Sanidad y Educación tendrán unidades de atención específica para abordar los problemas de salud mental del alumnado

Sanidad y Educación incrementarán los recursos para atender los problemas de salud mental y malestar emocional del alumnado. Las Generalitat Valenciana habilitará unas unidades de respuesta rápida para mediar entre escuelas y recursos sanitarios y resolver las dudas del profesorado respecto al estado emocional de los alumnos y ejercer de intermediarios entre estos y los profesionales.

Las unidades, que dependerán de la Conselleria de Sanidad, tienen como fin que el personal docente, que ha visto un incremento notable de conductas autolesivas y autolíticas de los menores, “se sienta acompañado en todo momento” y tengan un recurso específico al que acudir para mejorar la atención a los alumnos. Se trata de un canal especializado de derivación y asesoramiento a los profesores y orientadores, además de una vía rápida de enlace para los casos más urgentes, que alivie la tensión en los centros educativos.

El conseller de Sanidad, Miguel Mínguez, ha subrayado que su departamento colabora con Educación mediante protocolos específicos detectando problemas de salud a nivel escolar que se derivan, previo consentimiento de las madres y padres, a las unidades de pediatría y, desde allí, a las unidades de salud mental infantojuvenil. Los responsables de Sanidad y Educación, Miguel Mínguez y Raquel Tamarit, han mantenido un encuentro con el comisionado de Presidencia para el Plan de Salud Mental, Rafael Tabarés, y el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para medir la situación y los recursos a los adolescentes. A la par, se creará una estructura de coordinación entre las conselleries de Educación, Sanidad, Políticas Inclusivas, Justicia y Presidencia -a través del comisionado para el Plan de Salud Mental, adscrito al departamento que dirige Ximo Puig- para trabajar con asociaciones y colegios profesionales. El comisionado coordinará las mesas colectivas y prevé un programa específico de atención a menores relacionado con el suicidio, ya contemplado en el Plan de Salud Mental.

Por parte de Educación, que ha puesto en marcha varias medidas en los últimos cursos, se trabaja en aumentar los orientadores en las escuelas a través del decreto de plantillas que se está negociando con los sindicatos. Además de los recursos extra de los últimos años -más profesorado, formación a los docentes y a los alumnos y planes específicos- la titular del departamento hace hincapié en otros aspectos que influyen en el estado de los alumnos. “Debemos educar gente competente en manera socioemocional”, ha indicado Tamarit, que ha apuntado al proyecto piloto que se implementará en el próximo curso escolar.

El programa va más allá de talleres en la escuela y se basa en el acompañamiento a profesorado, alumnado, familias y agentes de la población vinculados con la salud mental. Es un modelo transversal e integral que aborda cinco ámbitos: autoconciencia, conciencia social, autocontrol, toma de decisiones responsables y habilidades para relacionarse. La idea, apuntan desde Educación, es centrar los esfuerzos en la prevención y detección del malestar antes de que se desborde.