García-Page contempla ahora usar el trasvase Tajo-Segura “como última medida excepcional”
Importante matiz el introducido por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en su discurso sobre el agua. Durante su intervención en la entrega de los Premios Gran Selección de Castilla-La Mancha, ha afirmado contemplar el uso del trasvase Tajo-Segura como “última medida excepcional” y en el caso de que hubiera riesgo para abastecimiento humano. Hasta el momento, las derivaciones de agua se han usado para los regantes de Levante y eso ha motivado la ‘guerra del agua’ con la Comunidad Valenciana y Murcia, pero en esta ocasión, García-Page no ha pedido su derogación, sino su uso “excepcional”. De cualquier forma, actualmente esta infraestructura está bajo su umbral mínimo trasvasable.
Concretamente, el presidente castellano-manchego ha subrayado que esta región se ha convertido en una “enorme potencia agroalimentaria y en la mejor despensa” y, tras reconocer que no existen “grandes materias primas”, ha asegurado que “la única que realmente necesitamos” es el agua.
“Un agua que hoy falta, a pesar de que la naturaleza nos la puso al alcance, y que ha sido penosamente gestionada en nuestro país por todos los gobiernos”, ha lamentado. Por ello, y estando en “plena crisis climática”, ha destacado la necesidad de afrontar los problemas que afectarán a la economía y hábitos de vida “a través de una reflexión constructiva”. En este sentido, ha puesto el acento en Castilla-La Mancha es una región seca “y vemos como nuestra agua se va a otra región seca, y me da lástima que discutamos entre regiones secas”.
Dicho esto, y tras declararse una vez más “antitrasvasista por experiencia y no por concepto”, ha alertado del “atentado ecológico” que puede producirse en la cabecera del Tajo de prolongarse esta situación, “cuando no tenemos agua que pueda considerarse excedentaria”.
Primero, la desaladoras
Por ello, ha pedido que en Levante se use primero el agua de las desaladoras “que tanto dinero nos han costado a todos” como ya está ocurriendo actualmente ante la imposibilidad de trasvasar, y que el trasvase se contemple, y aquí está el matiz, “sólo como última medida”.
Se da la circunstancia de que la posibilidad de acercar posturas sobre un trasvase de tales características, fue una de las contempladas con el Gobierno murciano en la Conferencia de Presidentes autonómicos del pasado mes de enero. Fuentes del Ejecutivo castellano-manchego aseguran que todavía no hay ninguna negociación con Murcia.
Sin embargo, no es la primera vez que García-Page realiza un llamamiento a la concordia entre las comunidades implicadas y que solicita un diálogo para elaborar un Pacto estatal sobre el Agua. En su momento, afirmó que los partidos políticos de esta comunidad reconocen que no hay agua en el trasvase y desde entonces ha defendido una solución “de consenso”.