Acnur propone la creación de salas para identificar refugiados en las vallas de Ceuta y Melilla
La delegación española del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ha presentado al Gobierno una batería de recomendaciones para impedir que su frontera esté blindada también para las personas que huyen de los conflictos armados de sus países de origen. Entre ellas, ha esbozado una propuesta concreta: la creación de dependencias específicas, similares a las de los aeropuertos, en las fronteras de Ceuta y Melilla para establecer una forma segura de acceso al sistema de asilo en España.
A través de un documento al que ha tenido acceso eldiario.es, Acnur emite una serie de recomendaciones para corregir las deficiencias detectadas en diversos puntos del proceso de asilo en España: dificultad de acceso al territorio, devoluciones inmediatas sin identificación previa (en caliente), traslados arbitrarios a la Península o los retrasos en el cumplimiento de plazos en los trámites de la solicitud de asilo. Con ello, la delegación española de la agencia de la ONU busca garantizar el acceso al sistema de asilo europeo de los potenciales refugiados que tratan de acceder a Europa por la frontera hispano marroquí.
Una de las propuestas consiste en “establecer un sistema que garantice la posibilidad de solicitar protección en los puestos fronterizos”. ¿Cómo hacerlo? Como ha adelantado la representante de Acnur-España a eldiario.es, la recomendación consiste en establecer dependencias similares a las salas existentes en las zonas de tránsito de los aeropuertos. Son aquellas habitaciones donde, tras expresar su intención de pedir protección internacional, los solicitantes esperan durante un máximo de tres días a que la Subdirección General de Asilo y Refugio -dependiente del Ministerio de Interior- tome una decisión sobre la admisión o denegación a trámite de su petición.
Expulsiones “con garantías”
“En este lugar se les realizarían las entrevistas necesarias antes de admitir a trámite una solicitud, con acceso a asistencia letrada, psicológica etc”, explican desde la agencia de la ONU. Además, según defienden, este sistema permitiría respetar la Ley de Extranjería a la hora de devolver a sus países de origen a las personas que no cumplen los criterios requeridos para recibir protección internacional, una normativa incumplida en la actualidad con las devoluciones en caliente.
De esta forma, aseguran, “se recopilarían sus datos y nacionalidades en el caso de que se tuviese que aplicar el procedimiento de expulsión, que se haría con garantías, como obliga la legislación nacional, los convenios internacionales y el acuerdo bilateral con Marruecos”, ha indicado Francesca Friz-Prguda, representante de Acnur en España.
El documento, enviado al Gobierno en abril, pide el establecimiento de “una discusión constructiva con todos los actores relevantes sobre la gestión de fronteras, incluido Acnur” con la finalidad de construir “salvaguardas para garantizar que dichas medidas no impidan el acceso al territorio” de potenciales refugiados.
“Un sistema de entrada que sea justo y eficaz en frontera sería muy útil para las autoridades. Habría gente que saltaría la valla, pero muchos dejarían de hacerlo”, ha añadido el oficial de Protección de Acnur, Francisco Ortiz.
Acabar con la arbitrariedad de los traslados
Con el fin de “evitar decisiones arbitrarias”, Acnur aconseja la determinación de unos “criterios claros” a la hora de llevar a cabo traslados humanitarios de solicitantes de asilo a la península.
Se refieren a las autorizaciones de viaje especiales empleados por el Gobierno para trasladar a determinados solicitantes de asilo. Es el mecanismo que se ha utilizado en los últimos meses para trasladar con mayor rapidez a los refugiados sirios que llegan a Melilla. Esta medida fue anunciada por el delegado del Gobierno en la ciudad autónoma tras la difusión del caso de Manar, una demandante de asilo siria que, aunque necesitaba tratamiento médico en la Península, su traslado se encontraba bloqueda en Melilla.
En este sentido, la agencia de la ONU considera necesario el desarrollo de “un protocolo donde se establezca de forma clara y precisa el procedimiento de toma de decisión y las autoridades responsables” de los traslados a la península.
¿Por qué es necesario este tipo de salvoconducto especial si se trata de un territorio español? Desde la entrada en vigor de la actual Ley de Asilo, el 1 de enero de 2010, se restringió el acceso a la península de las personas solicitantes de asilo, cuya petición es admitida a trámite en Melilla y Ceuta, constituyendo una vulneración del artículo 19 de la Constitución Española, referente a la libertad de residencia y circulación.
Cumplimiento del plazo legal
Esta prohibición de acceso a la península para los solicitantes de asilo, unida al incumplimiento de los plazos, deriva en un problema determinante del sistema de protección internacional en Ceuta y Melilla: buena parte de la gente que lo necesita no lo solicita por miedo a quedarse bloqueado en las ciudades autónomas durante el tiempo que tarde en tramitarse su solicitud, un proceso que puede durar años.
En este sentido, Acnur exige el cumplimiento del plazo legal establecido sobre la resolución de las solicitudes -seis meses, según la Ley de Asilo española-. En el caso de que se superase, el organismo exige a España que los solicitantes sean “trasladados a la península sin demora”.
Si esto no ocurre, los potenciales refugiados deben permanecer durante meses, o incluso años, en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), cuyas condiciones de acogida no son las adecuadas para “ninguna familia” pero “mucho menos para personas que necesitan protección internacional”, explican desde Acnur.
La agencia de la ONU recomienda en el documento “disponer condiciones de acogida adecuadas para las familias con niños” para garantizar “el principio del interés superior del menor y el derecho a la vida familiar, sobre todo si la estancia se alarga en el tiempo”.
Acnur asegura que está “trabajando con las autoridades” para mejorar el sistema de asilo en España aunque, por el momento, no ha dado detalles sobre la respuesta del Gobierno a sus consejos. Solo menciona la identificación de “mejorías” en relación al cumplimiento del plazo de seis meses en la admisión de las solicitudes de asilo de personas de origen sirio.
