Page sugiere que Levante pague por agua desalada lo mismo que por la “casi regalada” del Tajo
Las breves palabras que el presidente en funciones y candidato a la investidura, Mariano Rajoy, ha dedicado en el Congreso al trasvase Tajo-Segura, reafirmando la apuesta por su permanencia, sigue desencadenando las críticas del Gobierno castellano-manchego. El presidente de la Junta, Emiliano García-Page, en su primera intervención pública tras las vacaciones, ha anunciado que está dispuesto a apoyar que valencianos y murcianos paguen lo mismo por el agua de las desaladoras que por el agua “regalada” del río Tajo que obtienen a través de esa infraestructura.
Según ha afirmado el presidente, con esa afirmación, Rajoy “ha dejado en evidencia la gran mentira” del Memorándum del Tajo. Por eso ha adelantado que en el próximo Debate sobre el Estado de la Región planteará al Gobierno central, que “aplica austeridad a todo”, que no permita que las desaladoras “estén sin usar”, ya que es una “verdadera vergüenza nacional”.
“Que valencianos y murcianos tengan el mismo precio por ese agua que la del Tajo. Es un agua casi regalada”, ha dicho, refiriéndose al gasto de 550 millones de euros pagado por la Administración europea para las desaladoras, “cerradas a cal y canto mientras se esquilma al río”.
Así, el presidente de Castilla-La Mancha, ha argumentado que si el problema es la austeridad en este país, “que empiecen a poner en marcha lo que tanto dinero costó y que si no, habrá que devolver a Europa”. “El estado ya subvenciona las tarifas del trasvase Tajo-Segura”, ha recordado, sugiriendo hacer lo mismo con el agua de las desaladoras. Finalmente, ha manifestado su deseo que alguien del PP en la región contestara a Rajoy “porque han quedado con las vergüenzas al aire”.
