Las plataformas contra la ganadería industrial trazan su mapa para acciones conjuntas en toda España
Importante presencia tuvieron las distintas plataformas de Castilla-La Mancha que acudieron al II Encuentro estatal Stop Ganadería Industrial que se celebró los días 25 y 26 de mayo en la localidad de Minglanilla, en Cuenca. Rosa Díez Tagarro, portavoz de la Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial, ha explicado que el encuentro ha servido para consolidar a la coordinadora que ya empezó a funcionar tras el primer encuentro, celebrado en septiembre de 2017 en Huesca. “Había necesidad de fortalecerlo, y también de dar la bienvenida a un montón de nuevas plataformas vecinales que han surgido”, explica.
Y es que son “decenas” los movimientos ciudadanos que se han ido constituyendo a lo largo de todo el país en los últimos meses, por lo que una puesta en marcha “más oficial” era ya algo necesario. Para ello, el encuentro acogió diversos espacios formativos para concretar un discurso común entre las plataformas, que se podrá ver a través de la recién presentada web estatal, y también cómo debe ser la comunicación que realice cada una de las plataformas. “Tenemos mucho trabajo que ver aún cómo abordar en el futuro, pero estamos viendo una serie de acciones conjuntas a realizar el próximo año para los movimientos vecinales a todo tipo de niveles”, explica Díez.
Las acciones serán variadas, al igual que son las inquietudes que tienen las plataformas ante este tipo de industria: por ahora se plantean alrededor de la legislación de esta modalidad, de sus consecuencias sobre la salud pública y sobre los efectos en el medio ambiente. En este sentido, por ahora, se plantean acudir también a organismos internacionales para presentar su situación, sus demandas y reivindicaciones. En esta misma línea es el trabajo que se ha seguido en el encuentro.
“Hemos tenido sesiones de información sobre los riesgos para la salud pública de quienes están expuestos a la ganadería industrial, bien para los que trabajan en ella, bien para los que viven cerca de estas instalaciones”, describe Díez. Para ello contaron con la presentación de Jesús Martínez-Moratalla Rovira, neumólogo del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, CHUA, que habló sobre las enfermedades respiratorias asociadas a la exposición a ganadería industrial. Igualmente, se debatió acerca del informe de la doctora Ángela Prado, también de Albacete, en el que se alerta de los riesgos para la salud pública de este tipo de industria.
Por otro lado, las plataformas repasaron herramientas sobre cómo abordar las alegaciones u ordenanzas relacionadas con las macrogranjas, con especial énfasis en el papel que cumplen los ayuntamientos en este sentido. “Los movimientos nuevos se enfrentan a un tema muy complejo y necesitan mucha asistencia técnica, sobre todo en temas jurídicos que son complicados ya que la legislación puede variar entre cada comunidad”, explica Rosa. Por eso, señala, es “clave” que quienes llevan más tiempo constituidos como movimientos funcionen como asesores de los nuevos.
“Puede parecer muy complejo porque se tocan distintos palos: medio ambiente, mundo rural, salud pública, bienestar animal... Si no afectara a tanto, sería también mucho más fácil de comunicar. Por eso, tenemos que buscar asesoría jurídica y luego transmitir un tema que muchas veces los desborda. Además, según los territorios hay poco eco informativo, pero esto no es el caso de Castilla-La Mancha”, recalca. Sin este eco, señala, es “muy complicado” hacer llegar el mensaje: “pero con el refuerzo que los movimientos más antiguos han dado, los nuevos salían muy contentos, gracias a las referencias que han podido recibir y por sentirse tan acogidos”, recalca.
En total, fueron más de 30 representantes vecinales y organizaciones los que acudieron al evento, un número que desde la organización consideran “muy representativo” de las organizaciones que existen igualmente, además de incluir entidades a nivel nacional e internacional como Food & Water Europe. “Es un buen mapa de la resistencia”, asegura Díez. De Castilla-La Mancha acudieron representantes de prácticamente todas las provincias: la asociación para la economía responsable de Almendros, la coordinadora Acuífero 23 y Macrogranjas, la plataforma cívica de Lucillos y también la de Gamonal, No a la macrogranja en Pozuelo y Argamasón, Retamoso Sostenible, Stop Macrogranjas Molina de Aragón, Pueblos Vivos Cuenca y la plataforma de Alpera y Ayora.
El encuentro sirvió también como un punto de apoyo para los actos de protesta que se han convocado para el Día de la Región en Talavera de la Reina, donde el movimiento quiere pedir una moratoria en la concesión de licencias para este tipo de instalaciones. Acudirán representantes de las plataformas y movimientos contrarios a las macrogranjas de las cinco provincias de la región en numerosos autobuses para llegar a las 13:00 horas a la Plaza de la Trinidad donde se realizará la marcha que acabará en la Plaza del Pan donde se celebrará una comida reivindicativa, para luego acudir al Teatro Palenque, para volver a expresar sus reclamaciones en el acto institucional.
Entre otras cosas, pedirán la redacción de un calendario de la instalación de las macrogranjas y pedir que, tal como lo señala la Ley Ambiental regional, los proyectos cuenten con una Declaración de Impacto Ambiental y también Evaluación Ambiental Estratégica. Igualmente, exigirán que se limite el número de las instalaciones y que el Gobierno regional estudie cómo afectan a los acuíferos o al turismo rural, entre otros factores.
