“Insultos y amenazas” a animalistas en el festejo ‘Atrapa al gorrino Antón’, sancionado por maltrato

Pese a las sanciones que la Consejería de Medio Ambiente impuso al Ayuntamiento de Puerto Lápice (Ciudad Real) en las dos ediciones anteriores, esta localidad volvió a celebrar el pasado 18 de enero el festejo ‘Atrapa al gorrino Antón’. Consiste en soltar varias crías de cerdo en un recinto cerrado donde los niños tienen que atraparlos. Una vez capturados, sueltan a uno de ellos para atraparlo entre todos. Los colectivos animalistas denunciaron en años anteriores que el animal sufre con ello “estrés y maltrato” tal y como también reflejó la Administración autonómica. Este año, la Asociación Antitaurina de Ciudad Real añade a su denuncia que varios vecinos amenazaron e insultaron a tres activistas de la provincia que intentaron grabar el festejo. La ha puesto en conocimiento de la Policía Nacional.

Este colectivo recuerda que tanto en 2016 como en 2017 el Partido Animalista PACMA denunció este festejo y ambos años la Junta sancionó al Ayuntamiento de Puerto Lápice ya que considera que este festejo infringe la Ley Protección de los Animales Domésticos, que prohíbe “cualquier práctica que pueda provocar, sin causa justificada, sufrimientos, daños o la muerte del animal”.

Este año se ha denunciado por tercera vez y desde la Asociación Antitaurina incorporan además el incumplimiento de otros artículos de esa ley, como las prohibiciones de donar o sortear animales, que no haya suficiente espacio en el transporte o la prohibición de utilizar animales domésticos en fiestas cuando comporte maltrato.

A ello añaden la “agresión” que recibieron varias activistas ese día. Explican que con el objetivo de grabar a los cerdos, se presentaron en la plaza del Ayuntamiento. Uno de los asistentes les preguntó que “si eran animalistas y venían a tocar los cojones”, a lo que una de ellas le respondió que solo iban a grabar a los cerdos con el fin de denunciar por tercer año consecutivo un festejo ilegal, “dejando claro que no iban a grabar a ningún niño ni niña, solo tomarían imágenes de los animales y se irían”.

Insultos y amenazas

“Este hombre comenzó a informar a los asistentes de malas formas, diciendo que iban a grabar a sus hijos, llegando a informar a la persona encargada de la megafonía y este lo anunció desde el megáfono. Fue entonces cuando varias personas comenzaron a insultar ('cobardes', 'guarras', 'feas', 'comehiervas', entre otros muchos), a amenazar con reventar la cámara con la que querían hacer la foto a los cerdos enjaulados, y hasta llegar a decirles que si grababan, de allí no salían”, relatan. 

En este punto, el colectivo antitaurino destaca que la propia alcaldesa del municipio, Ana María González (PP) se posicionó contra las activistas, “llegando a prohibir que echasen fotos a los cerdos enjaulados y permitiendo las amenazas y los insultos de los vecinos”. “En este punto nos preguntamos si el hecho de ser alcaldesa le da derecho a coartar la libertad de tres personas”. Todo ello ha sido recogido con testimonios, audios y grabaciones y entregado a la Policía Nacional de Ciudad Real.

Por último, la asociación incide en el maltrato animal de este tipo de festejos ya que “la mayoría de las veces los atrapan aplastándolos y arrastrándolos de las patas traseras, junto con el minúsculo e inapropiado transporte”. “Este maltrato tiene su base en la normalización de la violencia, violencia que fue demostrada por muchos de los vecinos y vecinas del municipio contra tres personas que solo querían hacer un acto de justicia. Es una vergüenza que por ello hayan sido agredidas, y mayor vergüenza pensar que si no se hubiesen ido rápidamente o se hubiesen puesto la mitad de violentas que ellos pudiesen haber acabado mucho peor”, concluye.