ICV-EUiA quiere llevar a Boi Ruiz ante el Constitucional si no paraliza el Consorcio Sanitario de Lleida
El Parlament catalán aprobó la semana pasada una moción que instaba al departamento de Salut, encabezado por el conseller Boi Ruiz, a paralizar el Consorcio Sanitario de Lleida, un proyecto que centraliza los servicios sanitarios del territorio, cediendo la gestión del Instituto Catalán de Salud (ICS) y Gestión de Servicios Sanitarios (GSS) a manos de un conglomerado participado, entre otros, por la Universidad de Lleida, el Servicio Catalán de la Salud y el Parque de Investigación Biomédica de Lleida. La moción salió adelante con los votos favorables de ICV-EUiA, quien la proponía, además de los de PSC, ERC, C's y la CUP.
Según afirma el diario El País, una semana después de aquella moción el departamento no solo no ha parado el proyecto sino que el delegado de Salut en Lleida, Josep Pifarré, ya ha puesto fecha del inicio de la actividad al consorcio: este verano. Por ello, ICV-EUiA, grupo promotor de la censura al proyecto en el Parlament, estudia ahora cómo llevar a Boi Ruiz a los tribunales si su conselleria continúa sin hacer caso a las demandas de la Cámara catalana. “El grupo parlamentario de ICV-EUiA no descarta llegar hasta el TC si hace falta”, ha advertido este domingo la portavoz del grupo, Dolors Camats.
Para Iniciativa y Esquerra Unida el hecho de que el conseller haya continuado con su proyecto en contra del mandato parlamentario es la prueba de que la intención del Govern es “cambiar el modelo sanitario catalán” de espaldas al Parlament y a la ciudadanía. “Se están cargando y están empequeñeciendo la empresa pública más importante de Cataluña”, ha manifestado Camats. Además, la diputada ha reprochado a ERC que votara en contra de la reprobación de Boi Ruiz la semana pasada, evitando que el Parlament censurara su gestión.
El Consorcio Sanitario de Lleida es un proyecto al que se han opuesto partidos, sindicatos y plataformas en defensa de la sanidad pública, que acusan al Govern de estar permitiendo una privatización encubierta. Para quienes se oponen al Consorcio, el plan de Ruiz trocea el ICS y hace que la gestión sanitaria de la provincia recaiga en un ente mucho más opaco que “desdibuja la línea entre lo público y lo privado”. Añadido a eso, los sindicatos critican que se perderán plazas de personal estatutario ya que, aunque se prevé que los trabajadores estatutarios del ICS se incorporen al Consorcio manteniendo su condición, las nuevas incorporaciones de personal lo serán con régimen laboral.
Desde el departamento de Salud aseguran que es necesario unificar los servicios sanitarios de Lleida y que estará expresamente prohibida la entrada de capital privado en el nuevo ente, algo que no convence a sus críticos. La Marea Blanca de Lleida recogió más de 38.000 firmas en contra del Consorcio y ha llevado a cabo varias movilizaciones masivas.
El Consorcio Sanitario de Lleida es el laboratorio mediante el que el Govern ensaya un nuevo modelo de gestión sanitaria para Catalunya. El proyecto fusiona todos los entes públicos relacionados con la salud y según el departament de Salud permitirá una mejor gestión de los recursos. Para las entidades que se oponen, se trata de hacer desaparecer al Instituto Catalán de Salud, uno de los sistemas sanitarios que se han mostrado más eficientes, según afirman. Sostienen además que el Consorcio estará fuera del control del Parlament por lo que se permitirán contratos sin concurso público.