La UCLM defiende que no ha sufrido “sustancialmente” los ajustes en investigación
El último estudio U-Ránking, del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) y la Fundación BBVA sitúa a la Universidad de Castilla-La Mancha entre aquellas instituciones con menor productividad docente, si bien se perciben ligeras mejoras en términos de productividad investigadora, y también de transferencia tecnológica. Esto se corresponde con la tendencia general de los resultados del índice, que señala que las universidades privadas son las líderes en términos de docencia, pero que las públicas son las encargadas de llevar el fuerte de la investigación.
Manuel Villasalero, vicerrector de Economía y Planificación de la Universidad de Castilla-La Mancha ha señalado que, según lo que señala el U-Ranking, se deben tomar en cuenta varios factores. En primer lugar, es de carácter nacional, mientras que desde la institución se intenta mirar por la situación internacional, para poder posicionarse fuertemente en ese contexto. De hecho, esta misma semana se está estudiando cuál es el impacto que tiene en la actividad universitaria el ránking de Shanghai, uno de los más conocidos a nivel mundial y usado también en el documento de la Fundación BBVA y el IVIE.
Por otro lado, Villasalero ha remarcado que los resultados que se señalan en el índice se refieren al periodo de entre 2012 y 2013. “Entre estos años se concentraron la mayor parte de los ajustes que ha sufrido en particular la universidad regional”, señala el Vicerrector, quien ha añadido que en el documento no se toma en cuenta el contexto más reciente del 2014, cuando ya se espera puedan plasmarse indicadores “en sentido creciente. Además, Villasalero ha matizado que debe tomarse en cuenta que apenas hay variaciones sustanciales ”a la baja“ ni en docencia, investigación o desarrollo.
Aunque ha aceptado que “se debe reconocer un ajuste muy severo, particularmente en investigación”, el vicerrector ha señalado que el impacto no ha sido inmediato, y que existe un “retraso” entre los cambios que los recortes significan para la institución. De todos modos, Villasalero asegura que la Universidad demuestra, ante estos “pequeños” cambios, una capacidad “manifiesta”, y que la “complicada” situación financiera se ha dejado atrás, por lo que se espera cambios positivos en breve. Para ilustrar esta mejora, ha señalado diversos proyectos europeos que se están llevando a cabo en los campus, y ha anunciado que en 2015 se pretende invertir, gracias a convocatorias internacionales, unos 12 millones de euros en renovar equipos de laboratorio.
Por su parte, el sindicato CSIF reitera desde hace más de un año la necesidad de apoyar con más financiación a la Universidad de Castilla-La Mancha, que han señalado como uno de los “motores” de la investigación en la región. En este sentido, la organización ha señalado que el Gobierno regional debe hacerse cargo de detener el descenso en el personal investigador, no sólo en la Universidad, sino en general en la región. De este modo, instó nuevamente en enero a que se apruebe el Plan Regional de Investigación e Innovación 2015-2020.
En el caso especial de la Universidad, el sindicato ha señalado también a recuperar la investigación de la institución, que ha sufrido un descenso presupuestario del 23%. Estos ajustes han tenido consecuencias, como la paralización de las obras de los edificios de facultades de Medicina en Ciudad Real y Farmacia en Albacete, a juicio de CSI-F. No sólo eso, sino que también la plantilla de la UCLM se ha visto reducida en unos 400 profesores en los últimos años, perdiendo también cerca de 80 miembros del personal de administración y servicios. En este sentido celebraban que la Universidad haya logrado posicionarse como la octava del país en el impacto de sus publicaciones en áreas científicas, “con recursos tan mermados”.
