Educación anuncia una nueva fusión de centros en Guadalajara capital que supone cerrar las instalaciones del colegio Río Tajo
La Delegación de Educación, Cultura y Deportes de Guadalajara ha decidido fusionar los colegios de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Río Tajo y Balconcillo, en la capital provincial, que generarán el nuevo CEIP número 17 de la ciudad. Se ubicará en las instalaciones del actual CEIP Balconcillo.
Esta decisión responde “al reducido número de matriculaciones en ambos centros”, que se encuentran ubicados en un radio de 500 metros, en el que también se ubica el CEIP Alcarria que presenta cifras similares de matriculación.
Así lo ha indicado el delegado, Ángel Fernández-Montes que ha asegurado que esta reorganización de los servicios educativos que se prestan en la ciudad de Guadalajara pretende “optimizar recursos y mejorar la calidad de la prestación de los mismos adaptándolos a las necesidades actuales de la capital”.
No será el primero en esta legislatura. Hace poco más de un año se anunciaba la fusión de dos centros en Torrejón del Rey (Guadalajara), entre protestas de los padres, y otros dos en Tobarra (Albacete) por la misma razón.
El Ejecutivo regional asegura que los tres colegios (Río Tajo, Balconcillo y Alcarria) están preparados para atender dos líneas por curso e incluso en el caso del Balconcillo tiene capacidad para tres clases para cada curso.
Sin embargo, en la actualidad en el Río Tajo solo hay alumnado para una clase por curso, con ratios con una media que no alcanza los 20 alumnos.
En cuanto al CEIP Alcarria solo en un curso de Primaria mantiene dos líneas, con una ratio de 13 alumnos por clase, y el Balconcillo solo en algunas de las clases cuenta con alumnado para dos cursos, igualmente con ratios muy bajas.
Esta media se va reduciendo cada curso con un número menor de matriculaciones en estos colegios, que se encuentran en una zona de la ciudad que presenta cada año menos población en edad escolar.
La elección del edificio del Balconcillo para unificar al alumnado de ambos centros se debe a que se trata, según ha indicado el delegado de Educación, Cultura y Deportes, “de las instalaciones que nos permiten acoger a todo el alumnado, si así lo desean las familias, sin ningún problema de espacio y por supuesto sin superar las ratios en ningún caso y asegurando la distancia de seguridad COVID si hubiera que mantenerla el próximo curso”.
Además, se da la circunstancia de que actualmente el CEIP Río Tajo acoge en parte de su centro algunas de las aulas de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI).
Una vez se produzca la fusión, la EOI se trasladará íntegramente a las instalaciones de este colegio, pudiendo ampliar su número de aulas y por tanto la oferta de plazas para la ciudadanía.
Como tercera mejora, las instalaciones que en la actualidad albergan la sede central de la EOI pasarán a estar ocupadas por el Centro de Educación para Personas Adultas Río Sorbe, mejorando así de manera sustancial sus instalaciones.
Todas estas novedades serán realidad en el curso escolar 2021/2022 y por tanto, en el próximo proceso de escolarización las familias ya podrán elegir centro en función de estos cambios.
Todo el alumnado del actual Río Tajo y Balconcillo tendrá una plaza reservada en el nuevo CEIP 17 de forma automática y sin necesidad de renovar matrícula. No obstante, si alguna familia desea cambiar de centro podrá solicitar cualquier otro de la ciudad en el proceso de escolarización.
Por ello, el delegado de Educación, Cultura y Deportes ya ha mantenido reuniones informativas con responsables municipales, equipos directivos de los centros, representantes sindicales y ha enviado una carta informativa a las familias para darles a conocer el proceso.
ANPE: ¿Por qué la reducción de unidades debe soportarla solo la educación pública y no la concertada?
La noticia ha sido comunicada a los representantes sindicales en la Mesa sectorial de Educación celebrada hoy sobre plantillas de los centros educativos públicos para el próximo curso 2021/202.
Para el sindicato ANPE, es una consecuencia directa de la publicación, seis días antes de la entrada en vigor de la LOMLOE, de la Orden 2/2021, de 12 de enero, de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, por la que se aprueban las normas reguladoras para la suscripción, renovación y modificación de conciertos educativos en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, para el período comprendido entre los cursos 2021/2022 y 2024/2025, “con el claro objetivo de evitar aplicar la nueva regulación de la LOMLOE sobre los conciertos educativos en Castilla-La Mancha”.
Eso permite, añaden, renovar o suscribir conciertos educativos, con una duración mínima de seis años, en el caso de la educación primaria, y de cuatro años en el resto de las enseñanzas, basándose en la regulación establecida por la LOMCE, en vigor en el momento de la publicación de dicha Orden.
En años anteriores, las órdenes de suscripción, renovación y modificación de conciertos educativos en nuestra región nunca se habían publicado en el mes de enero, siempre posteriormente. De hecho, la última fue publicada el 16 de febrero de 2017, “lo que hace aún más patente la intencionalidad de la Consejería de Educación de adelantar la publicación de dicha Orden para no tener que aplicar la nueva regulación de racionalización de gasto que recoge la LOMLOE respecto a los conciertos educativos”.
Desde ANPE dicen no oponerse a los concierto educativos porque al considerar que las enseñanzas pública y concertada “son complementarias” pero “siempre nos opondremos, por el uso responsable y la racionalización del gasto público, al cierre de unidades o centros en la enseñanza pública mientras se mantienen los conciertos educativos en las localidades en las que se da esa pérdida”.
Es “paradójico”, sostienen, que el argumento del “uso responsable de los recursos públicos” sea uno de los esgrimidos por los responsables educativos para tomar medidas como la de cerrar el CEIP 'Río Tajo', uno de los centros educativos con más arraigo en la ciudad de Guadalajara, trasladando al alumnado de este a las instalaciones que hoy ocupa el CEIP 'Balconcillo', “ocultando esta información en las negociaciones provinciales de plantillas escolares para el curso que viene”.
El sindicato reconoce que “hay un descenso de la natalidad y con ello de matriculación en la ciudad” pero ANPE denuncia que este deba “ser soportado exclusivamente por la enseñanza pública mientras que, en la enseñanza concertada, estos mismos gestores, mantienen todas las unidades de la capital para el curso que viene”.
Para ANPE, racionalizar recursos, en este caso concreto, como en el resto de las localidades que pueden perder unidades, es aprovechar las infraestructuras y las plantillas de las que disponen nuestros centros públicos, para potenciarlos frente a los elevados costes que suponen para las arcas públicas los numerosos conciertos educativos suscritos hace unos días por el gobierno regional, y que afectan directamente a la enseñanza pública.
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