Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El ataque limitado de Israel a Irán rebaja el temor a una guerra total en Oriente Medio
El voto en Euskadi, municipio a municipio, desde 1980
Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal

Un juez niega la libertad a Juana Rivas pese al indulto: “Podría representar un grave peligro para sus hijos”

Juana Rivas en una imagen de archivo

Álvaro López

74

El juez que hace seguimiento de la situación penitenciaria de Juana Rivas ha rechazado su puesta en libertad, a la que no se oponía la acusación de su expareja Francesco Arcuri, pese a que los dos años y medio de prisión a los que fue condenada por sustracción de menores (al no entregar a sus hijos a su exmarido) quedaron reducidos a la mitad gracias a un indulto parcial del Gobierno. En el auto, adelantado por El País y al que ha tenido acceso este diario, el juez Manuel Piñar argumenta que la plena libertad de la que Rivas disfrutaría con la suspensión de la pena “podría representar un grave peligro para sus hijos”.

El magistrado también señala otros dos motivos por los que no pone en libertad a la granadina. Por una parte, considera que “la penada no ha mostrado arrepentimiento” y por otra que ha repetido su conducta “tras ser condenada en esta causa y estando los menores en Italia”. No solo eso, el juez llega a asegurar que los menores, hijos de Juana Rivas y Francesco Arcuri, estarían en peligro porque uno de ellos mostró indicios de “abusos sexuales” cuando estaban bajo su custodia.

Piñar considera que “son aspectos que afectan directamente a los parámetros de las circunstancias personales del penado y de los efectos que quepa esperar de la suspensión, pues en este caso, la ausencia de arrepentimiento y la posterior repetición de la misma conducta, indica una predisposición a cometer nuevamente el mismo delito, sin que la función preventiva especial de la pena haya obrado en su ánimo delictivo”. Por otra parte, fuentes del caso explican a elDiario.es que “no es excepcional” que no se concedan estos beneficios procesales, sino que lo extraordinario es que Juana Rivas haya recibido el respaldo del Ejecutivo en ese aspecto.

Al respecto, la fiscal del caso ya había pedido esta misma semana la suspensión de la pena de prisión que le quedaba por cumplir a esta vecina de Maracena (Granada) tras una reunión del alto nivel encabezada por la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, para aplicar el indulto parcial concedido por el Consejo de Ministros. Con esta medida de gracia se rebajó la pena de prisión a un año y tres meses, y los seis años de inhabilitación especial para ejercer la patria potestad fueron conmutados por 180 días de trabajo en beneficio de la comunidad.

Querella contra el juez

Los abogados de Juana Rivas cargan duramente contra la decisión del juez Piñar al que acusan de mentir en su auto. Niegan que la mujer no esté arrepentida de sus actos o que haya insistido en su conducta porque no ha existido “nunca ningún procedimiento contra Juana en Italia por este ni por ningún otro motivo”. Además, califican de “increíble y abyecto” que se acuse a su clienta de “permitir o colaborar en abusos sexuales a sus hijos”. Consideran que es “algo tan repugnante” que merece “el más enérgico reproche”.

Por ese motivo, los letrados de la granadina anuncian que van a interponer una querella criminal contra el magistrado por un presunto delito de prevaricación judicial y calumnias, aunque fuentes del caso dan por hecho que no va a prosperar porque lo que señala el juez en el auto “está documentado”. No obstante, este nuevo episodio judicial que se abre con el movimiento que hacen los abogados de Juana Rivas recuerda cómo el juez Piñar ya estuvo en el centro de la polémica durante el juicio por la sustracción de sus dos hijos. Entonces, además de cuestionar los motivos por los que Rivas estaba con Arcuri, se supo que en otros casos había acusado a la Fiscalía de “celo ideológico” al estar “impidiendo la adecuada persecución de algunas falsas denuncias por falsas maltratadas”, entre otras cuestiones.

Juana Rivas, que tras la reducción dos veces de su pena a la mitad está condenada a un año y tres meses de cárcel por un delito de sustracción de menores al marcharse con ellos durante más de un año de la vivienda que compartía con su expareja y padre de los niños en Italia, desoyendo órdenes judiciales de reintegro de sus vástagos, mantiene que siempre actuó en beneficio de sus hijos y de su propia integridad física. “Venía huyendo de maltrato”, ha llegado a decir en alguna ocasión, recordando que Francesco Arcuri fue condenado por un delito de lesiones contra ella en 2009.

Un auto duro contra Juana

El escrito del juez Piñar llaman la atención por su dureza contra Juana y por el relato de algunos hechos que para la defensa de la granadina son una recopilación de “mentiras”. El magistrado basa casi todo el auto en unos presuntos abusos sexuales y arremete contra Juana Rivas en varios pasajes al dudar de su capacidad para cuidar de sus hijos: “Este Juzgado ya emitió el parecer sobre el peligro que para los hijos representa la acusada en un informe contrario al indulto y ya no sabe como hacer que llegue al conocimiento de los restantes tribunales, y por supuesto del Gobierno, que estando los hijos bajo el cuidado y custodia de la madre, uno de ellos fue abusado sexualmente, según dictaminó la pediatra, un forense y manifestó el propio menor”.

Insistiendo en ese asunto, Piñar habla de imágenes “espeluznantes” que dan cuenta de la “presunta negligencia por desatención de la obligación de velar por él, de modo que, permitirle la libre deambulación con el niño, puede suponer ponerle en disposición un grave peligro para él”. Basándose en documentos que están en la causa original, el juez dice que Juana Rivas no es quien lleva a su hijo al médico tras los presuntos abusos, sino que es el colegio en el que está estudiando el niño el que lo hace. “Tampoco consta que denunciara ese hecho como es de esperar en una madre normal. Esa perspectiva de madre que lucha por los hijos, no tuvo un reflejo en esos hechos concretos tan graves acaecidos con uno de los menores”.

Además, en el auto se hace una serie de preguntas. “¿Dónde metió la penada a su hijo menor para que fuera víctima de tan atroz atropello? ¿Qué hizo para vigilarlo? Si la penada ya dijo que volvería a repetir el secuestro de los menores, si ya lo repitió estando estos en Italia, si tampoco se ha arrepentido, ¿quién asegura que no los volverá a secuestrar? Y sobre todo, ¿quién asegura que con plena libertad de movimientos no volverá a secuestrarlo y descuidar su custodia y vigilancia para evitar que sean objeto de otra situaciòn de peligro?”. Por último, excusa su decisión de negarle la libertad a la granadina alegando que “no es un capricho ni una cruzada contra nada, sino una cuestión arraigada en unos hechos; ahí están los informes de la pediatra y de la forense, las fotografías tomadas al menor demostrativas de lo ocurrido, que puede ocurrir porque el menor estaba con su madre”.

Con este revés judicial, la situación procesal de Juana Rivas vuelve a complicarse. A pesar de que su libertad parecía cuestión de tiempo, la decisión del magistrado Piñar hace que la mujer tenga que seguir en prisión hasta la próxima primavera, con el mismo régimen de salidas actual. Para entonces ya habrá cumplido las tres cuartas partes de su condena y podrá disfrutar de libertad condicional hasta que se cumplan los 15 meses de cárcel a los que fue condenada. Por otra parte, aunque la Justicia italiana ha permitido que sus hijos pasen la Navidad con ella en Granada, aún tiene que pronunciarse sobre la custodia exclusiva de los menores. Esa decisión se demorará hasta marzo. Para esa fecha, Rivas seguirá en prisión.

Etiquetas
stats