Toque de queda y ministra

Una remodelación de Gobierno con efectos secundarios

Diana Morant entra y José Luis Ábalos sale del Gobierno, un movimiento que desconcierta a los sanchistas valencianos

Los efectos de la remodelación del Gobierno llevada a cabo por el presidente Pedro Sánchez son diversos. Uno de los más llamativos es el desconcierto que ha causado entre los sanchistas valencianos, no solo la pérdida por parte de José Luis Ábalos de su ministerio, sino también de la secretaría de Organización del PSOE, tras haber sido estos últimos años el más fiel aliado del líder socialista. Su salida por la puerta de atrás ha dejado atónitos a los seguidores de Ábalos cuando apenas empezaban las escaramuzas de cara al próximo congreso federal del PSOE, que se celebrará en València del 15 al 17 de octubre, y al congreso del PSPV de unas semanas después.

Si Ábalos perdía pie en el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, del que se ha hecho cargo la catalana Raquel Sánchez, la otra cara de la moneda es Diana Morant, hasta ahora alcaldesa de Gandia, que ha asumido el Ministerio de Ciencia e Innovación. Morant, joven ingeniera en telecomunicaciones con recorrido político en el PSOE, encaja en el perfil de las incorporaciones que ha llevado a cabo Pedro Sánchez a su Gobierno de coalición con Unidas Podemos para el tramo final de la legislatura, una vez superada la crisis de la pandemia.

Dentro del PSPV-PSOE, en la misma medida que cundía el desconcierto de los sanchistas se propagó la euforia entre los seguidores del presidente valenciano, Ximo Puig, que ahora tiene mucho más manejable la negociación del próximo congreso, sin una figura como el secretario de Organización federal como interlocutor. Puig, de todas maneras, se ha mostrado prudente y ha elogiado el trabajo de Ábalos en el ministerio al hacer gratuita la antigua AP-7 y atender las reivindicaciones valencianas relacionadas con el Corredor Mediterráneo. También ha destacado la juventud de la nueva ministra Diana Morant, de quien se han disparado las especulaciones sobre el futuro que le pueda estar reservado en el socialismo valenciano y en la Generalitat. 

Otra vez el toque de queda

El Gobierno valenciano echa mano de restricciones de nuevo para frenar la ola de contagios de COVID-19 entre los jóvenes

El toque de queda, de la una a las seis de la madrugada, ha vuelto 35 días después a la ciudad de València y otros 31 municipios. La ola de contagios que afecta con especial intensidad a los jóvenes ha llevado a la Generalitat Valenciana a echar mano de nuevo de unas restricciones que parecían superadas. Aunque la incidencia de las hospitalizaciones y la mortalidad son mucho menores que en otros episodios de la COVID-19 gracias a que ha avanzado mucho la vacunación de la población, la necesidad de aligerar la presión sobre la asistencia primaria y de recuperar el control de la pandemia han propiciado ese retroceso.

Como ya ocurrió antes, el toque de queda, en tanto que es una medida que afecta a los derechos fundamentales de los ciudadanos, ha sido avalado por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, que ha considerado que es equilibrado y proporcional porque busca afrontar una “situación cercana al colapso” en los centros de atención primaria. Esa actitud de los jueces de aquí contrasta con resoluciones en sentido contrario en otras comunidades autónomas justo la semana en que el Tribunal Constitucional ha considerado, en una polémica sentencia, que el confinamiento inicial decretado por el Gobierno en marzo de 2020 para frenar el impacto del coronavirus no tenía cobertura legal suficiente con el estado de alarma.

“In Spain I trust”

Mónica Oltra se convierte en mediadora para que España regularice a los inmigrantes que llegaron con el 'Aquarius'

Una “autorización de residencia por razones humanitarias” mientras se tramita la solicitud por arraigo. Esa es la figura que la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, propone al Gobierno para regularizar la situación de 50 inmigrantes de los que llegaron a València en el Aquarius hace tres años y que siguen viviendo en territorio valenciano. Para plantear esa iniciativa, Oltra se entrevistó con la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Gloria Calero. La vicepresidenta se ha convertido en una especie de mediadora en contacto con la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y la asociación Aquarius Supervivientes 2018.

Cuando el buque de la organización SOS Mediterranée rescató a 629 náufragos procedentes de Libia en medio del mar y vio cómo Italia les cerraba sus puertos, España se ofreció para acogerlos, en un gesto humanitario. Uno de los migrantes rescatados por el Aquarius resumió el estado de ánimo de todos ellos al desembarcar en València con una frase escrita en su camiseta: “In Spain I trust” (“Confío en España”). Tres años después, España todavía no ha cumplido esas expectativas.

Te puede interesar...

-La educación presencial ha convertido las aulas en un auténtico dique contra la pandemia. Lo recordó el conseller de Educación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, al anunciar para el próximo curso un 15% de aumento del profesorado de la enseñanza pública incluso sobre el refuerzo que ya hubo en este curso pasado, tan especial. La educación pública ha de ser “un motor de cohesiónl”, comentó.

-El pulso de la empresa Ribera Salud con la Generalitat por la recuperación para la gestión pública del hospital y el área de salud de Torrevieja continúa. El Tribunal Supremo ha avalado la anterior reversión del hospital de La Ribera, en Alzira, con una sentencia basada en informes demoledores, y la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública ha puesto por escrito algunas condiciones del paso de Torrevieja a manos públicas. Entre ellas, que no se subrogará al personal que Ribera Salud ha colado en la plantilla en estos últimos meses. 

-Al final, la causa por el amaño del PGOU de Alicante, dentro del denominado caso Brugal, se ha saldado con la absolución de la exalcaldesa del PP Sonia Castedo y leves multas para el exalcalde Luis Díaz Alperi y el empresario Enrique Ortiz.

Jardí de Trini Simó, zona cero del movimiento ciudadano

Se ha presentado esta semana el libro del arquitecto y activista Carles Dolç Del Saler al Túria (Pruna Llibres / El Magnànim), que revisa la historia y la repercusión de los movimientos ciudadanos de València que salvaron el cauce del Turia y la costa de El Saler de la destrucción. Dolç fue uno de los fundadores de la plataforma Salvem el Botànic, que luchó contra la construcción de un hotel en el solar de Jesuitas. También ese movimiento, con perseverancia, logró su objetivo y precisamente estos días el alcalde de València, Joan Ribó, ha hecho pública la convocatoria del concurso para el proyecto de ese nuevo espacio verde junto al Botánico, que llevará el nombre de otra gran activista a favor de la ciudad, la historiadora del arte y de la arquitectura Trini Simó, fallecida hace casi un año.  

L'edició de la Comunitat Valenciana d'elDiario.es té una versió en valencià, que inclou informació general, col·laboracions culturals i articles d'opinió. La pots llegir ací.

Nos vemos.

La redacción de elDiario.es C.Valenciana.