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Castilla-La Mancha, la segunda comunidad autónoma con mayor descenso del paro en 2018

FOTO: Europa Press

Teresa Sánchez Garzón

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Castilla-La Mancha cierra el 2018 con 36.500 parados menos que hace un año, tras un cuarto trimestre en el que el descenso del paro fue en 4.000 personas, según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta forma, la tasa de paro en Castilla-La Mancha se situó en el 16,16%, con un total de 160.000 desempleados al cierre del año pasado.

A nivel nacional, el paro bajó en 462.400 personas en 2018, lo que supone un 12,3% menos que en 2017, registrando su sexto descenso anual consecutivo. Este retroceso es inferior a los experimentados en los cuatro años anteriores, aunque superior al de 2013, cuando el desempleo bajó en 85.400 personas.

En comparación con otras comunidades autónomas, en términos porcentuales, Castilla-La Mancha ha sido la segunda región en la que más ha descendido el desempleo en el último año, en un 18,59% solo superada por Cantabria en la que el desempleo se ha reducido en los últimos doce meses en un 30,07%.

En el último año, el paro ha descendido en todos los sectores especialmente en el colectivo de desempleados que buscan un primer empleo o que dejaron su último puesto de trabajo con 18.500 personas menos que hace un año. También ha sido notable el descenso en el sector servicios con 10.700 desempleados menos, seguido de agricultura con 4.300 y de la construcción con 2.700 desempleados menos. Por último en el sector de la industria el desempleo se ha reducido en 400 personas.

Por provincias, Guadalajara ha sido la única en la que ha aumentado el número de parados: ha cerrado 2018 con 16.600 parados, 2.600 más que hace un año. La provincia de Albacete cerró el año con 33.800 parados, 9.000 menos que hace doce meses. En Ciudad Real la cifra de parados al término de 2018 fue de 38.200 personas, 16.200 menos que en el mismo período del año anterior.

En la provincia de Cuenca se registraron 13.300 parados al finalizar el año, 2.900 menos que hace 12 meses mientras que la provincia de Toledo ha concluido el año pasado con 58.100 desempleados, 11.000 menos que en el mismo periodo del año anterior.

Sin embargo, la brecha de género sigue marcado el empleo en Castilla-La Mancha. El desempleo se ha reducido en 15.600 mujeres en el último año frente a los 20.900 parados menos entre el sector masculino. De hecho, la tasa de paro de las mujeres se situó en 21,56% en comparación con la de los hombres que al cierre de 2018 ha sido del 11,89%

El número de ocupados, al término del año pasado se situó en Castilla-La Mancha en 830.100, lo que supone 30.900 más. Mientras, la tasa de actividad se situó el 59,06%, un 3,87 por ciento superior al del ejercicio pasado.

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