Península de una pequeña baja altura volverá a desplazar la dorsal anticiclónica hacia el Mediterráneo, volviendo a refrescar el aire en altura de la atmósfera andaluza. Las temperaturas bajarán entre 4 a 6 grados respecto a las del día anterior, siendo más acusado el descenso en el tercio occidental andaluz. La caída en el termómetro se verá además favorecido por un notable aumento de la nubosidad de tiempo medio y alto que incluso podría dejar algunas precipitaciones aisladas de carácter débil en algunos puntos de la provincia de Huelva y en el entorno del Estrecho.

Contraste térmico entre el extremo occidental y oriental andaluz

Desde la tarde del domingo las temperaturas caerán de nuevo por debajo de los 35 grados en la mayor parte de la mitad occidental andaluza, destacando las provincias de Huelva y Cádiz donde podrán registrarse máximas por debajo de los 25 grados. La contrapartida se dará en el tercio oriental, donde algunos puntos del interior granadino, en especial en las comarcas de Guadix y Baza, podrán superarse los 37 grados.

Ese panorama será el que se mantenga a comienzos de semana, con la salvedad de que a partir de la mañana del lunes la nubosidad tenderá a remitir en toda la región hasta quedar los cielos muy poco nubosos o despejados. El aumento de estabilidad que se espera desde entonces, motivado por la reintegración de la baja en la circulación general, provocará que desde la jornada del martes 5 de julio las temperaturas experimenten un nuevo ascenso generalizado. Las máximas de 37 a 39 grados se extenderán desde el tercio oriental hacia la mayor parte del valle del Guadalquivir.

Se abrirá para entonces un periodo cálido en el que las temperaturas podrán escalar hasta el entorno de los 40 grados a partir de mediados de semana. La irrupción de la lengua de aire cálido en altura procedente del interior sahariano, junto con el proceso de recalentamiento superficial que vive la Península Ibérica en julio, ponen sobre la mesa los ingredientes necesarios para que Andalucía viva el primer episodio cálido del mes. De momento sin apuntar a temperaturas extremas, pero sí para volver a ver los 40 grados de manera generalizada en buena parte del interior andaluz.

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