Un inspector de Educación exige los nombres de los alumnos que prepararon la prueba de Primaria en casa
La polémica alrededor de la evaluación individualizada de 3º de Primaria no para de agrandarse. El último capítulo tiene como protagonista a Ignacio Polo Martínez, inspector de Educación del Gobierno de Aragón y jefe de Distrito en el Servicio Provincial de Huesca. Tal y como ha denunciado CGT Enseñanza, Polo envió, el pasado 7 de mayo, un mail (al que ha tenido acceso eldiario.es/Aragón) pidiendo que se le dieran los nombres de los alumnos que habían “hecho la prueba previamente en sus domicilios (total o parcialmente)”.
La inquietud parte de la filtración de algunas de las preguntas del examen que se produjo el día anterior al inicio de las pruebas, que en Aragón tuvieron lugar los pasados 5, 6 y 7 de mayo. No explicita el inspector en su correo qué es lo que ocurrirá con la nota final de estos niños y niñas que reconozcan haber preparado la prueba en sus casas.
A este respecto, es importante recordar que estos exámenes no son corregidos en los centros sino se encargarán 66 docentes elegidos por el Gobierno de Aragón.
El mail se envió a distintos centros de Huesca y provincia: San Viator, CEIP Alcoraz, CEIP Pedro J. Rubio y CPIFP Pirámide, en la capital; y CEIP Ramón y Cajal (Ayerbe), CEIP San Ginés (Lupiñén), CEIP Santos Samper (Almudevar), CEIP Virgen Soledad (Bolea), CRA La Sabina (Robres), CRA Montearagón (Chimillas) y CRA Violada Monegros (Tardienta).
Según manifiestan distintos miembros de CGT Enseñanza, el inspector estuvo en tres de estos colegios (Pedro J. Rubio, Alcoraz y San Viator) comprobando que las pruebas se realizaban correctamente y preguntando a los niños, “a mano alzada, quién había preparado los exámenes en casa”. Posteriormente, instó al equipo directivo de los respectivos centros a que le indicaran el número GIR (número indicativo de los estudiantes) de los “niños y niñas que habían levantado la mano”. Petición que se oficializó días después con el mail.
En la misiva, el inspector también pide a los centros que se marque como No Presentado (NP) a aquellos alumnos que “presenten justificante médico o aporte justificante que acredite un supuesto de fuerza mayor –hecho imprevisible que no puede evitarse-”. Si no se acredita, dice, la calificación será de Insuficiente (IN). Para terminar, deja claro que “no será suficiente con alegar motivos personales”.
Lo anterior choca frontalmente con las declaraciones realizadas por el director general de Política Educativa y Educación Permanente del Gobierno de Aragón, Manuel Magdaleno (el mismo día de inicio de las pruebas), cuando aseguró que “no es necesario que el justificante médico lo firme un pediatra, en Primaria basta con la confirmación de los padres para que el alumno no vaya a clase”.
A su vez, sus palabras venían a rectificar la instrucción firmada por él mismo, el 24 de abril de 2015, que repite el inspector en su correo a los centros.