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Revilla sitúa el tren Santander-Bilbao como “la gran obra de futuro” para Cantabria

Revilla, junto a Marcano y Fernández, con el mapa de la Red Transeuropea de Transportes.

Laro García

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La gira continental de Miguel Ángel Revilla por diferentes instituciones comunitarias en Bruselas ha traído consigo un nuevo mantra: “El tren Santander-Bilbao sería la gran obra para el futuro de Cantabria”. Así lo ha ratificado este jueves el dirigente regionalista a su regreso de ese viaje, en el que ha mantenido diversos contactos políticos para conseguir que esta conexión ferroviaria con el País Vasco salga adelante y sea cofinanciada con fondos europeos en el horizonte de 2030 tras dar por “asegurado” el AVE con Madrid.

Revilla, que ha comparecido este jueves en rueda de prensa junto a la consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández Viaña, y el consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Francisco Javier López Marcano,  para informar de su reciente visita a Bruselas, ha situado esta reivindicación en el centro de su agenda para los próximos meses y ha asegurado que “dará la batalla” con el objetivo de mejorar la conexión de Cantabria con el Corredor Atlántico, prevista hasta ahora a través de Palencia.

Una vez en marcha las obras del AVE entre Cantabria y la Meseta, que este pasado fin de semana dieron un nuevo paso adelante y cuentan con financiación europea para ejecutar los tramos entre Palencia y Alar del Rey y la duplicación de vía entre Santander y Torrelavega, con cargo a los Fondos Europeos de Recuperación, Transformación y Resiliencia, la reivindicación defendida por el presidente autonómico en la capital belga se ha centrado en la comunicación con Bilbao, para cuya defensa ha pedido “una postura muy firme” al Gobierno de España, dado que la Comisión Europea no es partidaria de modificar su planificación.

Aunque el Ministerio de Transportes ha comprometido recientemente su apoyo, Revilla ha anunciado que instará tanto al presidente, Pedro Sánchez, como a la propia ministra, Raquel Sánchez, a defender ante las autoridades europeas la inclusión de esta infraestructura en el Corredor Atlántico, aprovechando la reforma del reglamento actualmente en tramitación y que será aprobada por la Comisión Europea en el plazo aproximado de un mes.

“Ahora el Gobierno de España tiene que hacer su tarea”, ha recalcado Revilla, para quien esta obra es “fundamental para articular Europa” y además “va en la línea” de la apuesta comunitaria por el ferrocarril para reducir el tráfico por carretera y reducir los gases contaminantes, de acuerdo con los principios del Pacto Verde Europeo.

Según Revilla, a lo largo del mes de diciembre se conocerá el borrador del estudio informativo que se encargó para conocer las alternativas de esa futura línea ferroviaria que podría unir en unos 50 minutos a Santander y Bilbao, desde el coste económico y medioambiental hasta los plazos o los posibles itinerarios de la ruta, aunque el Gobierno de Cantabria ya ha trasladado al Ministerio que sus dos requisitos “indispensables” son que esta conexión sea de ferrocarril mixto -es decir, de pasajeros y de mercancías- y que incluya obligatoriamente paradas en Laredo y Castro Urdiales.

El presidente cántabro ha vuelto a defender los beneficios que supondría la conexión con Bilbao, una actuación que considera “fundamental” y que serviría para rebajar la emisión de CO2 y de “alivio” del tráfico por carretera, actualmente colapsado durante muchos fines de semana y en horas punta. De hecho, Revilla ha reiterado que se trata de “la gran obra del futuro de Cantabria” una vez que considera que ya está “garantizada” la conexión de alta velocidad con la Meseta.

Apoyos europeos

Además, el jefe del Ejecutivo regional ha incidido en el apoyo explícito que ha logrado en Bruselas de los vicepresidentes de la Comisión, Josep Borrell y Margaritis Schinas, para mediar en favor de Cantabria ante la comisaria de Transportes, Alina Valean, pese a las reticencias mostradas por el responsable de la Política de Redes Transeuropeas de Transportes e Inversiones, Pablo Fábregas.

“Esa batalla no está perdida”, ha asegurado, a la espera de que la Comisión Europea se pronuncie, previsiblemente durante el mes de diciembre. Además, y en el caso de que el órgano de Gobierno de la UE no atienda la demanda de Cantabria, el presidente tiene “mucha fe” en que la iniciativa pueda prosperar en el Parlamento Europeo, a través de las enmiendas de los grupos mayoritarios.

De hecho, ha destacado el apoyo expresado por los eurodiputados españoles Izaskun Bilbao (PNV, RENEW EUROPE), Luis Garicano (Cs, RENEW EUROPE), Isabel García Muñoz (Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas) y Pablo Arias (PPE), con quienes se reunió el pasado lunes durante su estancia en la capital belga.

Conexión con la Meseta

Revilla se ha mostrado “optimista” respecto a la conexión ferroviaria de Cantabria con Europa y ha insistido en que el tren con Palencia es “una realidad”, con dos tramos en obras hasta Osorno y la duplicación de vía entre Santander y Torrelavega adjudicada, a lo que se añade la licitación, a partir del primer trimestre de 2022, del trazado hasta Alar del Rey, mientras avanzan los estudios técnicos del tramo hasta Reinosa.

Este tren conectará la capital cántabra con Madrid en menos de tres horas cuando esté finalizado y supondrá la unión con Europa “en el mismo plazo o antes que Galicia y Asturias”. “Estamos sentando las bases para que Cantabria pierda ya el aislamiento de por vida”, ha opinado Revilla.

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