Veinte años esperando una calle para el Cura Obrero en Ayamonte
En 1996, el Pleno del Ayuntamiento de Ayamonte (Huelva) aprobó que una calle del municipio onubense llevase el nombre de Diamantino García Acosta, el cura obrero y sindicalista español miembro fundador del Sindicato de Obreros del Campo. Más de veinte años después, esa calle aún no existe, por lo que Izquierda Unida ha pedido por escrito al Consistorio que cumpla el acuerdo, e incluso propone una calle concreta de la localidad, 'Felipe Hidalgo', para cambiarle el nombre.
Cuando se aprobó la moción en el Pleno de hace 20 años, acababa de dejar la alcaldía Isaías Pérez Saldaña, y en su lugar se convirtió en alcalde Rafael González. Bajo su mandato se colocaron en el pueblo monumentos a la música, a la Virgen de las Angustias y a la 'Familia tradicional', con una mujer, su esposo y sus dos hijos, pero nunca se dio curso a la petición del Pleno de 1996. A González le sucedió durante ocho años el también socialista Antonio Rodríguez Castillo, que se mantuvo en el cargo con acuerdos con PA e IU.
Desde el PSOE, su actual portavoz en Ayamonte, José Manuel García del Cid Martín, recuerda que siendo alcalde su compañero Rodríguez Castillo en su anterior legislatura “había un acuerdo PSOE-IU para sacarlo adelante, aunque es verdad que algunos acuerdos se quedan sin aprobar, de hecho ahora llevamos una moción conjunta para que los acuerdos plenarios no se queden en un cajón, con lo que vamos a intentar que se apliquen los acuerdos del Pleno como mayor organismo del pueblo”.
“Todos estamos de acuerdo en aprobar esto”
“Todos estamos de acuerdo en aprobar esto, pero se está dando largas, aunque ellos (el PP) gobiernan como gobiernan, en minoría, pero la oposición es mayoría y lo tiene que lograr”, explica.
Ahora, Izquierda Unida se lo reclama a Alberto Fernández, el alcalde del PP que lleva un año en el cargo, con la petición de que la cercanía de las fiestas locales, a unos días vista, sea el marco ideal para ello. Pero de momento, nada.
Demasiadas esculturas
IU lamenta un comunicado “la proliferación de esculturas durante las fiestas locales en homenajes a diferentes personas de Ayamonte y personalidades sociales de España, lo que nos hacen pensar en las diferentes varas de medir en la implicación del Equipo de Gobierno”. Sobre todo, después de anunciar que se va a inaugurar un monumento a Vicente Ferrer, “del que no dudamos de la importancia de su persona ni de su obra social”, señala la coalición.
“Sí nos parece cuanto menos peculiar la celeridad que se han dado para realizar el acto y hacerse la foto oficial para salir en los medios, aprovechando las fiestas patronales”, explica la nota. Fuentes del Ayuntamiento ayamontino han rechazado “como hacemos siempre” contestar a una nota de un grupo político, aunque sí han subrayado que el monumento ha sido una donación del escultor melillense afincado en Ayamonte, Pepe Gámez, “con lo que no va a costar un euro a los vecinos”.
IU recuerda que el pasado mes de febrero, con registro de entrada en el Ayuntamiento, “le hicimos llegar una propuesta al equipo de Gobierno para ubicar dicha calle, y la respuesta fue que no les parecía apropiada, estando a la espera de que nos den una alternativa que aún no tenemos y que creemos no llegará”.
Además, en el caso de la estatua de Vicente Ferrer, se trata de una escultura “que no tiene la aprobación plenaria, el consenso de todas las fuerzas políticas, y que se pone por decreto de alcaldía. Desde Izquierda Unida no entendemos la celeridad para estos actos motu proprio mientras los acuerdos plenarios se siguen sin cumplir veinte años después”.
Fuera del casco histórico
Concretamente, la petición de IU por escrito recordaba que el Pleno Ordinario celebrado el día 30 de noviembre de 2015 “se rogó se diera cumplimiento del acuerdo plenario por el que se debía rotular la calle”. El acuerdo permitía a IU elegir la calle a rotular, y la escogida fue la citada Felipe Hidalgo, que homenajea a un médico local hace más de 70 años.
Se pide que se cambie de nombre el tramo comprendido entre las Calle Cervantes y Huelva. Desde el Consistorio se sigue sin valorar políticamente este asunto, pero sí se recuerda que “sería un transtorno para más de cien vecinos cambiarle el nombre de sus calles”.
Sin aseverarlo, parece que la intención es que la calle para el cura obrero sea de nueva construcción, y no cambiar una de las del casco histórico, como es la de Felipe Hidalgo. Así se hizo para homenajear a Carlos Cano o a La Peseta. Parece que el cura Diamantino tendrá algo similar, aunque por ahora, sin fecha en el horizonte.
